Chico con faldas

Cap 5

—Vaya, en verdad le gustas, ¡pero no tenía la necesidad de decir eso! Fue un idiota—Jisung hizo un puchero después de decirlo, Hyunjin solamente rió por lo bajo guardando su libro de poemas en su mochila. Era verdad, Felix había sido un idiota por no haberse guardado lo que estaba pensando.

—Es un idiota muy lindo—suspiró enamorado, su amigo le sonrió con calma, tal vez aquel chico que usa faldas tenía buenas intenciones con su mejor amigo, tal vez si lo dijo porque estaba nervioso y no por otra cosa. Cualquiera comete errores, él ha cometido muchos errores a lo largo de su vida y todos los ha superado no importa que tan difícil sean, Hyunjin malinterpreto las cosas porque fue Felix quien lo hizo hacerlo todo porque no pensó antes de abrir su bocota y decirle que quería follárselo, Hyunjin había salido solo con una persona en el pasado pero el chico lo quería para experimentar, no era gay o bisexual, era un chico heterosexual jugando a ser gay y jugando con los sentimientos de Hyunjin.

Desde ahí dejó de confiar en el amor, y se cerró a las pocas oportunidades que se le presentaban, así fuera un chico o una chica. Entonces era comprensible que desconfiaria tan rápido de Felix en cuanto escucho aquellas palabras.

—¿Lo perdonarás?

—Lo pensaré. Aún no me convence.

—Tus mejillas dicen lo contrario—Jisung le estiró su mejilla con delicadeza haciendo que su amigo hiciera un puchero por ser descubierto, Jisung lo conocía tan bien, no podía mentirle por más que quisiera.

—Hablaré con él después de clases.

Siendo sinceros, Hyunjin sentía nervios, y todavía no olvidaba los poemas que Felix, su hyung, le había dedicado, no sabía que aquel chico fuera así de romántico ni mucho menos sentimental, aunque era un tanto obvio.
Su cita o salida de amigos se vio afectada por Felix, Hyunjin se sintió mal, sí, pero pero Jisung tenía razón, todos cometen errores así que no perdía nada en darle otra oportunidad al rubio que usaba faldas que por cierto, le quedaban de maravilla.

¿A él también se le mirarán bien las faldas? Nunca antes se le había pasado por la cabeza usar una, admitía que eran lindas pero nunca se imaginó a él mismo usando aquellas prendas o algún vestido, sin embargo, no descartaba la idea de usar una en algún futuro.

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Ambos chicos estaban en la salida del edificio esperando a Felix, Jisung estaba ahí con su amigo solo por precaución, no quería dejarlo solo y que algo malo llegase a ocurrir y él no está ahí para defender a Hyunjin. Tenían diez minutos esperando al mayor hasta que se digno en aparecer, iba saliendo solo, su rostro no tenía ninguna expresión, se veía frío y calculador ignorando a las personas que lo veían por su vestimenta, hasta que su rostro se iluminó al ver a Hyunjin de pie esperandolo.

—Bebé...digo, Hyunjin, ¿me estabas esperando?—le sonrió en grande sintiendo sus mejillas arder.

—Sí—miró a Jisung dándole entender que se alejará para poder hablar con Felix, a lo cual hizo caso y se alejó unos metros—umh, muchas gracias por el libro y los poemas, son muy hermosos. Me gustaron.

—¡Que alivio! Creí que no sería de tu agrado, lo compré pensando en ti, pero cuando lo leí llegue a la conclusión de que el escritor se lo dedico a su difunta esposa, así que solo saque los más adecuados para ti—soltó una pequeña risita.

—Te perdono por lo del otro día, entiendo que estuvieras nervioso, pero lo que no entiendo es por qué dijiste eso, no quiero que me digas—soltó un suspiro tembloroso—podemos empezar de nuevo olvidando ese suceso.

—¡Por supuesto! ¿Quieres ir a comer?

—¿A-ahora? Pero Jisung...

—¡Estoy bien, Hyunjin! ¡Puedes ir, Minho me invitó a su casa! ¡Que se diviertan!—y así como dijo aquello, salió corriendo dejando solos a ambos chicos, uno sonriendo mostrando su perfecta dentadura y el otro con las mejillas rojas.

—Entonces, ¿vienes?—le tendió su mano, Hyunjin la miro por unos segundos antes de tomarla, Felix negó con diversión y entrelazó sus dedos comenzando a caminar hasta el auto del rubio quien le abrió la puerta a Hyunjin.
Felix se subió al auto y lo puso en marcha, podía sentir los nervios de Hyunjin, sus manos jugaban entre sí mientras que ambas piernas se movían sin cesar mientras que mordía sus labios repetidamente, con cuidado colocó su mano en su rodilla sintiéndolo saltar—tranquilo, no tienes porqué estar nervioso.

Le apretó la rodilla y de nuevo subió su mano al volante.

No tardaron ni una hora cuando llegaron a un restaurante-bar muy bonito y pintoresco, ¿iban a beber tan temprano? Pero si Hyunjin ni siquiera tomaba alcohol.

—Eh, hyung, yo no tomo alcohol—susurró con timidez.

—¡Oh! Entonces pediré una limonada para ti.

Le sonrió con dulzura y ambos bajaron del auto, fue entonces que Hyunjin se dio cuenta que aquel lugar era un lugar LGBT+, abrió su boca con impresión al entrar, todo era de colores de acuerdo a la bandera, había cuadros pintados a manos de personas importantes que fueron o son parte de la comunidad, tenían una gran bandera colgando del techo, mesas circulares con asientos en forma de labios, la pista de baile era enorme, la barra de bebidas tenía una hilera de focos de color rojo. Hyunjin nunca había venido a este lugar y ya estaba enamorado.

—Hay poca gente porque aún es temprano, pero en la noche se pone aún mejor, ¡oh pero cuando es el mes del orgullo! Está a reventar—Felix lo guío hasta una mesa cerca de la barra de bebidas y una vez sentados un mesero los atendió—voy a pedir algo para comer, dos tazones de ramen, una rainbow y una limonada.

—¿Algo más?

—No, sería todo.

El mesero se marchó para preparar sus órdenes, el australiano inclinó su cabeza para ver a un Hyunjin con ojos brillantes admirando el lugar, sonrió de lado.
Hyunjin es precioso, parece irreal que una persona tan hermosa como lo es aquel chico pueda existir, sus lindos ojitos marron, labios como dos bombones rosados, mejillas llenitas que parecían dos manzanas, su cabello largo y negro, Felix no pudo quitarle la mirada de encima y parecía que el mesero tampoco.

—Aquí está su orden, y esta va por mi cuenta, es una bebida rosada, se llama pink diamond. Espero que te guste—le dio el vaso largo y circular a Hyunjin quien solamente sonrió con un poco de incomodidad, sin mencionar que no bebía alcohol, así que Felix tomó la bebida y se la devolvió al chico.

—Mi novio no toma alcohol, gracias—el chico pareció avergonzado y con una reverencia se llevo la bebida, Hyunjin parpadeo por aquello.

—Pero hyung-

—No debes aceptar nunca bebidas sin asegurarte como ha sido preparada, pueden contener alguna droga—su suave mirada cambio radicalmente por una dura y severa sin dejar de mirar a Hyunjin.

Se sintió abrumado por aquella pesada mirada que le desnudaba hasta el alma.