AMY HOWKINS
Voy corriendo a mi casa, se me está haciendo tarde para ir a trabajar. Digamos que la hermosa profesora de química - nótese el sarcasmo - me castigó haciendo que saliera tarde de la escuela. Tengo un trabajo de medio tiempo y mi hora de entrada es a las cuatro, y ya son tres y media. Pero eso no es lo peor, lo peor es que me hago quince minutos de la escuela a la casa, me tengo que ir a poner mi informe y dejar mis cosas en la casa, y luego me hago otros quince minutos de mi casa al trabajo. ¿Saben qué es lo peor?, ¿No?, Bueno yo les diré, lo peor es que está lloviendo. Mi madre me dijo que me llevara la sombrilla pero yo solo le dije que no la necesitaría, en éste momento me arrepiento de no haberle hecho caso. Ja, siempre háganle caso a su madre y llevénse una sombrilla, esas señoras saben cosas.
Me detuve en una esquina para tomar un poco de aire, mi pecho me dolía de tanto correr, no me juzguen, la actividad física no es lo mío. Ví el semáforo y este está en color rojo, un chico que estaba a mi lado se paró y preguntó algo que no entendí. Ya iba a pasar la calle cuando en eso vi que venía un auto a alta velocidad y sus intenciones no eran detenerse. Me quedé esperando a que el auto pasara pero al instante veo que el chico iba a cruzar la calle - ni corriendo alcanzo a llegar al otro lado de la calle sin ser aplastada -. El auto ya lo iba a dejar como Stiker, pero como la buena persona que soy y como no quería ver a alguien morir, lo tomé del brazo y lo jalé hasta la banqueta.
-Suéltame - se quejó.
-Se dice, gracias, idiota - espeté, rodando los ojos.
-¿Gracias? - se veía desentendido - ¿De qué?
-¿Cómo que de qué? - alcé un poco la voz - te acabo de salvar la vida. Oh, espera...¿Tu querías morir? Porque si es así deberías de buscar otra manera, no lo sé...tirarte de un puente en la noche o colgarte en tu habitación.....ah, ya se, puedes....
-¿Qué? No - dijo, horrorizado y frunció el ceño -, soy muy joven para morir. Oh, ya entiendo - hizo una leve pausa - casi me atropellan, ¿No es así? - asentí con la cabeza, dudosa - ¿Sigues ahí?
Esperen, acaba de decir...mierda, ya entiendo. Éste chico... la razón por la que casi es aplastado.
-Ah, si - dije, de inmediato - pero...
Iba a decir algo, pero él me interrumpió.
-Ja, pensé que había alguien a mi lado, había preguntado si venía auto, pero nadie me respondió.
¿Así que eso fue lo que preguntó? Pensé que había dicho alguna otra cosa. Me siento mal de no haberle respondido pero siendo sincera estaba más concentrada en no desmayarme por haber corrido tanto que en lo que me había dicho.
-Bueno, yo me tengo que ir - él chico frunció el ceño, confundido - adiós.
-No, espera - dijo, antes de que pudiera dar un paso - ¿me puedes ayudar a cruzar la calle? Por favor.
Miré el reloj que adornaba mi muñeca y me di cuenta de que solo tenía cinco minutos para llegar a mi casa o iba a llegar tarde al trabajo. Miré al chico y él tenía la mirada hacia enfrente, esperando a mi respuesta.
-Está bien - no me costaba nada pasarlo al otro lado de la calle - vamos.
Tomé su brazo, él se tensó por un momento, pero se relajó unos segundos después. Caminamos hasta el otro lado de la calle. Cuando llegamos a la acera, me detuve y lo solté.
-Hemos llegado.
-Gracias - dijo, con una sonrisa de boca cerrada - por cierto, ¿Sabes cómo llegar a...
Lo miré curiosa. Su mirada se veía pensativa.
-Lo olvidé - dijo, entre dientes - he olvidado donde vivo.
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KENNETH & AMY [TERMINADA]
Teen FictionAmbos se conocerán de una manera muy poco convencional, Amy se dio cuenta que Kenneth siempre ha vivido en la oscuridad. Ella se encargará de enseñarle a vivir, que detrás de toda esa oscuridad hay una vida llena de luz y hay mucho que explorar.