不作不死 - Bu zuo bu si

Capítulo 29: Miedo

—¡A-Cheng~! —suplicó Lan Xichen tratando de seguirle el paso a Jiang Cheng que había salido prácticamente huyendo luego de aquel beso.

—¡Cállate! Se supone que debemos cazar un cadáver feroz —regañó sin dejar de avanzar entre la maleza.

—Por favor, A-Cheng, solo uno más —insistió. Toda su preocupación había quedado atrás.

—¡Ya te dije que no!

—Pero... pero... he esperado mucho para nuestro primer beso en esta vida. A-Cheng, por favor, fue demasiado corto.

—Si no te callas, no te volveré a besar hasta que nos casemos...

Lan Xichen paró de golpe al escuchar sus palabras. Jiang Cheng también se detuvo y giró con el rostro completamente rojo.

—No, qui-quise decir...

La sonrisa que se estaba formando en el rostro de Lan Xichen se detuvo a medio camino cuando se escuchó el gruñido de un cadáver feroz. Inmediatamente los dos sacaron su espada y prestaron atención a sus alrededores. Como era un cadáver de bajo nivel, era muy poco probable que fuera veloz, pero podía ser muy fuerte así que era mejor enfrentarlo entre dos.

El sonido volvió a escucharse, un poco más lejos, pero esta vez sí pudieron saber la dirección hacia la que debían moverse. Ambos avanzaron decididos y con sus sentidos alerta a cualquier sonido o movimiento fuera de lugar. Los gruñidos siguieron escuchándose cada vez más cerca, así que Lan Xichen se detuvo para dar algunas instrucciones.

Una vez determinada la estrategia, ambos se lanzaron al ataque usando amuletos y las técnicas que ya dominaban para capturarlo y neutralizarlo. Podrían haberlo eliminado en ese momento, pero puesto que no era de alto nivel ni particularmente malicioso, y siendo un viaje de aprendizaje, debían utilizar el enfoque básico e iniciar por liberar. Si no era posible, debían suprimir y solo como último caso debían eliminar.

Habían quedado de reunirse en un claro del bosque cuando lograran encontrar algo. Se dirigieron allá arrastrando al cadáver feroz que era completamente dócil con un amuleto bien pegado a su frente. No tuvieron que esperar mucho para que Wei Wuxian y Lan Wangji llegaran con el otro cadáver feroz y se pusieron manos a la obra para cumplir con su misión de liberar.

—Podría usar Gongqing(1) para saber qué quieren —sugirió Wei Wuxian, pero al notar la mirada de reproche de Lan Wangji, decidió retractarse—, pero supongo que ustedes querrán probar con Wen Ling(2) primero.

—¿Qué no puedes dejar de ser tan idiota? —le reprochó Jiang Cheng y Wei Wuxian solo rió despreocupado. Sin embargo, su shidi ya estaba harto de soportar sus imprudencias, por lo que comenzó a gritarle—. Tienes una enfermiza tendencia a arriesgarte a lo tonto, ni porque llevas tres vidas has aprendido la lección. Es como si tu vida no tuviera ningún valor para ti, ¡pero se te olvida que tiene mucho valor para los que te rodean! ¡Deja ya de ser tan idiota!

Wei Wuxian se quedó estupefacto de escucharlo ser tan honesto, pero también porque había tocado un tema delicado. Tenía razón, se le olvidaba fácilmente que ser un prodigio no significaba que fuera invencible y que por muy sencillo que le resultara usar el cultivo demoníaco, ya no era su única salida ni su mayor habilidad.

—Sí, tienes razón, soy un idiota —aceptó con actitud sumisa.

—Mmn —apoyó Lan Wangji mostrándose también molesto. Lan Xichen tenía una sonrisa en su rostro, pero Wei Wuxian lo conocía lo suficientemente bien para saber que detrás de ese gesto había cierto reproche que apoyaba lo dicho por su shidi.