Los peones le sirven al rey y la reina, la pregunta en esta historia es: ¿Quiénes son los portadores de esos títulos?
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Un pueblo escondido, repleto de mentiras y secretos.
Una familia que era obviamente el peligro presente.
Una chica ingenu...
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Fallon
"-Algunas veces, te atacaran por la espalda. Aprende a escuchar, te ayudará cuando estés en la oscuridad. Aprende a sentir, te ayudará cuando tus manos estén atadas. -Acariciaba sus bucles rojizos, mientras él me hablaba y enseñaba-. La oscuridad no es el único peligro, la luz también lo es, ya que esta puede cegarte.
-¿Y si yo no puedo correr de ninguna?
-Puedes con todo, mi pequeña Fallon -papá me ponía flores en el cabello, mientras yo lo manchaba de mermelada-. Eres tan fuerte como yo y tan dulce como tu madre, una combinación perfecta.
-Tengo miedo de los monstruos...
-No le temas a lo que no existe, témele a lo que ves en carne y hueso. No hay peor monstruo que el ser humano.
-¿Somos monstruos?
-Lo somos o resguardamos uno en nuestro interior.
-Is breá liom tú Papa -elevé mis brazos para que me levantara.
-También yo, mi pequeña."
Mi pecho late con fuerza, el auto se mueve a toda velocidad, mientras Roman y Edmon tienen furia destilando de su mirada. La oscuridad se ha apoderado de ellos, pues ahora veo un peligro en su sola presencia. Lo que sea que pase en sus cabezas, no es bueno, y, de hecho, me alegra. Están como leones salvajes, lo que indica que están dispuestos a masacrar a quien se ponga en su frente. No son los únicos con enojo, algo en mi cuerpo está ardiendo y quiere salir para deshacer todo a mi paso.
Roman no deja de mirar el camino. Edmon sacó dos hachas de la casa Virret, no había armas de fuego, ellos sólo cuentan con armas blancas y eso es algo que me preocupa. No tenemos ni una pistola, pienso en todas las desventajas, lo probable es que los Virret, y quien sea que esté de su lado, estén armados hasta las orejas. Muerdo mi labio ante el desespero. Analizando que invadieron la mansión, es una gran alerta, porque despistaron todo lo que los Piers tienen dentro. Esto se va a descontrolar.
No tenemos plan de llegada.
No tenemos ni idea de quién estará ahí.
No tenemos buenas armas.
Estamos caminando en una cuerda floja, con los ojos vendados y con un abismo que de seguro espera nuestra caída.
Sobo mis sienes, la cabeza me duele con más fuerza y me mantengo pensativa ante los pros y contras de todo esto. La palabra 'desventaja' se repite como un eco, es claro que al no estar presentes, ellos ya debieron tomar medidas drásticas para defenderse. Me matarán en cuanto ponga un pie en la mansión, aunque lo dudo, Carla va a querer torturarme con el hecho de verme. «No les tengo miedo» enfrentarlos no es un problema, hacerlo sin saber el peligro, eso si es algo que me va a destruir.
