𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟏𝟎

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Diluc y yo nos encontrábamos en el piso de arriba, el se recargó sobre la pared y yo me senté en una silla que quedaba justo en frente suya.

- Verás, no te contaré mucho, este es uno de esos casos en los que cuanto menos sepas sobre algo mejor, menos probabilidades tienes de que de estalle en la cara...

- Diluc...

- No te preocupes, estoy acostumbrado a lidiar con ese sentimiento todos los días. Verás, Kaeya es mi... hermanastro.

- ¿¡Tu y Kaeya qué!?- Dije notablemente sorprendida, jamás, ni en mis sueños más locos, podría haber imaginado que estos dos hubiesen podido convivir bajo el mismo techo sin matarse a puñetazos.

- Sí... Bueno se que es algo extraño de imaginar... Ese no es el caso... Cuando...

Diluc se calló un momento, como meditando seriamente lo que iba a decir.

- Si no te sientes cómodo contándome esto no hace falta que lo hagas Diluc, solo tenía curiosidad...

- No, dije que te lo contaría, es solo que necesitaba un minuto para pensar las palabras adecuadas que decir en un momento como este... Verás... Hace ya unos años, poco antes de que Kaeya obtuviese su visión elemental, mi padre murió accidentalmente por causas externas que llevo investigando desde entonces...

- Jod... Diluc lo siento... Se lo duro que debió ser para vosotros dos...

- Ese es el punto __________, mira, no se que tan duro debió ser para Kaeya pero no hizo nada por estar a mi lado en ese momento, así que por eso mismo ya no lo considero mi hermanastro, mucho menos mi amigo. Se perfectamente que sería capaz de sacrificar a las personas de su alrededor, dado que para el, el fin justifica los medios.

- Te entiendo perfectamente.- Me limité a decirle, pude ver en su cara que sabía que lo estaba diciendo en serio pero me fijé en algo...

- O-Oye ¿Estás bien?

Vi como una pequeña lagrima amenazaba con salir en su ojo izquierdo, el simplemente miró hacia otro lado y se secó rápidamente la mejilla por la que había corrido la lágrima.

- Perdón, no se que pasó, realmente no suelo llorar ni aún estando a solas, sinceramente no es algo que necesite para sentirme realizado...

Vi que no lo decía en serio, el necesitaba a alguien que le entendiese y pensé que ese alguien podía ser yo, por lo menos en ese instante... Tal vez, pero por ahora me limitaré a hacer algo que no hacía desde hace muchísimos años... Abrazar a alguien, abrazarle a él.

Me levante y rodeé su torso con mis brazos, dándole un torpe abrazo al comienzo, pude notar como el más alto se tensaba, bajó su cabeza en mi dirección, apoyándose sobre la mía y envolvió mis hombros con sus brazos, no se si sería debido a su visión tipo Pyro, pero era el abrazo más cálido que jamás me habían dado; sin contar con los de mi madre. Me sentía bien y creo que el también se sintió igual, pues no fue hasta un par de minutos después cuando nos separamos.

Mis mejillas ahora mismo estaban más rojas que su pelo, de eso no me cabe ninguna duda, aunque tampoco es que el se quede atrás.

- Eh... Sí bueno esto estuvo bien pero mañana tenemos que enfrentarnos a Dvalin y realmente me gustaría descansar un poco antes de conducirme a mi posible muerte...

- Mientras yo esté presente no morirás... Y... Sí, estuvo bien...

- Sí, osea estuvo muy bien...

𝐅𝐋𝐀𝐌𝐄 - 𝐃𝐢𝐥𝐮𝐜 𝐑𝐚𝐠𝐧𝐯𝐢𝐧𝐝𝐫 𝐱 𝐫𝐞𝐚𝐝𝐞𝐫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora