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Capítulo 14 parte 1: Joya del 2010
DÍA 1

I crashed my car into the bridge, I watched, I let it burn. ¡Vamos, Rory! —animó Prairie a mi lado sacándome de mi lectura.

I crashed my car into the bridge —le siguió Cody conduciendo.

—Ojos al frente —ordenó Owen desde el asiento copiloto.

I don't care, I love it —cantaron la pelirroja y el castaño al ritmo de la canción.

Mi mirada se posó en el retrovisor y pude ver el auto de Janik siguiéndonos.

—¿Cuánto falta? —pregunté volviendo mi vista al camino.

—El camino sería más corto si te dejaras llevar y cantaras con nosotros —reprochó Prairie con un resoplido de por medio.

—Llegaremos poco después de las 11 —respondió Owen con la mirada fija en Google Maps.

—Es decir que son como 60 canciones que debes cantar con nosotros —avisó Cody revisando su celular—. Al menos que quieras irte con los otros. Pero te advierto que no será tan divertido como aquí.

Jamás había detallado a Cody como ahora lo estoy haciendo, y me voy dando cuenta que teníamos la misma forma de contar los minutos.

Qué curioso.

—Ojos al frente —volvió a ordenar el rubio arrebatándole el celular.

—Solo quería otra canción.

—Dame, yo la pongo —se inclinó Prairie hacia enfrente pidiéndole el celular al rubio—. No. Esa no. no...

Pasaba y pasaba canciones 100 % concentrada; algo irritada de escuchar milisegundos de varias canciones volví a mi lectura. "Una corte de niebla y furia" no se leerá solo.

I want to break free —gritó al ritmo de la canción sobresaltándome—. I want to break free from your lies.

You're so self-satisfied  —se unió Cody, como era de esperarse—. I don't need you I've got to break free.

—God knows —siguió Owen junto con los otros dos—, God knows I want to break free.

—¡Rory! —apuntó el castaño doblando su brazo hacia mi simulando un micrófono inexistente.

Supongo que tendré que unírmeles y dejar mi lectura a un lado.

I've fallen in love.

[🌩️🌩️]

Después de hacer una parada para comer y un intercambio de lugares por parte de Owen y Cody reanudamos la marcha hacia el lago donde habíamos decidido pasar nuestros últimos días de vacaciones de verano.

—¿De regreso puedo irme enfrente? —preguntó Prairie inclinándose hacia Cody y Owen.

—No si no te regresas a tu asiento y te pones el cinturón —negó Owen con la mirada fija en el camino.

—¿Ahora? —le preguntó desde atrás cumpliendo lo que le dijo que hiciera.

—Lo pensaré.

—Es mi auto, así que yo digo que sí —intervino Cody arrugando levemente la nariz.

—¡Ja! Ahí tienes, rubio.

—Como quieras —respondió Owen rodando los ojos.

—No te molestes —volvió a hablar la pelirroja—. Ambos sabíamos que yo saldría ganando como siempre.

TormentaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora