¿Fue buena idea?

919 60 0
                                    


Todo empezó con una chica bastante linda que se encontraba en una de las bancas de la escuela, mirando lo hermoso que se veía el cielo nublado, no era temporada de lluvias, pero para ella era lo más maravilloso del día.

Ese día iba llegando tarde a clases, la escuela no quedaba tan lejos de su casa, pero aun así tenía la mala costumbre de llegar tarde por ser muy distraída.

-¡Vamos Tzuyu! Se nos hace tarde-grito Chaeyoung casi sin aliento.

-Esta bien enana, pero tranquilízate, todavía no han tocado el timbre.

-Si, pero ya sabes cómo es el maestro de literatura, dos faltas más y nos reprueba la materia.

Para la taiwanesa el día calificaba para ser perfecto, clima perfecto, horario perfecto. Excepto por las clases, en eso no se podía cambiar nada, todo era rutinario y aburrido, por suerte uno de sus profesores falto antes del receso y tenían una clase libre. La taiwanesa se encontraba leyendo un libro, mientras su mejor amiga hacia dibujos en una libreta de la taiwanesa.

-¡Vamos Dahyun! No puedo creer que te esté rogando para que vayas conmigo en un evento importante para mi familia, se supone que eres mi novia.- se escucharon por toda la clase los reclamos de Momo.

-Momo, tu sabes más que nadie que en verdad quiero ir contigo, pero mamá quiere que me dé una vuelta por la casa de su mejor amiga, y sabes perfectamente que la Sra. Minatozaki es como una tía para mi.-suplico Dahyun.

-¡Esta bien, Dahyun! Ya entendí que tu prioridad son otras personas que no tienen nada que ver contigo.

-Momo...-insistió Dahyun, la pelinegra se había ido indignada, y la pelirrubia iba tras de ella.

-Ellas siempre se la pasan discutiendo aquí, no conocen otro sitio.-dijo Chae, rompiendo la concentración que tenía Tzuyu con su libro.

-No me interesa que suceda en sus vidas, el espacio es muy grande y si ellas quieren divulgar sus cosas frente a otros, no me importa.

-¡Vamos Tzuyu! La gente de hoy en día vive del chisme, hasta en Facebook ponen puntos para saber la historia o el desenlace de algo.

Tzuyu vio con ironía a la más baja, dándole un golpe en los hombros.

-¿Qué harás terminando después de Clases? Quizás podamos ver una película o armar rompecabezas, o no sé lo que tu digas.

-Sabes que me gustaría, pero saliendo tengo que ir a trabajar, las pizzas no se entregaran solas -respondió - y de ahí tengo que cuidar de mi abuela.

-Cierto... la Tzuyu trabajadora, espero que tu abuela este mejor ¿Y Cómo te va en tu trabajo?

-No tan bien, el tonto gerente cada día amenaza con correrme, sabía que no era de su agrado, pero por necesidad tengo que soportar su presencia. -contesto sin alguna preocupación.

- Lo único bueno que tiene esa pizzería eres tu, estoy segura que toda la gente que va ahí es por ti, solo mírate eres alta, bonita, perfecta, deberías estar trabajando en otra parte.

-Gracias por tus halagos Chae, pero no es tan fácil entrar en otros trabajos, primero porque soy menor de edad y en segunda también soy estudiante, es muy difícil que te contraten por eso y más que te den medio turno, pero tampoco soy negativa, siempre busco una oportunidad.

-¿Si sabes que por cualquier cosa cuentas conmigo, verdad?

-Si, lo sé.

(...)

-Gracias por invitarme a comer, pero sigo enojada contigo.-recalco Momo.

-Momito, perdón, en verdad, si encontrará una manera de como librarme de ese compromiso lo haría.

Déjame caminar contigo - SaTzuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora