XXXI

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...

Vaya…

Ha pasado mucho tiempo.
¿No es así?

. . .

Han pasado un par de días desde que el ruso leyó por primera -y probablemente única- vez la carta que le había dejado su difunta madre.

Al día siguiente de ese suceso Agoti informó a su padre sobre el estado del ruso, causando que el adulto tomara cartas en el asunto al apoyar y ayudar al ruso en todo lo que necesitara. Aldryx igualmente se dispuso a ayudar a Tabi, aunque sus métodos no eran del todo… "normales".

Al menos funcionó.
Dentro de lo que cabe.

Extrañamente ese día era muy diferente. A pesar de que eran finales de noviembre y todos comenzaban a sentir las vísperas navideñas acercarse la familia de tonos singulares seguía con normalidad su vida.

Agoti siguió cantando y creando más discos, aumentando su popularidad de a poco.
Aldryx y su set de grabación estaban a pocas semanas de terminar la película que tanto llevaban grabando.
Tabi iba a retomar sus estudios el próximo año gracias a la insistencia de Solazar.

Y Solazar… bueno.
Él era el más raro de todos.

Prácticamente de la noche a la mañana su actitud seria y algo fría pasó a ser extremadamente cálida y nerviosa.

Era como ver a un majestuoso león de repente comenzar a jugar con algún perro pequeño.
Estaba muy fuera de lugar.

Aunque no parecía muy natural todo eso Aldryx y Agoti se sentían alegres al ver a su padre tan feliz y emocionado por algo que ni ellos comprendían.
Pero bueno, si algo lo ponía así de alegre debía de ser bueno.

Tabi, en cambio desconfiaba bastante de lo que pudiera ocurrir, razón por la cual se había vuelto un poco más desconfiado y sobreprotector.
Sobre todo con el pelinegro.

– …, ¡Te lo juro!– exclamó el pelirrojo
– No te creo. ¿Cómo una simple llamada puede ponerlo así? – dudó el caprino.
– Quizás los de la lotería le dijeron que ganó un millón de dólares. – añadió el pelinegro.
– Ni así estaría tan alegre como ahora. –
– Entonces no sé. –

Dudas y más dudas.

El trío de jóvenes varoniles estaba sentado en los sofás del piso inferior del hogar del padre de familia. Hace un rato habían cambiado de ambiente por petición del propio Solazar, y teniendo en cuenta que el lazo padre-hijo que tiene con Agoti es ahora bastante fuerte gracias a Tabi pues es entendible que ahora todos estén allí.
Digo, es como visitar la casa de un familiar.

Hablaban sobre lo que pudo ser el causante de la nueva actitud del Solarisapien.
Lastimosamente lo único que tenían era el dato de que el mayor había escuchado al adulto recibir una llamada y que, luego de esa llamada al día siguiente estaba más alegre que niño en fábrica de azúcar.

– Entonces… dices que recibió esa llamada, y al día siguiente… ¿Estaba así? – siguió dudando el ruso.
– Pues debe ser eso. No creo que otra cosa que haya ocurrido a las 2am lo haya puesto así. – dijo con sensatez el mayor.
– Tendría sentido. Ahora… ¿Quién podría haberlo puesto así? –
– Sigo con mi teoría de la lotería. – sostuvo el menor de los tres.
– Seguro, Agoti. Seguro. –
– ¡Hey, es una teoría válida! –
– Un poco sí. –
– ¿Ves, Tabi? –
– Ugh… –

FNF - Betrayal [Tabi & Agoti] CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora