•°◤52◥°•

98 13 0
                                    

Unos mensajes bastaron. Baek MinJae no tuvo problema en volver a hacer entrar a lo ilegal a esos chicos después de la fiesta, siendo eso más entretenido que jugar videojuegos hasta tarde.

- ¿Cómo la consiguieron? - Inquirió curioso por la llave que JaeRin tenía en manos mientras caminaban apresurados.

- Ah, todo es sencillo con pequeños sobornos. - Vaciló EunWoo, soltando una risilla que compartió con JaeRin.

Enseguida volvieron a abrir ese casillero y JaeRin inhaló nerviosa cuando volvió a ver esa puerta extra. Colocó la llave en su lugar, y con una pequeña vuelta, escucharon ese ruido que hizo sonreír a todos. Destrabó ese obstáculo y al fin se sintieron a un paso de la gloria.

- ¡Es hora! - Chilló JaeRin lista para abrir esa puerta.

- Espera. - La detuvieron. JungHyun intervino apresurado. - Podría haber más dentro.

- No creo que tengan tanto control en esta mierda. - Habló confiada.

Pero nadie pudo confiar en eso. Por eso todas las mirada se dirigieron al único chico que podría aclarar sus dudas. MinJae se sintió muy observado, por eso arrugó el entrecejo mirándolos desconcertado.

- Nunca abrí el libro. - Les recordó. - Pero creo que él puede tener razón. - Cabeceó hacía JungHyun.

- Bien, ¿Quién lo abre? - Inquirió dando un paso hacia atrás.

- Yo lo haré. - Se ofreció EunWoo, ansioso por ver esa mierda.

Con cuidado puso su mano en esa puerta y entrecerró los ojos. Todos dieron un paso hacia atrás al ver cómo lentamente comenzó a abrirla. Nada sucedió y allí estuvo el libro a sus vistas. Los miró a sus espaldas y sonrió al igual que ellos. Regresó al libro y continuó con cautela. Lo sujetó despacio y lentamente lo abrió. Todo se sintieron ansiosos, casi se lanzaron sobre el para verlo, pero el azabache no se encontró con lo que esperaba.

- Maldito hijo de puta... - Exhaló con frustración.

Todos se sintieron confusos ante aquella reacción y se miraron sin comprender.

- ¿Que? ¿Qué es? - Interrogó JaeRin ansiosa.

Apresurada se puso a su lado y allí la vio. Esa gran foto que estaba en la primera hoja mostrando al grupo de bandidos con una sonrisa en la cara mientras quemaban el libro real y con un gran marcador rojo estaba escrito "¡Sorpresa, bastardos!". JaeRin intentó ver las demás hojas, pero solo eran hojas en blanco que hacían relleno.

- ¡Hijo de puta! - Escupió llena de ira, lanzando bruscamente ese libro al suelo.

Esos bastardos estaban controlando todos sus pasos, sin descuidar nada que pudiera mandarlos a pudrirse como tanto deseaban. Y ahora, tenían mucho más claro gracias a quien era...

......

- Muy bien, señora Kim. - Suspiró, tomando asiento detrás de su escritorio. - ¿En que puedo ayudarla?

- Jeon Jungkook. - La mujer frente fue directa. - Quiero verlo. Ahora.

JaeRin había sacado su carácter de alguien. YeoJin no solía ser una persona de mucha paciencia y estaba muy molesta con el director de esa correccional por darle un turno para verlo después de un largo tiempo de espera.

•☪|| 𝑴𝒀 𝑻𝑰𝑴𝑬. | 𝓙𝓮𝓸𝓷 𝓙𝓾𝓷𝓰𝓴𝓸𝓸𝓴 //Donde viven las historias. Descúbrelo ahora