Se levantó temprano. Baekhyun dormía en la cama de al lado como un tronco, con un cómic pegado a la cara. Se vistió con su ropa de correr y salió a la calle. No le gustaba llevar auriculares puestos mientras corría, le resultaba molesto, y prefería escuchar el sonido de su respiración. Tenía el resto del día totalmente ocupado, después se daría una ducha y repasaría lo que pudiera para su primer examen.
Tenía pensado pasar el domingo en su casa, para ver a su familia antes de la final de la liga. Estaba molesto con Yoongi por no poder asistir, aunque en realidad no sabía por qué le molestaba tanto, al fin y al cabo, no solía asistir a ninguno de sus partidos, pero pensó que seguramente la razón de que le disgustara tanto, era porque Yoongi no iría a causa de una estúpida entrevista, o lo que fuera.
Cualquier cosa que tuviera que ver con su cambio de actitud le ponía nervioso. Llevaba una velocidad normal, respiraba por la nariz y soltaba el aire por la boca. No había comenzado a sudar, cuando escuchó que le llamaban. Se giró para ver de quién se trataba, pero sin dejar de correr. Suran, vestida con unas mallas, una camiseta de tirantes similar a la de Jungkook, y con una coleta, corría tras él. Jungkook frunció el ceño y volvió la vista hacia el frente, haciendo caso omiso a su llamada.
—¡Jungkook! No sabía que corrías por las mañanas —dijo ella poniéndose a su lado.
—Yo tampoco sabía que estarías por aquí.
Si no, no habría venido, pensó Jungkook.
—Pues es una suerte, porque luego iba a buscarte para hablar contigo.
Él aceleró un poco el paso, pero parecía que ella tenía buen aguante.
—¿Ah, sí? —preguntó en tono seco.
—Es que estoy planeado con Yoongi una fiesta para celebrar que pronto se hará una estrella, y había pensado que podrías ayudarme a organizar todo —explicó ella con tono entusiasmado. Jungkook compuso una mueca—. Ya sabes, como su mejor amigo y eso...
—Yo no soy su mejor amigo —le espetó de malos modos—. Deberías saberlo, ¿no? Fuiste su novia.
—Por eso mismo te digo que eres tú, créeme, le conozco —dijo ella con el mismo tono amable y alegre, sin parecer notar el tono hostil de Jungkook.
—Pues estás equivocada, su mejor amigo es el enano novio de mi hermana, y los otros dos.
Suran soltó una risita al oír eso.
—Por favor, Jungkook, ya deberías haberte dado cuenta de que esos tres se están quedando fuera de la vida de Yoongi —soltó.
Jungkook dejó de mirar al frente para dedicarle a ella un gesto confuso.
—¿Por qué dices eso?
—Bueno, es obvio, ¿no? Además, yo creo que contigo como mejor amigo está mejor —confesó ella ladeando la sonrisa—. Si yo pudiera haber elegido un amigo para él, serías tú, le puedes enseñar muchas cosas. Pero mejor que lo haya hecho por sí mismo.
Jungkook dejó de correr.
—¿Qué has dicho? —preguntó incrédulo.
Suran se paró también y le miró sin entender.
—¿De qué?
Estudió con la mirada a Suran. Podía verse a la legua que ella había estado influyendo mucho en Yoongi, pero ahora se dio cuenta de que no solo era eso, sino que le estaba conduciendo por el camino que a ella más le parecía. Todo lo que Yoongi era ahora, era por aquella estúpida entrometida. Jungkook le dirigió una mirada envenenada.
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bastard
Fanfiction[kookgi - yoonkook] - segundo libro ☆ /𝗮𝗱𝗮𝗽𝘁𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘀𝗶𝗻 𝗳𝗶𝗻𝗲𝘀 𝗱𝗲 𝗹𝘂𝗰𝗿𝗼.