•☪|| 𝑴𝒀 𝑻𝑰𝑴𝑬. | 𝓙𝓮𝓸𝓷 𝓙𝓾𝓷𝓰𝓴𝓸𝓸𝓴 //

•°◤40◥°•

Capítulo 40

"Primer plan."

Podría ser absurdo recordar cuan dolida y furiosa estaba la familia Kim al tener a Jungkook injustamente tras las rejas, pero era aun peor para la familia Jeon, o al menos para ese chico que vio tantas películas infantiles como de acción y eróticas como para saber hacer un nudo perfecto y tener el lugar justo en donde "secuestrar" a una persona. 

Porque ese era su magnifico plan, hacer que los capitanes hablen cueste lo que cueste. 

Otro golpe más dejó peor sus nudillos y aun más el rostro ensangrentado de ese chico. MinSeok volvió a quedar de perfil, amarrado en esa silla en el sótano de la casa del hermano gemelo de JungHyun, quien lo golpeaba sin compasión, demostrando todo su asco hacia esa persona. Taehyung mirando detrás comenzaba a sentirse un tanto nervioso por como su rostro cada vez tenía una marca, pero culpa no perduraba mucho cuando MinSeok demostraba que su orgullo seguía intacto. Una vez mas levanta la cabeza por más que su rostro ensangrentado duela, al ritmo de una ronca carcajada hasta mirar a ese peliazul cabreado.

— ¡Anda, vamos! ¡Continua golpeándome! — Lo desafío, tomándoselo como una broma. — ¡Continua dejándome más marcas que queden de evidencia para que te meta tras las rejas como a tu hermano!

Su ultima amenaza va acompañada de una escandalosa carcajada. JungHyun hizo una mueca de asco ante ese acto psicópata, dejando respirar a sus puños por un instante, sabiendo que todavía faltaba bastante para acabar el show.  

— No les diré ni una palabra.

Cortando su momento de gloria JungHyun pasó su lengua por el piercing que yacía en su labio inferior y alzando el mentón, buscó en su bolsillo trasero, tomando eso que dejó sin aire a Taehyung por un momento. La carcajada cesó, y MinSeok quedó fuera de órbita por un momento cuando lo vio abrir ese filoso objeto que enseñó como si nada y controló a la perfección.

— ¿Te cuento algo?

Dejó la pregunta al aire cuando se movió, recorriendo un repetido trayecto a su alrededor y disfrutó el notar como su orgullo comenzó a dudar ante esa pequeñísima arma, removiéndose en su lugar inquieto.

— Mi papi también es rico. — Vaciló con su cara ropa. — El pagaba unas buenas clases de defensa personal allí en Estados Unidos. Las cuales incluían la manipulación de esta cosita que puede abrir tu garganta de un solo movimiento.

Se detuvo y lo tuvo justo donde quería. MinSeok teniendo todo el cuerpo tenso por el repentino pánico al tener la filosa punta de esa navaja justo en su nuez de Adán, mientras ese, ahora peligroso, peliazul jugaba con esa intimidada mirada.

— Dime, MinSeok. — Exigió, persuasivo. — ¿Sigues... Pensando igual?

Tragó duro, tanto que sintió como esa navaja se hundió un poco en su piel al moverse por la saliva que pasó, consiguiendo que el extremo derecho del labio de JungHyun se elevara aun más. Dudó, tanto como para no saber que decir, porque su ego todavía no estaba del todo muerto.

— Sea lo que sea que hagas, estarás detrás de las rejas con tu querido hermano. — Le recalcó. 

JungHyun soltó una risilla. Por su patética segunda amenaza se apartó, dándole la espalda y sintiendo cada uno de sus músculos relajarse, MinSeok volvió a respirar agitado. JungHyun miró al castaño algo perdido y como si nunca hubiera existido esa personalidad peligrosa que había enseñado Taehyung se aguantó la risa al verlo poner los ojos en blanco con un tanto de desespero al modular "Es más terco que tu prima".