cuatenta y seis

1.8K 99 2
                                    

-Harry.- susurró ella sentándose en la cama de él. Eran cerca de las cuatro de la mañana pero no podía dormir, necesitaba saber qué era lo que le pasaba a Harry, por qué rechazaba la idea de que ella pudiera ver.
-¿Cory?- gruñó él con voz ronca.-¿No podes dormir?- ella negó.- Vení, princesa.
Ella se acostó entre sus brazos y se debatió internamente durante un largo rato.
-¿Por qué no queres que recupere la vista?- soltó de golpe.
Los musculos de Harry se tensaron a su alrededor y ella vio como fruncía el ceño.
-Cory- suspiró él.- había una maestra.- ella vio dolor en sus ojos.- yo me había enamorado de ella,- rió secamente.- era tan raro... ella... Cory, ella se sometió a la operación luego de perder la vista. Nunca volví a verla. No quiero que nada malo te pase....
-No necesito la operación.- susurró ella mirándolo a los ojos y la confusión en ellos dejó paso a la sorpresa.- Puedo verte.
-Cory, no es justo que veas mal solo por mis miedos pero no puedo... no logro evitarlo.
-No, no entendes. Veo perfectamente bien. Puedo leer y mirar televisión como antes.
-No mientas para que me sienta bien.- dijo él serio.
-Dame algo, cualquier cosa y yo lo leo.
Harry rebuscó en sus cajones y le dio una hoja en blanco.
-Harry no hay letras en esta hoja.- se quejó ella. Él tomó una lapicera y empezó a escribir y ella a leer.- la vi, llevaba su pelo atado impidiendo que tapara los enormes cristales, tras los cuales sus ojos se escondian. Su pequeña sonrisa hizo que mi mundo se iluminara y me senti extraño. Llevaba tanto tiempo en la oscuridad que me aterro encontrarla alli. Esa misma noche corri a la casa de mi hermana desesperado, ella no comprendia la razon de mi comportamiento. Fue entonces que le dije "Gemma, acabo de conocer a un jodido angel ¿Es eso posible?"
-Podes ver.- susurró él incrédulo con sus ojos llenos de lágrimas.
-¿Cuando me conociste...?
-Gemma pensó que había tomado mas de la cuenta y me obligó a darme una ducha, ademas de sacarme las llaves de mi auto.- admitió él y luego acunó el rostro de ella entre sus manos.- ¿No lo dijiste por miedo a lo que yo pudiera pensar?
-Necesitaba saber qué pasaba.- susurró ella.
-Tenemos que contarle a los demás.- dijo el feliz.
-Es demasiado temprano, Harry.- murmuró.
Él se acostó en la cama y la abrazó con fuerza.
-Entonces dormí, mi angelito. Cuando nos levantemos vamos a contárselo a los demas.
-Harry- susurró ella.- no sabía qué hacer, creí que no ibas a aceptar que recuperara la vista. No lo dije antes porque... creo que tengo demasiada imaginación.
-Verte ciega estaba volviéndome loco,- admitió él- sólo quería verte feliz y no soportaba que te crearan falsas ilusiones, tenía miedo de lo que podía pasar.
-No poder ver no me volvía infeliz,- susurró ella contra el pecho de él.- me asustaba, si, pero no me volvía infeliz. Lo que no me dejaba dormir era ese rechazo que tenías a que recuperara mi vista.
-No pretendía eso,- susurró él y unas lágrimas cayeron por su rostro.- no quería nada de eso. Solo quería verte feliz, no te das una idea lo que tu sonrisa significa para mi.
-No llores.- pidió ella con pánico en la voz- Por favor, no llores. No soporto verte llorar.
Él la miró y le besó la frente.
-A veces- susurró -veo en vos a la hija que nunca tuve. Sos mi ángel y no te cambiaría por nada ni nadie en este mundo. Te amo y aunque no seas mi hija, te siento como tal.
La chica se durmió entre sus brazos y él cerró sus ojos sintiendo, al fin, algo de paz. Ella, acurrucada contra su pecho, respiraba tranquilamente y él se sentia feliz, después de tanto tiempo volvía a sentirse feliz porque era ella quien iluminaba su vida, quien le demostraba que no necesitaba nada mas que un fuerte abrazo de la persona correcta, para sentirse inmensamente feliz y completo. Después de tanto tiempo, Harry sintió que ese ángel volvía a darle vida.

---------------------------------------------------------

Buenos dias, tardes, noches querid@s lectores. L@s invito a pasarse por mi nueva novela "Mi angel".
Gracias por leer y por todo su apoyo, espero que hayan disfrutado del capitulo.

Yo no tengo padreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora