No es No

226 34 5
                                    


Para Sana caminar por si sola era una tarea que se requería un gran esfuerzo, pero se sentía bien haciéndolo por su cuenta, eso ya era un paso, su hermana siempre estaba con ella en todo momento por si ella tropezaba. 

Nayeon no despejaba de su vista en cualquier momento que Sana la necesitase. Su hermanita no era una inútil, pero le preocupaba, ella era su responsabilidad. Ambas chicas llegaron al comedor y cada quien tomaba su lugar.

-Te apuesto cinco dólares a que mamá vendrá con una cara de pocos amigos-hablo Nayeon

-Eso no es justo, tú siempre sabes que es lo que le pasa y yo no, harás que te deba mucho más que cinco dólares. -puchereo Sana.

-Es lo justo-dijo-pero ayer tuvo una mala tarde, creo que mamá atropello a alguien.

-¡Yo no atropelle a nadie!-ambas chicas se asustaron pues la dueña de la casa las había escuchado.-Ella se atravesó, no estés diciendo mentiras Nayeon, jamás haría algo como eso.

-Lo siento, pero no pude evitarlo, casi nunca te alteras de esa manera, ni conmigo que siempre te he dado sustos cuando no me veías en mi cuarto.

-Ayer no fue mi día, tenía demasiado trabajo y luego esa muchachita apareció de la nada y nos culpó de atropellarla, si vieran como se victimizo frente a todos, en serio Nayeon, ese tipo de muchachas no son de mi agrado, sería una mala influencia para ustedes.

-Jeongyeon es problemática y nunca te ha dejado así. -dijo Nayeon.

-Jeongyeon es una chica muy inteligente, educada y adorable. Y ni se diga de Dahyun ¿cierto Sana?

-Sí, Dahyun es muy linda.

-¿Lo ven? Muchachitas como Jeongyeon y Dahyun son el ejemplo de una persona con valores, no son problemáticas y no se prestan para calumniar a la gente.

-Claro, Dahyun es un encanto. -dijo Nayeon en forma sarcástica, pero su madre y su hermana no lo habían notado. -Hablando de Dahyun, ¿Te ha dicho cuando vendrá?

-Si, vendrá este domingo, su madre ya me lo confirmo.

-¿En serio? Mamá ¿por qué no me lo dijiste antes? -pregunto Sana con un tono preocupado casi levantándose de la mesa- Debo estar escogiendo mi mejor ropa, usar maquillaje y verme bien. ¿Nayeon podrías ayudarme en eso otra vez? Aquella vez que vino, no sé si me vio bonita o si me vio fachosa, quiero que ese día sea diferente.

-Tranquila Sana, Dahyun no es así, ella es un encanto y verte arreglada o no, no será un problema para ella.

-Ya lo sé, pero quiero que me vea diferente, que vea que yo también puedo ser como las otras chicas.

-Jamás te vi tan entusiasmada con alguien.

-Es porque Dahyun me da motivos para arreglarme, ella si es buena mamá.

Nayeon presenciaba la linda escena de su madre y su hermana hablando sobre cosas así, aunque no podía evitar no preocuparse por Dahyun, la chica que tanto halaga su mamá no era Dahyun, y la verdadera Dahyun vendrá el domingo, así que tenía que hablar seriamente con ella, dándole unas cuantas advertencias si molestaba a su hermana y sobre todo disculparse por mandar a otra persona.

-Sanita-dijo, chocando con la vista confundida de su hermana.- Tú eres una chica muy hermosa ¿Lo sabías?

-Sí, después de ti.

-Exacto.

Las tres rieron, siempre tenían un agradable ambiente familiar.

(...)

Déjame caminar contigo - SaTzuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora