Refugio [CATRADORA] she-ra

4

*NOTA INPORTANTE:

a veces este capítulo - el cuatro - aparece antes del tres ( es un error de wattpad) si esto te sucedió selecciona el 3 para que no haya confusiones*

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El frío no se mantenía a raya esa madrugada, sentía el clima helado por más que mi chaqueta de cuero me abrigara . Después de que Scorpia y Entrapta, me dijeron que meterían a Adora en la cama en la del departamento que está sobre el taller, pude irme mas calmadamente. No parecía haber luna , pero las farolas no eran deficientes, estaba bien iluminado, más eso no evitaba que sintiera miedo, me estaba metiendo en la boca del lobo, graciosamente hacia eso cada semana... Pero no siempre tenía que entregarle directamente a Hutara los paquetes. La mayoría de veces me las arreglaba con sus subordinados

-Tardaste un poco gatita - D.T me esperaba al frente, con la mercancía, traía unos pantalones rasgados y un top más que corto, me pregunté a mi misma si después de tanto tiempo usando tan poca ropa uno se vuelve inmune a la temperatura - si supiera que "H" no me mataría por hacer yo solo la entrega, no te hubiera esperado.

No le conteste, rodé los ojos y sonreí, centre mi atención en la puerta, quería hacer esto rápido, entrar, entregar, recibir, irnos ¿suena simple verdad? Solo hizo falta tocar el timbre un vez ( o mejor dicho, el timbre una vez, y golpear la puerta 3 veces seguidas,en un patético intento de "contraseña") el refinado troso de madera se abrió, dejando que el calor de la calefacción, junto con el olor a tabaco ( y otras cosas) nos pegara en la cara. Los sujetos ahí eran del doble de mi tamaño, de aspecto nada amigable, pero aunque la apariencia de cualquiera de ellos no fuera lo suficiente marginal, las armas que tenían si que le helarian la sangre a cualquiera, a mi lo hacían a pesar de tener tiempo en eso. En la sala de estar estaba ella, rodeada de algunos chicos y chicas desnudas, que evidentemente estaban ebrios o drogados. Por su parte Huntara solo contaba fajos de dinero, como si fuera ajena a todo lo que ocurría a su al rededor.

- Llegaron un poco tarde a mi fiesta - la voz grabe de Huntara siempre tenía una pisca de sinismo en todo lo que decía - aunque una botellita más, siempre es bienvenida - "botellita" lo dijo mirando a D.T, lo dijo porque así se le llamaban a las putas, <<hey vamos a la zona del terror a beber un par de botellitas >> era una frase más común de lo que creen en esa ciudad

- Sólo estamos por la entrega - escupi, odiaba el sitio.

Ella se levantó y nos miró, su paso seguro y pesado hacia que las tablas del suelo rechinaran, se acercó a nosotros, y acarició mi rostro. Olía a Colonia cara y humo, se sintió áspera, fría y desagradable, no pude evitar apartar mi cara. Internamente pensé que había cometido un error, los clientes de H debían ser tratados como dioses y obedecidos como si fueran la máxima autoridad. H entendería si me niego a acostarme con un cliente, después de todo yo no era una de sus botellitas... Aun así un gesto de repulsión como ese podría ofender a cualquiera, más a soberbias como Huntara, podría meterme en un problema. Por suéter, ella no le dio importancia, e hizo lo mismo con D.T, quien recibió el tacto con toda naturalidad, quizás después de tanto, se acostumbro a ese tipo de tacto, nunca sintió que su cuerpo fuera sólo suyo, que le tocarán cuando fuera, sin su consentimiento, era después de todo, parte de su trabajo.

- Ya conté todo el dinero, pueden recogerlo ¿Han traído toda la mercadería? - D.T vacío el bolso en la mesa que estaba a un lado, y se lo entregó a Huntara para que le hechara los fajos de efectivo adentro, ella miro la mercancía sin preocuparse por revisarla, H nunca cometía errores, ni dejaba que alguno de nosotros tampoco lo hiciera, el pedido siempre estaba completo y sin ninguna equivocación.

Nos entregó el bolso tan lleno que apenas cerraba. Al darnos la vuelta pensé que por fin saldríamos del asqueroso lugar, pero Huntara tomó a D.T y lo beso sin aviso, a el no le quedó más remedio que corresponder el beso. Era un cliente, no podía negarse por más ordinario, brusco y asqueroso que fueran los besos de aquella mujer, Debía aceptar todo con sumisión.

-Mañana iré para que me des un par de tragos - dijo ella terminando el beso y dándose la vuelta.

Salimos, y no fue hasta que la puerta se cerró detrás de nosotros que el dejó de sonreír, pasó su brazo por su boca en un intento por limpiarla y escupió. Sacó un poco de antibacterial que tenía en el bolso, y me dio un poco. El antibacterial era por 2 razón, la primera porque D.T odia los germenes, siempre me pregunte ¿Como alguien tan fanático de la limpieza, puede terminar en la cama con personas tan ebrias que terminaban vomitadas encima?

La segunda porque era importante limpiarse las manos después de tocar dinero, nunca sabemos dónde estuvo y a qué sustancias estuvo expuesto. Cualquier tonto por ahí pudo enrollar el billete y aspirar un poco de polvo de ángel con el.

- H estará muy molesto si no eres tú quien le lleva el dinero - hablo el rubio, mientras veía su teléfono posiblemente pidiendo un uber

-Me las arreglaré con H luego, solo dile que tuve un accidente con mi harley.

-ggrrrr como la gata ordene.

Regrese caminando nuevamente, faltaba poco para amanecer y las nubes empezaban a mostrár lindos árreboles. Cosas simples como esas, me hacían olvidar momentos incómodos de la realidad a la que me veía expuesta muchas noches ...

Nada de eso importaba por el día. no importaba si trabajaba en un burdel o distribuyendo drogas. Todo daba igual bajo la luz del sol.

Al llegar al taller, Adora ya estaba despierta y la chicas la usaban como fotógrafa, me divirtió tanto que no quise interrumpir. Eran simples chicas inocentes divirtiendose con una camara, mientras reían.

-Uh uh, una así - Scorpia tomó a Entrapta por la cintura y está estendió los brazos en una imitación de la típica pose del titanic, Adora tomó la foto y la miró mientras se veían felices de disfrutar el momento , se la estaban pasando.

- ¡Catra, llegaste ! - Entrapta me vio con emoción, corrió a tomarme y llevarme junto a ellas si que me diera tiempo de negarme, el vacío y la inseguridad de hace unas horas se apoderó de mi, Entrapta olía a esencia de chicle como el de spray para autos, Scorpia le encanta el jabon de avena y oler a el. De seguro Adora llevaba puesto el mismo perfume que el día en que la conocí, pero yo... Yo olía a humo y narcóticos, sentí que había corrompido el momento con mi presencia, alguien tan podrido como yo, estaba fuera de lugar en instantes tan lindos como ese

- Vamos, Adora toma la foto - ordenó Scorpia, y así lo hizo la rubia

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Se que el cap es corto xd pero he tenido varios cumpleaños esta semana ( incluyendo el mio) aun así no podía dejar de actualizar

Gracias por leer ✨ no olviden tomar agua