Una en un millón [Terminada]

Capitulo 37

Al abrir la puerta de su casa, Juan encontró a la novia de su hija parada frente a él, con los ojos clavados en el suelo y los dedos jugando con la tela de su camisa. "Pero si es mi yerna favorita", la recibió con una sonrisa. "Poché no está aquí todavía, se ha ido con Marta hace un rato."

"Hola Juan", lo saludó. "Si, ya lo sé, pero quería hablar contigo antes."

"Por supuesto hija, pasa, pasa. ¿Quieres un poco de agua?"

"Estoy bien, gracias", respondió Dani mientras pasaba junto al padre de su novia y entraba en la sala de la casa de los Garzón.

"¿Está todo bien?", preguntó Juan cuando la siguió y se sentó en el sillón frente a la morena, indicándole para que ella hiciera lo mismo.

"Sí, si", Dani sólo necesitaba encontrar el valor para contarle lo que quería hacer.

"¿Mi hija ha hecho algo malo?"

"No. Poché esta bien", sonrió. "Pero ella es parte de la razón por la que estoy aquí... Porque quiero contarte algo", Dani siempre había tenido una relación especial con Juan y esperaba que le gustara y apoyara su idea.

Inclinándose hacia atrás, le hizo un gesto silencioso para que continuara mientras la miraba. No tenía ni idea de lo que pasaba por la cabeza de la morena, pero a juzgar por la expresión de su cara, debía ser algo serio.

"Es que veras... Poché y yo iremos a la misma universidad pero estudiaremos diferentes carreras y, por eso, lo más probable es que nos toquen diferentes habitaciones", terminó respirando hondo. "Así que a mi me gustaría preguntarle a Poché si quiere mudarse conmigo durante estos años... Pero antes quería saber que opinabas", dijo un poco más rápido de lo que pensaba.

"¿Mudarse contigo?"

"Sí, eso... Que no quiero que nos separen o que nos toquen compañeras de habitación que solo quieran conocer chicos... Y yo se que Poché piensa lo mismo, así que he pensado que si tuviéramos nuestro propio piso, podríamos estudiar juntas y concentrarnos mejor", paró para tomar aire pero siguió. "Y cocinaremos nosotras así comemos sano, o más Poché que yo bueno...", terminó con una sonrisa.

"Eso es verdad", bromeó pero no agregó nada más.

"Y no tendremos que preocuparnos por el dinero, de verdad... Aun no sé qué hacer con todo lo que me han dejado, así que he pensado ¿por qué no darle un buen uso y hacer que este tiempo en Barcelona sea poco más fácil para las dos?", deteniéndose un momento para mirar al padre de su amor, trató de leerle la cara.

"Veo que lo has pensado mucho Dani. ¿Y crees que ustedes dos sobrevivirían viviendo juntas?", preguntó ahora sonriendo.

"Pues si... En realidad creo que no sobreviviríamos sin vivir juntas. Sé que es una situación especial, pero quiero vivir esto con poché", terminó con convicción.

"Estoy seguro que ella también opina lo mismo."

"Además, creo que ella encontraría la manera de salir de su dormitorio para pasar cada noche conmigo de todos modos. Estamos tan acostumbradas que no dormimos bien separadas", esa era la verdad.

"Eso si que suena como mi hija", Juan asintió. "¿Qué ha dicho Emma o Flavio?"

"Yo... No se los he dicho aún. Quería preguntarte a ti primero pero Flavio ya lo ha comentado cuando le avisé que iríamos a la misma universidad", terminó con más seguridad. "Para mi es importante lo que tu opines... Por eso he venido a hablar contigo incluso antes de hablarlo con poché", sonrió ante esto último.