Total disaster. /\- SDE3 ~ David (Auryn)

13. Traductor de Google

Brad.

María se pasó la mano por el pelo que la sobresalía del flequillo, recolocándoselo. Se encogió de hombros y suspiró. Nos miró alzando una ceja, torciendo un gesto de duda.

–¿Qué se supone que está pasando? –preguntó, dejando caer todo su peso sobre una pierna.

–Esto es solo un espejismo. –dijo Carlos, adelantando la mano mientras la señalaba. –Todo está en tu mente. Estos no son los droides que estabas buscando. –estiró la mano y abrió mucho los ojos.

Este chico es gilipollas.

María se llevó la mano derecha a la muñeca izquierda y retiró de allí una goma elástica para el pelo. La enganchó entre sus manos a modo de tirachinas y lanzó, dándo justo en el entrecejo de Carlos. Este se sobó la parte golpeada y gruñó.

–¿Eso también era un espejismo, no? –preguntó María con ironía.

–Ni puta gracia. –sentenció el rubio.

–Bueno –dije, sin moverme de mi posición ni un centímetro. –, ¿qué estáis haciendo aquí?

–Eso mismo podría preguntar yo. –dijo David, alzando la vista hacia mí.

Encaré el ceño y le miré con desprecio, porque era lo único que podía merecerse por mi parte. Él soltó una risa divertida rodando los ojos. ¿Qué más te puedes esperar de semejante personaje? Inmadurez como mucho. Dios, y que yo tenga que estar aguantando esto.

–Creo que tenemos exáctamente el mismo derecho a estar aquí como cualquier otro. –dijo Carla, encogiéndose de hombros.

–Vale, ¿pero entonces por qué tenéis que estar molestando? –cuestionó Natalie.

–La única que molesta aquí eres tú. –respondió Ana sonriente.

–Habló aquí, la comodín del grupo. –se defenfió Natalie.

–A mí al menos no se me ha quedado chocolate entre los dientes. Deberías lavártelos más a menudo. –dijo Ana, y Natalie frunció el ceño, se dio la vuelta y sacó el móvil, puso la cámara interna y se miró los dientes.

¿En serio cae ante semejante truco?

–Retrasada mental. –gritó Natalie.

–Puta. –dijo Ana con una sonrisa enorme en la que enseñaba los dientes.

–Tampoco hay que pasarse, relaja. –intervino María cortando a Ana.

–¿La estás defendiendo? –preguntó Carla, atónita.

–¿Tienes algún problema?

–Que la última vez que hablamos sobre ella, decías que parecía una osa hormiguera con el celo porque no hacía más que sacar la lengua para buscar algo rico que comer. –dijo Carla.

Natalie abrió los ojos como platos y miró a María. Esta alzó las manos en sintoma de inocencia.

–Vale, es posible. Pero eso pertenece al pasado. Centrémonos a lo que hemos venido. –dijo María restándole importancia.

–¿Es posible? –preguntó Carla, sorprendida.

Pues sí que lo es, conociendo cómo era antes...

–Que sí, que vale, la gente cambia, el pasado pasado está.

–Me acuerdo que me dijiste eso unos minutos antes de que te despidieran del Starbucks, cuando te dije que Carla me había escrito diciendo que estaba con Natalie, Brad y David en el London Eye. -aclaró Ana.