No cogió casi nada, al fin y al cabo solo serían un par de semanas de vacaciones, por lo que metió la ropa necesaria en su bolsa, su guitarra y se apresuró a salir de su habitación para reunirse con Jimin, que venía a buscarle en coche.
Suran ya se había marchado, no sin antes decirle que la llamara cada día, que le extrañaría muchísimo y que se acordara mucho de ella. Se había despedido de Yoongi, como si no fueran a verse en meses, cuando la vería en unos cuantos días, en la fiesta de año nuevo que hacían en el campus.
Yoongi pasaba todos los años aquel día en el Black Hole, donde actuaban y se quedaban de fiesta hasta el amanecer, pero aquel año iría a actuar y acudiría cuanto antes a la fiesta de la universidad. En el fondo no era gran cosa para Yoongi, ya que prefería mil veces más estar con su gente habitual del Black Hole, con la que guardaba mucho más en común que con toda esa panda de niños de papá, pero aun así pensó que ir a ambas fiestas no le haría daño. Bajó aprisa, encontrándose apoyados en el coche de Jimin, a Jin y a Zico.
—No hacía falta que vinierais en ejército a por mí —dijo saludando a sus amigos.
—Es que Zico tenía muchas ganas de venir. Es lo más cerca que va a estar nunca de una universidad —respondió Jin burlón.
—Es cierto —coincidió Zico—. Pero tampoco es para tanto.
—¿Qué esperabas, Zico? —quiso saber Jimin, mientras abría el maletero para que Yoongi metiera sus cosas.
—Algo parecido a Hogwarts —dijo en tono serio.
—Claro, Zico, por atrás tenemos las escobas voladoras —respondió Yoongi con sarcasmo, y justo en ese momento pasó Yeri—. Y ahí tienes a una bruja... —dijo entre dientes.
Jin y Jimin se fijaron para ver a quién miraba con esa rabia.
—¿Esa es la tal Yeri? —dedujo Jimin por su aspecto y el tono que había usado Yoongi.
Éste no contestó, por lo que lo tomaron como un sí.
—No parece tan mala como dijiste... —dijo Jimin observándola.
—Ni la describiste bien. Está buenísima —comentó Jin sin quitarle el ojo de encima. Era exactamente el tipo de chica que cualquier tío como él buscaba. Yoongi bufó.
—No exageres. Y eso es lo peor, que no parece mala... —dijo mirándola con rabia. Yoongi se carcajeó.
—Qué idiota eres.
—¿Y qué hace una chica así con un imbécil como Jungkook? —preguntó Jin desconcertado. Yoongi le miró consternado.
—¿Que, qué? Bromeas, ¿verdad?
—No, Yoongi. A mi Jungkook, por muy ex tuyo que sea, siempre me parecerá un imbécil. Y aquella chica me parece fascinante —dijo aun embobado.
Yeri ya le sacaba de quicio y encima ahora sus amigos la defendían.
—Lo que faltaba... —farfulló Yoongi llevando sus ojos al cielo.
—Nunca te había visto tan celoso —dijo Jimin asombrado por las reacciones de Yoongi.
En verdad Jimin recordaba muy pocas veces en las que Yoongi hubiese demostrado sentir celos, por pequeños que fueran.
—Yo no estoy celoso —dijo tajantemente.
—¿Ah no? ¿Y entonces por qué la odias? —quiso saber Jin.
—¡Porque ella es insufrible conmigo! Vengan, se los demostraré —dijo antes de dirigirse hacia ella.
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bastard
Fanfiction[kookgi - yoonkook] - segundo libro ☆ /𝗮𝗱𝗮𝗽𝘁𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘀𝗶𝗻 𝗳𝗶𝗻𝗲𝘀 𝗱𝗲 𝗹𝘂𝗰𝗿𝗼.