favorite crime; keisuke baji || htrsxl.

18. Último día.

Hoy era el tercer y último día en el paseo.

—Sam, ¿estás bien?— preguntó hina mientras se alistaban con sus trajes de baños.

asentí algo molesta.

—¿no vendrás?— preguntó emma y las miré sin ganas bajo de las tapas de mi cama.

—no parece que fuese a ir, Emma.— respondí algo seria.

ambas se miraron algo confundidas por mi actitud y sin más se retiraron.

¿me pasaba algo? sí, desde luego, no entendía el cambio ayer de Baji, ¿que le pasaba?, es decir, no iba a hacer nada que él no me hubiese hecho o consentido, pero, ¿andaba todo bien?, no lo sé. No, sí lo sabía. Nada estaba bien, no éramos novios y nos tratábamos como tal, bueno, de su parte, hasta que censura la mía.

No quería salir este día a la playa, ver a todos bañándose y disfrutando el día ahora despejado y encontrármelo de frente, me avergonzaría demasiado.

Debí haber parecido una idiota.

Me envolví nuevamente en las tapas de la cama y esperé a que acabara el día, ya que por fin en la noche nos iríamos de vuelta a la ciudad, para mañana en la mañana estar ya en casa.

Luego de dormir una siesta en la tarde tomé mi celular para ver que horas eran. Las 17:30 y nos íbamos a las 19:00. Lo bloqueé y luego suspiré aburrida y cansada. Tomé nuevamente el celular y fui a Instagram y me llevé una tremenda sorpresa al notar que contaba con 439 seguidores y mis imágenes se llenaban de comentarios tiernos, tales como: "Ella es muy linda!!", "luce hermosa en el kimono!!" y parecidos, luego me estremecí al ver la imagen publicada de Baji sonriendo en la canoa, noté comentarios y entre varios uno de Hina.

"así que es por eso que faltaba una canoa..." 

no pude evitar sonreír.

Luego fui al carrete de imágenes tomadas por cámara y me quedé un momento apreciando las imágenes que se había tomado baji, en una pude ver que había tomado algunas de mi descuidada, y finalmente una selfie donde mostraba su papada haciendo caras "chistosas" adrede.

Bloqueé nuevamente el celular y me quedé mirando el cielo raso.

Sólo había una manera de sacar este sentimiento de confusión, puesto que sino se haría más grande.

Hablarlo.

(...)

—Oye, ¿estás?— una voz me interrumpió mientras estaba de pie.— estás haciendo una fila tremenda.— miré a la pelirroja que parecía molesta y miré hacia atrás.

Una fila se desprendía detrás de mi, me avergoncé y de inmediato deposité mi maleta en la gran cajuela del bus y me subí a tomar asiento.

No había visto a Baji desde ayer, ya estábamos por irnos, por lo que a ratos daba una mirada al asiento en el que se había venido al llegar al paseo, pero nada. El bus arrancó y ese asiento estaba vacío, lo que me hizo preocupar.

Tomé mi celular y abrí el chat vacío y nuevo de ambos. Tomé coraje y comencé a redactar.

"Baji, ¿estás bien?" leí el mensaje pero no me convencía.

"estás en el bus?" tampoco me convencía, quizás me vería muy intensa, y ya me había dejado como tal ayer, por lo que confié en que estaría bien, después de todo, si algo le hubiese ocurrido ya sabría, tampoco es que él no pueda cuidarse solo.

ya sabía, no le dirigiría la palabra hasta que el lo hiciera, si lo hace, significará que le importo, y si no lo hace, será que sólo me quería para ratos y me habré librado.