La sala de espera de la clínica de la doctora Greene huele a desinfectante y canela. Normalmente el olor no me molestaría, pero después de 2 horas comienzo a aburrirme.
—Carajo —me paso las manos por la cara con frustración—. Espero que tengan noticias de Ana pronto.
Es Lay a mi derecha la que suspira, luego me mira.
—Lidia estuvo de parto 14 horas. —¿Qué?—. El bebé saldrás cuando esté listo, jefe.
—¿Estás jodiéndome? ¿14 horas? —pregunto, pasando la vista de Leila a Sawyer, sentado a su derecha.
—Eso es cierto, Christian —Luke encoge ligeramente los hombros—. Becca estuvo 12 horas con dolores hasta que nació Jamie.
Mierda.
Ethan debe pensar lo mismo que yo porque ríe como si fuera una maldita broma.
—Esa es la verdadera prueba de amor, justo ahí. —se ríe de nuevo—. ¿Me amas lo suficiente como para darme hijos?
Dice a nadie en particular, mirando al frente donde las puertas de la sala de espera se balancean cada vez que una enfermera pasa.
—Por eso todos somos hijos únicos —Sawyer se carcajea divertido—. Excepto Lay porque su madre se dejó convencer.
Imbécil.
Leila arruga las cejas antes de golpear el brazo de Luke con el puño cerrado, haciéndolo chillar.
—Cierra la boca, tonto. Todos ustedes estarían perdidos sin mi.
Sawyer asiente sobándose el brazo, pero es Ethan el que atrae mi atención porque mira a Lay son disimular, completamente absorto de mi mirada.
—Algun día también van a convencerte, Lay, recuerda mis palabras. —Luke extiende las piernas frente a él y cruza los brazos detrás de la cabeza.
—Bueno, no en un futuro cercano, eso es seguro. No esperen de pié.
Lay retuerce los dedos sobre su regazo, las mejillas un poco rojas de vergüenza. ¿Por qué carajos estamos hablando ahora sobre los futuros bebés de Lay?
—Por cierto, —me dirijo a mi mejor amigo—. Tienes un bebé en casa, idiota. ¿Quién lo está cuidando mientras estás aquí interrogando a Leila?
—Mi mamá. —dice con toda la tranquilidad—. Pero solo puedo quedarme un rato. No puedo sostener tu mano todas esas horas, Christian, tengo responsabilidades en casa.
Idiota.
Me pongo de pie para míralos a todos, agradecido de que se tomaran un momento para venir cuando llamé para avisarles. Sin duda son los mejores amigos.
—Chicos, les agradezco, pero Luke tiene razón. No sabemos cuánto tiempo tome y tienen otras cosas qué hacer, como tú Lay, ¿Luke te estaba ayudando con la mudanza?
—Hmm, si. Pero seguro podemos dejarlo para mañana. Preferiría quedarme en caso de que Ana o tú necesiten algo, viendo que su madre no está aquí.
Oh, esa bruja. Dudo que Ana quiera verla.
—El chofer está afuera —Ethan señala con el pulgar en dirección a la calle—. Supongo que Ana le avisó que estaba aquí
Agh, ese tipo de nuevo. Bien, si verdaderamente la ve como una hija es comprensible que desee estar aquí.
—Gracias Lay. Luke, cuando te vayas dile a Fred que entre, puede esperar noticias aquí como el resto de nosotros.
—Yo también quiero quedarme, Christian. —Ethan estira el brazo sobre el respaldo de mi silla para acomodarse—. Te traeremos comida y podríamos tomar pequeñas pausas para cuidar de tu esposa.
Quiero decir que no, que puedo hacerlo solo, pero no estoy realmente seguro de qué podría pasar. Al menos Leila, Ethan y Fred podrían moverse a conseguir lo que haga falta.
—Gracias, chicos. Ahora necesito ver a Ana, debe estar asustada.
Dejo a mis amigos en la sala para ir a la estación de enfermeras más cercana, el primer filtro hacia las camas. Una mujer joven escribe en una de las carpetas cuando me acerco.
—Buen día —saludo para que me mire.
—Buen día, ¿En qué puedo ayudarlo?
—Necesito ver a mi esposa, debe estar por aquí en algún lado.
—¿Cuál es su nombre? —revisa el listado de otra carpeta.
—Ana Grey.
Le toma un momento encontrar a mi esposa en el área de maternidad.
—Está en la habitación 2A, pero no puede entrar ahí, señor.
—¿Por qué carajos no? Está teniendo a mi bebé, me necesita.
—Lo sé, y lo entiendo, pero será llamado al quirófano cuando sea el momento. Mientras tanto, debe esperar en la sala.
Una jodida mierda.
El pasillo tiene flechas que identifican las habitaciones, así que ignoro a la enfermera para entrar ahí y buscar a Ana. Todo está tan tranquilo que puedo escuchar los gritos de la mujer detrás de mí.
—¡Señor! ¡Señor! ¡No puede!
Sus gritos debieron alertar a la seguridad, porque un hombre uniformado se acerca detrás de ella. Y como no quiero llevar este puto escándalo a mi Cerecita, me detengo para enfrentarlos.
—Puedo entrar ahí porque estoy pagando por esto, y no soy ningún maldito loco —tomo mi placa que llevo enganchada en el cinturón y se las muestro—. Soy policía. Mi esposa de 19 años está ahí, teniendo a nuestro primer hijo o hija ella sola, porque soy su única familia. ¿Quiere llamar a la policia? Hágalo y vea si alguien intenta detenerme, porque yo no lo haré.
Sin darles oportunidad a reaccionar, camino los últimos metros y entro a la habitación donde está Ana, cerrando la puerta tras de mi. Sus ojos prácticamente se iluminan cuando me ve.
—¡Christian!
—Aquí estoy nena, —me acerco a acariciar su cabello—. ¿Cómo estás?
—Bien, un poco de dolor pero aún es tolerable.
¿Qué se supone que diga? ¿Me alegro?
—¿Hay algo que necesites? ¿Agua? ¿Comida? ¿Una almohada más grande?
Ella se ríe.
—Nada por el momento, gracias amor. —me mira arrastrar un pequeño sofá y ponerlo junto a su cama—. ¿Tú estás bien?
—No te preocupes por mí, Cerecita. Afuera están Fred, Ethan y Leila, en caso de que necesites algo. Luke acaba de irse.
—Oh.
Puedo ver el cansancio en sus ojos, así que sigo tocando su cabello con suavidad hasta que parece quedarse dormida. No dura mucho porque en cuestión de minutos despierta gruñendo de dolor.
—Oh, Dios, duele mucho más ahora.
No sé qué hacer en estos casos, así que solo me siento en la cama y sostengo su mano.
—Lo sé, nena. Estoy aquí, lo haremos juntos, ¿Está bien? Trae este bebé al mundo, Cerecita.
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Nuestro (Mío #4)
FanfictionCuando tocas fondo, el único camino que queda es hacia arriba. Pero nadie dijo que corregir los errores que te llevaron ahí sería tan difícil. ~ • ~ La historia es mía, pero los nombres de los personajes pertenecen a EL James de su Trilogía "50 somb...