Su cuerpo sumergido en agua cálida que se evaporaba en el ambiente con la cabeza echada hacia atrás, doyoung ahogo un suave suspiro, los músculos de su cuerpo se iban relajando lentamente. La habitación estaba infectada por ese dulce aroma de la esencia que habían sido colocadas cuidadosamente antes que entrara.
Taeyong había salido hace solo unos minutos, jungwoo lo había llamado, lo necesitaba en otro lugar. Doyoung se dio cuenta que era la primera vez que se veía totalmente solo en un lugar dentro de esa casa, siempre estaba acompañado por taeyong, johnny o algunos de los cachorros que lo perseguían curiosos.
Por un lado, se sintió aliviado de no tenerlos todo el tiempo detrás de ellos, pero por otro, hubo una tristeza de no tenerlos a su lado, se sentía demasiado solo en ese lugar. Eso significaba estar en una manada, tener compañeros para conversar, para reír o discutir, para llorar, ellos eran una sola familia.
Durante todos esos años, desde que doyoung tuvo que escapar de su propia manada, había soportado un agujero en su corazón que lo agobiaba cada día, crecía cada día hasta el punto de dejarlo sin aliento, sin fuerzas, ese hueco se estaba haciendo mas pequeño.
Eso asustaba a Doyoung, no quería acostumbrarse a la calidez de este lugar, a su compañía, pero sentía que era demasiado tarde para reaccionar, para reprimirse, así que, dolería cuando decidiera irse.
Ese pensamiento se había alejado, olvidado en miles de sensaciones, pero seguía ahí, latente como un corazón palpitante como una espina debajo de su piel.
Doyoung aguanto su respiración, cerrando sus ojos, se hundió, dejando que el agua lo cubriera completamente, permaneció en esa posición por largos minutos hasta que salió en un quejido ahogado, sacudiéndose las gotas espesas que caían por sus ojos y cabello que se pegaba a su rostro.
Sus pulmones se encontraban adoloridos e igual que sus ojos, había dejado entrar un poco de agua en ellos.
-Aquí estabas- dijo una voz dulce desde la puerta.
Doyoung se giro y lo vio, johnny había vuelto con los brazos cruzados sobre su pecho, recostado en el marco de la puerta.
- ¿Qué es ese aroma? - johnny arrugo su rostro.
- ¿Cuál?
-Ese aroma, esta impregnado en todas partes de este baño.
-Oh, creo que son las esencias de taeyong, él dijo que olía terrible.
-No olía terrible, tu aroma era bueno- él dijo- y ahora, estas cubierto por ese empalagoso aroma. Siento que mi cerebro esta dejando de pensar por ese aroma, es demasiado fuerte para mí.
Doyoung se encogió de hombros, restándole importancia a las palabras del chico.
- ¿Qué haces aquí?
-Este es mi hogar, ¿no debería estar aquí?
-No me refiero a eso- murmuro- pensé que estaría en las fronteras, con los demás rastreadores.
-Taeil nos mando a llamar- dijo johnny entre dientes- dijo que debía volver a casa.
-A taeyong también lo llamo, aunque fue jungwoo quien lo hizo.
-Ya veo.
Doyoung se hundió un poco más, pegando sus piernas contra su pecho, ese hombre no dejaba de deslizar su mirada por su cuerpo desnudo sumergido como si deseara ver debajo de esa agua púrpura que llenaba la bañera, se sentía tímido y orgulloso ante ese brillo de lujuria que se instalaba en sus ojos oscuros.
- ¿Por qué? – doyoung mordió el interior de su mejilla.
Johnny sonrió.
-No es nada importante, si esa es tu curiosidad- dijo johnny- el chico que nos fue a buscar, tuvo que mentir, jungwoo era quien nos llamaba- él suspiro- maldito mocoso. Quería hablar sobre la luna llena.
-Oh.
-Si, para él todo eso es importante- johnny jugueteaba con sus propios dedos- la noche en que la luna nos entrega su poder.
-Atados a la luz de la luna.
-Exactamente- murmuro johnny- esa noche, corremos junto a los mas jóvenes, ¿Te vas a unir?
- ¿Qué?
-No estas obligado a asistir si no estas listo, pero me gustaría verte ahí, junto a los demás.
-Johnny- murmuro doyoung- yo...
-Me gustaría ver a tu lobo.
El corazón de doyoung estuvo a punto de saltar por su boca podía escuchar su retumbar en sus oídos, el pitillo de su sangre recorriendo todo su cuerpo. Doyoung deseaba salir corriendo de ese lugar, el agua estaba demasiado fría alrededor de su cuerpo y aquella mirada esperanzadora que le dedicaba johnny hacia que quisiera llorar.
Doyoung guardaba un secreto en lo mas profundo de su corazón, juro que jamás lo revelaría. No era nada malo o ilegal, pero era doloroso, ese secreto era su mayor esquina que estaba incrustada a la altura de su corazón.
Johnny seguía observándolo con curiosidad, arqueando una de sus cejas.
Doyoung se levantó, sin importar que él pudiera ver su desnudes, saliendo con dificultad para poder envolver su cuerpo en una toalla blanca. La ropa que había dejado taeyong, la apretó contra su pecho como su fuera lo único que pudiera dejarlo pegado en el suelo.
Cuando paso por el lado de johnny, este no intento retenerlo o volvió a hablar, solo hizo a un lado, observando en silencio como ese chico corría por el pasillo, dejando pequeños charcos de agua.
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Tuyo Mío [Johndo]
FanfictionDoyoung, por su carácter romántico, jamás aceptaría un amor arreglado. Jamás aceptaría que un alfa lo reclamara como suyo. El corazón de doyoung se encontraba en otro lugar, en otra persona. Nunca volvería a su pasado, él no retrocedería.