༒︎ REVELACIONES

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Fallon

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Fallon

Así como mi cuerpo de hunde en el agua, de la misma forma me hundí en engaños y secretos. Obvios para otros, muy bien escondidos para mí. Tal vez todo estaba predestinado. Tal vez todo siempre estuvo arreglado. No tengo ni la menor idea. Sólo sé, que mi cuerpo necesita moverse y salir a superficie antes de que el agua llene mis pulmones. He intentado contener la respiración, pero algo no me deja. Siento el cosquilleo en mis dedos, puedo sentir frío y ruego por poder moverme rápido. Han pasado minutos o podrían ser simples segundos, pero siento haber estado ahogada una eternidad.

Todo mi interior arde, es como un dolor físico y emocional. ¿Estoy destruida? Aún no.

Ya no aguanto más, mis ojos se van cerrando «ella me traicionó, no le importó que yo fuera su hija» y noto que el agua está entrando más en todo mi sistema. «Aún quiero que sea una pesadilla» También quiero salir. Mi cuerpo se va removiendo un poco, al menos eso parece. El agua no me permite reaccionar del todo, pero logro votar algunas burbujas. Cuando siento que todo se va a acabar, un chapuzón se escucha, pero es lo último para mí. Todo se hace negro y estoy más perdida que no sé qué.

—¡Fallon!

¿Estoy consciente? Mis pulmones arden cuando escupo el agua. El aire que lucho por hacer llegar, es muy difícil de tomar, corta mi garganta. Mis ojos se abren y no puedo dejar de hiperventilar. Los labios de Logan están muy cerca de mí, mientras que veo a los hermanos a mi alrededor; el único que no visualizo, es Greyson, quien le grita a Pheyton que es una traidora y mentirosa.

—¿Fallon?

Mike está llorando a más no poder. El chillido que escapa de sus labios me ensordece, pero me ayuda a volver a la consciencia completa. «¡Todo es una mierda!» tomo bocanadas de aire fuertes y me digno a levantarme.

—¡Ella no tiene nada que ver, Greyson! —toso más. El agua sigue saliendo, como si me hubiera tragado litros. —¡Mi madre! ¡Fue ella! ¡Siempre lo fue!

—¡Mi padre ayudó a Kásea, yo no! —Pheyton empuja a Greyson y corre a abrazar al niño rubio—. No sé por qué y mucho menos cómo me dejaron ir. Pero no tengo nada que ver en esto.

—¿¡Cómo puedes asegurarlo!?

—Porque yo también lo estoy diciendo, Greyson —me detengo frente a él—. Ella es inocente, pero su maldito padre no.

A mi amiga le molesta el término que empleo, pero es lo de menos. En este momento, quiero ver correr la sangre de todos. Sin importar quienes sufran a mi alrededor. Egoísta, un actitud que he tomado de los hermanos.

—Fallon, lo siento tanto. Yo no sabía. Te juro que no. Yo... yo ni lo sospechaba. Y luego él no...

—Te creo, Pheyton, pero en este momento no estoy para pensar en eso.

—Puedes quedarte aquí con Mike, linda —Zillah le limpia las lágrimas—. Tranquila, todos fuimos engañados, pero también tú y es justo que te sientas triste o enojada.

Belleza CarmesíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora