cuarenta y siete

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Al despertar por la mañana, Cory se tomó la cabeza con ambas manos presa de un dolor insoportable. Se levantó de la cama y bajó las escaleras camino a la cocina.

Liam volteó al verla llegar y sonrió antes de voltearse. Esa pequeña felicidad se había desvanecido cuando un golpe seco le reveló que su hija se había desmayado. Sin perder un segundo, se acercó a ella e intentó despertarla pero no funcionó.

El celular comenzó a sonar y Zayn frunció el ceño molesto. Abrió sus ojos con fastidio y vio el nombre de Liam en la pantalla, suspiró y atendió.

-Hermano, si vas a pedirme que te suba el desayuno...-empezó.

-No, Zayn,- susurró él- están operando a Cory de urgencia.

-¡¿Qué?!-casi gritó.

-Necesito... necesito que vengan.- dijo con miedo en la voz.

Tras cortar la llamada, Zayn, despertó a los demas y les dijo que se vistieran sin explicación alguna y los llevó al hospital.

-¿Qué hacemos acá?- preguntó Niall con fastidio.

-Dejen que Liam se los explique.

Había confusión en sus rostros cuando llegaron con Liam. Él les conto lo que había ocurrido, al parecer el dolor de cabeza de ella habia sido producido por una emorragia interna que le había dejado los ojos inyectados en sangre pero ella, sin notarlo, no le dio importancia. Cuando la palabra "operación" salio de sus labios, Harry comenzó a llorar desesperadamente y a contarles lo de la noche anterior sin saber qué mas hacer. No quería pensar que en que ella estaba ahí adentro siendo operada porque el terror se apoderaba de él, pero no podía impedirlo, ella rondaba por su mente.

-Familiares de Cory Payne.- llamó un doctor y Liam anunció ser su padre.- La paciente ya se encuentra en su habitación, todo salió bien y su vista no se vio alterada, lo que era nuestro mayor temor. Debemos considerarla como una luchadora teniendo en cuenta que no dejó de luchar hasta el último segundo. Además, el tumor fue retirado y ella se encuentra fuera de peligro.

-¿Qué tumor?- preguntó Harry mientras el corazón se aceleraba en su pecho y el aire comenzaba a faltarle en sus pulmones.

El médico dijo que ya no había que preocuparse por eso justo cuando el ataque de asma sufrido por Harry, comenzó a ser notado por sus amigos. Tras tranquilizarse, entró en la habitación con los demás, encontrándose con Niall tomándole una mano y Liam la otra.

-Abrí los ojos.- suplicó Louis.

-¿Y si no veo?- susurró ella.

-Hija, por favor.

Ella suspiró y abrió sus ojos lentamente. Lo primero que vio, fueron los ojos rojos e hinchados de Harry que estaban clavados en ella.

-¿Alguna vez mencioné que odio los hospitales?- bufó ella arrancando unas pequeñas risitas.

-Creo que... un millón de veces.- dijo Niall besándole la mano.

- ¿Y que no me gusta que me miren tanto?

-Eso también.- rió Zayn sentándose junto a los pies de ella.

-Creo que ya no tengo quejas.- sonrió ella y acarició la mejilla de su padre.- O me estoy volviendo vieja y me las olvido.- rió.- Ya sé me van a ocurrir nuevas, de todas formas.

Tras estar todos mas relajados, ella se sentó en la cama y se quedó jugando con los dedos de Louis nerviosamente, sabía que Nick estaba en camino con sus amigos y ellos se asustaban demasiado con estas cosas.

La puerta se abrió y entró primero Nick, luego Cody y por último Luke con su asquerosa rubia oxigenada. ¿Qué demonios hacía ella ahí?

Yo no tengo padreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora