FNF - Betrayal [Tabi & Agoti] CANCELADA

XX ★

Pd: Quédense hasta el final, les tengo una sorpresa.

...
No...
Eso no es verdad...
... No...

NO.
NO.
NO.

NO.

...

Sueños...
Siestas...

Pesadillas.

Es bonito cuando son dulces y tiernos sueños. Cuando son como los que tiene el ruso... no son bonitos.

En aquella habitación de hotel todo era callado y tranquilo, apenas siendo el cantar de los grillos en los árboles lo único que rompía aquél ambiente tan pacifico. Toda la familia se encontraba en sus respectivas habitaciones, descansando con bastante calma luego de un día tan ajetreado como el que habían tenido.
Incluso el reconocido DJ descansaba en su respectiva habitación del otro hotel.

Todos dormían plácidamente.

Si, todos.

Todos…

…

Todos… si es que no contamos al ruso.

Tabi no dormía plácidamente en su habitación; todo lo contrario, se revolcaba en la cama, rasguñando el colchón y apretando las cobijas. Se había metido a bañar al baño privado de su habitación para quitarse la sangre de encima, además de limpiar su ropa y dejarla lo más limpia que podía.

Hey, al menos sus zapatos tendrían un bonito tono rojizo de ahora en adelante.

Un bonito color rojizo y un lindo olor a putrefacción.

Como sea.
El ruso se revolcaba de lado a lado como un niño pequeño, intentando calmar sus instintos de huir y no volver. Tratando de mantener la calma aún cuando no podía parar de llorar.
De sus gráciles ojos caían delicadas lágrimas que, debido a todo el forcejeo lograban impactar en diferentes lugares de la cama.

Gruñidos, quejidos y forcejeo era lo único que se podía escuchar dentro de esa habitación, sumado al chocar y deslizar de las telas contra el desgarrado colchón.

¿Qué ocurre?
Bueno, una pregunta fácil…
Con una respuesta fácil…
Y una explicación compleja.

Pero no queremos explicaciones.
Queremos sangre.
¿No es así?

Entremos un momento en los pensamientos del ruso, para ver qué lo tiene tan alterado…

…

Una habitación blanca, con múltiples dibujos detrás suya. Sonaba un tema muy tranquilo pero conocido para el caprino, el cual estaba caminando por ese extraño mundo.
¿Qué era todo eso? No tenía ni idea.

Le gustaba dibujar, pero todo esto era demasiado raro aún para un artista como él. Los dibujos tenían formas raras, tanto que incluso parecían garabatos.
Qué extraño.

Todo iba normal dentro de lo que cabe, hasta que…

En los muros de aquel mundo de blanco comenzó a dibujarse una compleja figura igual al ruso, sólo que sin la calavera o la cola de huesos. Junto a él, una figura más pequeña pero igualmente compleja se dibujó también.
Pequeña estatura, cabello desordenado, tacones…

No…
No, ella no…

…

Era ella.

No puede ser…
La misma zorra que acabó con su vida.
Estaba ahí, junto a él… como si fueran una pareja feliz.

Las figuras comenzaron a salir en varias citas como si fueran una pareja, pasando por restaurantes y ferias, parques de atracciones y bosques. Era muy lindo verlos juntos, como el montaje perfecto de una película romántica.
Lástima todo era una mentira.