Entre Caballeros y Esperanzas

Capitulo 42

Leila 

- Mi señora - entra la esclava temblando - ha llegado una carta para usted - dice dándome la, la tomo de mala gana cuando por dentro estoy muriendo de miedo.

- Vete ya - sale casi corriendo

Tomo un respiro y abro la maldita carta, a medida que voy leyendo no puedo dejar de maldecir con cada horrible palabra que escribió mi padre, al terminar de leerla tengo que sentarme para poder digerir todo lo que acabo de leer. Hace dos lunas mi padre me envió la primera carta desde que se fue, en ella decía que estaba en otra ciudad demasiado asqueado con todas esas personas y que me apurara con mis planes, también decía que me enviaría otra carta diciendo todo lo que tenia que hacer para conseguir de alguna forma este reino y el nuestro. Lo que acababa de leer me dan ganas de vomitar y tiemblo, no se como aré para soltar a alguien que esta en la casa de piedra, a un tan Jack Hyde.

En la carta decía cuidadosamente como tenia que hacerlo, me daba una descripción de como era él y lo que tenia que decirle. Mi gran pregunta es de donde conoce a ese hombre y por que esta encerrado en la casa de piedra, no quiero morir sin tener a todos a mis pies. 

Pero quiero tener a Christian a mis pies y desaparecer a esa puta de Anastasia, no soporto que estemos en el mismo lugar y menos que estemos en busca del mismo hombre. He estado evitando estar junto a ella y la familia de Christian, cada vez que trato de fingir delante de Grace, ella simplemente me ignora, soy una princesa y futura reina de esta ciudad, ellos no me conocen, aré que cada uno se trague sus palabras. 

Así que con decisión y sin temor, estoy decidida a soltar a ese hombre. 

Pensé una y mil veces como hacer que los guardias salgan de esa maldita puerta pero solo lo aré al azar, me corto mano profundamente y maldigo, tomo la sangre que esta en mi mano y la pongo en mi cabeza, algo bueno de estos malditos guardias es que es que me conocen a parte de llevar mi corona en la cabeza. 

Empiezo a gritar como loca y hago que me caigo, enseguida ellos viene hacia mi.

- Señora que le pasa ? - pregunta uno 

- ¡¿ QUE, QUE ME PASA ? UN MALDITO ME HA GOLPEADO HASTA MAS NO PODER Y ACABA DE ESCAPAR, BUSQUENLO Y MATENLO - los cuatro idiotas se van en medio del bosque y al perderlos de vista rápidamente agarro el hacha que llevo y doy dos golpes hasta que la cerradura se rompe.

Cierro de golpe.

Tomo coraje y me doy la vuelta, agarro la antorcha que esta a mi lado y el olor a muerto llega a mi como un latigazo, cubro mi nariz y cierro los ojos, dioses este olor es tan horrendo que me dan ganas de salir huyendo. A medida que avanzo todos se viene hacia los barrotes y de la impresion que me dan estas horrendas personas grito, esto es mas horribles que las historias que se contaban de este lugar. 

- Jack Hyde - grito pero nadie me dice nada, la idea de que ya este muerto llega a mi y se que no solo será el único muerto aquí, tomo mas coraje - Jack Hady

- Aquí linda - es un sonido lejano pero es lo que necesito para saber que esta en el fondo de todo.

Me aproximo hasta el fondo y con eso viene todas las palabras de estos malditos esclavos y sus manos tratando de tocarme, llego hasta el último barrote y veo a un hombre tirado en frente de los barrotes, acercó el fuego y veo a un hombre con  demaciada barba, delgado y con sangre en su cara.

– Tú-tu eres Jack Hyde ?

– No linda, soy un caballo que habla – ruedo los ojos.

– Mí padre me ha enviado a que te libere – él parece dudar de algo.