favorite crime; keisuke baji || htrsxl.

08. daddy issues.

—¿q-q-qué hac-?— iba a preguntar alterada y completamente en shock pero antes se giró a cerrar la puerta de su habitación esta vez con seguro y luego corrió a ayudarlo.

—t-ten, te traje esto— gimió cansado baji, enseñándole la bolsa y sam se alteró al ver el estado de su mano, mientras de fondo se escuchaban sus padres gritarse.

—siéntate, traeré alcohol.— dijo sam saliendo de la habitación, para luego volver con algodón, alcohol y una benda. Entre tanto baji comenzó a recorrer el amplio dormitorio de sam, parecía todo ordenado y lindo. Algo espacioso y con un gran closet.—ven.— dijo cerrando con seguro detrás de ella.

—no es necesario, ya me voy.— dijo caminando hacia la ventana mientras seguía inspeccionando la habitación.

—no, no, en cualquier momento mis padres pueden salir y verte, o escuchar un ruido, salen y te ven, te encontrarían y me matarían, nos matarían.— corrigió nerviosa y tomando la mano ajena lo sentó en su cama. 

El chico sin decir nada algo ofendido y sintiéndose encarcelado no tuvo más remedio que tomar asiento en la cama de sam, mientras ahora la miraba con atención en como la chica comenzaba a empapar el algodón de alcohol y luego pasarlo por sus nudillos. El alcohol ardía como mil carajos en sus heridas pero no mostraría ningún signo de dolor frente a la chica que tanto le llamaba la atención, sin embargo mientras se perdía en la imagen de la chica fue inevitable que se le escapara un gemido de dolor que lo hizo sonrojar, sin embargo sam no le prestó atención, por suerte estaba muy enfocada en limpiar la herida.

—gracias por traer la bolsa, pero me la hubieses entregado mañana.

—¡eres una mierda, siempre lo has sido, hablas de moral frente tu misma hija, descarada!— gritaba el padre de sam haciéndola sentir totalmente avergonzada por la escena que ocurría de fondo en presencia de baji.

—ah, ya sé porque estabas triste, y te entiendo sam.— dijo baji tratando de poner un tema de conversación para evitar que sam se avergonzara de los ruidos, mientras ahora miraba la alfombra de la habitación.

sam rio falsamente incómoda pero confundida—¿a que te refieres?

—que mi padre también engañó a mi mamá, bueno, lo tuyo es al revés.—dijo baji evitando mirarla creyendo estar haciéndolo muy bien.

Sam miró el perfil del chico totalmente seria, sin entender lo que hablaba.—¿qué?

—porque vi a tu mamá besars-— baji se calló cuando entendió que esa era información nueva para sam, quién se quedó un largo momento quieta, sólo mirando los nudillos de baji, para luego bendarle en completo silencio, habiendo entendido lo que decía el chico y como calzaba en los gritos que se daban.—(...) lo siento sam.

sam pensaba y recordaba todas las veces que le pedían ser casi perfecta, de seguir al pie de la letra las reglas, de siempre pensar comprensiva con sus padres cuando ellos le fallaban, de siempre ser sincera con ellos, comportarse humanamente para algún día ser como los "perfectos" de sus padres. recordaba de la manera en que su madre hablaba de baji y su pandilla, quienes resultaban más decentes que ella. una rabia comenzó a crecer dentro de sam, como dándose cuenta de una gran infidelidad de parte de sus padres con ella, que la obligaban a hacer y ser alguien que ellos jamás habían hecho o sido y teniendo la capacidad aún así de juzgarla a ella o al resto.

baji como si estuviese leyendo sus pensamientos, entendiendo por lo que pasaba (ya que él ya lo había pasado) habló creando un contacto visual lentamente.—a todos nos ha pasado, solo que tu estuviste en la burbuja por más tiempo.