Denki nunca había estado tan nervioso como en es momento, hacia casi un mes que había entregado aquella carta hecha con su puño y letra al pelirrojo y mágicamente todo había mejorado considerablemente.
Eijirō había trabajado duro y ahora volvía a ser el mismo de siempre.
Sus hermosas sonrisas iluminando sus días, sus preciosos “Buenos dias” dichos con entusiasmo, sus ojos...
Sus brillantes ojos rojos viéndolo.
A él.
No a Bakugou.
A él.
La calidez de su mirada acariciándolo como si se tratase de la tela mas suave que jamas haya tocado su piel. Su cabello bien cuidado y teñido el cual podía acariciar y que era tan suave como lo había imaginado. Sus hermosas sonrisas y risas provocadas por él, aquella calidez que emanaba al sentarse juntos a ver algún programa en la sala común.
Sus abrazos espontáneos.
Sus paseos por los jardines de la U.A.
...
¿Cuando...?
¿Cuando Eijirō se había vuelto tan cercano a él?
¿Cuando había empezado a mirarlo como si fuese lo mas hermoso que haya pisado la tierra?
¿Cuando había dejado que tocara aquel sedoso cabello, reclamándole cuando no lo hacia?
¿Cuando había empezado a abrazarlo sin razón alguna?
¿Cuando había empezado a ser correspondido de manera tan indirecta?
Denki parecía brillar con mas intensidad que el sol y tener aquella personalidad eléctrica, mas activa de lo que alguna vez la tuvo. Se siente bien de sólo recordar los brazos del pelirrojo rodeando su delgado pero fuerte cuerpo, y el sonrojo se apodera de su rostro de solo imaginar que poco a poco, quizás si se cumpla su mas anhelado sueño y deseo de su corazón.
Siente su corazón latir de manera desenfrenada y siente que quizás podría darle un infarto, pero debido a la electricidad en su cuerpo, eso es algo muy normal.
—¿Denki?—escucha que hablan a su lado, pero el rubio esta tan perdido en sus pensamientos que no nota quien le habla.— ¿Denki?
Lo llaman por segunda vez, pero él parece perdido en el mundo mágico de sus fantasías.
—¡Denki!—exclaman cerca de su oído sacándolo de su creciente ensoñación y rápidamente parpadea, perdido.
Desvía la mirada de aquellas rosas rojas que se había detenido a observar y voltea el rostro hacia la persona que había estado llamándolo recientemente.
El sonrojo se extiende por su rostro en el momento en que cae de vuelta a la realidad, Eijirō lo esta mirando. Tiene sus ojos como gemas preciosas y brillantes, clavados en sus ambarinos llenos de electricidad.
Siente las piernas débiles y sus manos sudan.
Eijirō esta a su lado vistiendo ropa casual, que aunque no combina para nada y el pelirrojo tiene un pésimo sentido de la moda, lo hace ver increíblemente bien.
Denki lo observa por un rato que parece eterno y Eijirō se permite perderse en el particular brillo que desprenden, los ojos ambarinos del contrario, su semblante sorprendido y aquel atuendo de camisa blanca, pantalones negros y vans, lo hacen lucir increíble, aunque sean prendas básicas.
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Notas- (Libro 2) ✓
RandomEijirō kirishima a encontrado el teléfono de Denki Kaminari. ☀Leer el libro 1 para entender mejor. ☀Kirikami ☀Personajes de Kohei Horikoshi