ELIO ━ harry styles.

20.

CAPÍTULO 20.

–¿Entonces me estás diciendo que tu ex es Harry Styles? –Tom abrió los ojos como plato cuando se dio cuenta de lo que estaba saliendo de su boca.

Felicity había ido a la casa de Tom quince días después de su conversación con Harry. Durante ese tiempo, estuvo saliendo con Tom, ayudando a Elio con sus tareas y pasando tiempo con Harry. Lo usual. El día anterior, el cantante le había sugerido a Felicity que le presente a su nuevo enamorado. La castaña se sonrojó al escuchar la etiqueta, pero frunció el ceño al escuchar que Harry lo quería conocer.

–¿Estás seguro? –preguntó ella un tanto confundida.

–Por supuesto, quisiera conocer al hombre que te tiene tan feliz. –Harry le guiñó el ojo.

Y era verdad. Después de cada cita que tenía con Tom, Harry pasaba a visitarla para pasar el rato, y siempre se encontraba con una sonrisa boba de parte de ella. Él se interesó por saber qué tenía de interesante aquel otro británico y simplemente soltó la idea.

Es por eso que Felicity decidió contarle sobre Harry a Tom.

–Así es. –contestó con una risa tímida y un tanto incómoda.

–Todo lo que me contaste sobre aquel chico, ¿te referías a Harry Styles? –preguntó Tom nuevamente. Felicity asintió.

–Sí, ahora somos amigos, así que todo está bien entre nosotros. Incluso me dijo que esperaba poder conocerte. –la castaña sonrió esperando a que Tom acepte.

–¿Estás segura de que... no sé, podamos conocernos? –preguntó él un tanto confundido ante lo que Harry le había pedido a Felicity.

–¿Por qué no?

–Pues, soy el nuevo novio de su ex novia, ¿no sería un poco raro? –preguntó el nuevamente.

Felicity lo pensó. No lo había visto de esa manera. Las cosas con Harry iban tan bien que ya había comenzado a olvidar que ellos habían tenido una relación bonita antes de todo el drama. Sin embargo, ella estaba en otro capítulo en su vida y quería que ambos se conocieran para que Harry pudiera estar tranquilo antes de volver a su vida agitada en Los Ángeles.

Ella tomó de su copa de vino e hizo una mueca pensando.

–No lo creo. Harry y yo ya hemos decidido a que seremos amigos y solo eso. Además, él sabe que yo estoy en otra relación. –alzó los hombros. A pesar de que le inquietaba un poco el tema, sabía que Tom tendría ese tipo de preguntas. Ella solo quería dejar todo detrás y que todos pudieran llevarse bien sin interferir sentimientos.

–Está bien, acepto entonces. –Tom asintió acercándose a ella y dándole un beso en los labios.

Aquella noche, Felicity volvió a casa con una noticia y cuando abrió la puerta de la sala, no se sorprendió ver a Harry jugando con Elio. El cantante pasaba todos los días en la casa de la castaña y eso era de una gran ayuda para Felicity. La rutina de la británica era: levantarse temprano y alistar a Elio para que vaya a la escuela, luego preparar el desayuno con la ayuda de Sylvia, finalmente deja a Elio en la escuela para después pasar por su trabajo en donde se queda todo el día. Sylvia se encarga de recoger a su nieto y, ahora con la ayuda de Harry, Elio se queda toda la tarde haciendo sus tareas junto al cantante y sus historias de sus conciertos que parecían ser entretenidas para Elio.

–¡Mami! –el pequeño se levantó del piso de su habitación en donde estaba coloreando junto a Harry.

–Hola, mi amor. ¿Cómo estuvo tu día? –le preguntó a su hijo. Elio le comenzó a contar todo lo que había aprendido en la escuela mientras jalaba su brazo para sentarse en su cama.