Eres Para Mi

Capítulo 33

Algunas semanas después...

Clarke

Abro mis ojos aún somnolienta, la luz me deslumbra. Me froto un poco los ojos y estiro la mano buscando el celular, pero en vez de eso, encuentro una linda chica de ojos verdes aferrándose a mi mientras duerme plácidamente.

Observo sus rasgos y una vez más pienso en lo tranquila que se ve mientras duerme.

– Buenos días – dice acomodándose más cerca de mi

– Buenos días – respondo - ¿Dormiste bien?

– Mmjj – dice con los ojos cerrados

No respondo, pero sí sonrío y ella parece percibirlo porque también sonríe. Nos quedamos un momento así, ella abrazada a mí y yo sonriendo, pero unas ganas de hacer pis me invaden e intento pararme, pero me retiene abrazándome de mi cintura.

– Lex, necesito hacer pis – digo para que me suelte

– Y yo necesito que te quedes aquí – me abraza más fuerte

– Voy rápido y regreso

– Noo – hace un puchero y me rio, pero me dan más ganas de hacer pis

– Lex, en serio, voy rápido y regreso y si quieres nos quedamos toda la mañana acotadas juntas

– Vale – me suelta y voy corriendo al baño. Hago lo que tengo que hacer y salgo, pero no la veo acostada.

De la nada me abrazan por detrás y me tiran contra la cama. Las risas invaden la habitación cuando comienza a hacerme cosquillas.

– Para, para – dijo entre carcajadas

– Hoy tu haces el desayuno y yo escojo la película – da sus términos

– Sabes que se me quema hasta el agua – logro decir

– Bueno, entonces pedimos algo a domicilio pero yo escojo

– Esta bien, está bien – deja de hacerme cosquillas, pero sigue encima de mí, sonriendo. 

El sol le da en la cara y hace que sus ojos verdes se vean más claros y grabo esa imagen en mi cabeza 

– Pero ni loca dejo que escojas la película que tienes gustos medios raros – hace una cara muy graciosa haciéndose la "ofendida"

– ¿A si? – vuelve el ataque de cosquillas como venganza

– Para, para... jajajajajajajaja, para por favor

– Di que tengo los mejores gustos

– Jamás – las cosquillas siguen y sé que no va a parar – bien, bien, tienes los mejores gustos – en seguida para y tengo exactamente la misma visión de ella en la misma postura.

Ambas sonreímos, yo sigo controlando mi respiración.

– Te mueves como pescado

– No es cierto – niego

– Sí – dice y se acerca más a mi

– No

– Sí – sus labios están más cerca de los míos y cuando está por besarme...

– ¡Clarke! ¡Clarke! – se escuchan los gritos que vienen de las escaleras y después la puerta se abre – Clarke, despierta -

Mierda. Maldigo mentalmente a quien sea que me haya despertado en el mejor momento.

Abro los ojos y veo a mi madre abriendo mis ventanas.

– Ya es muy tarde para que sigas dormida – me siento en la cama y froto un poco mis ojos – ¿Dormiste bien? – pregunta mi madre sentándose junto a mi