Cap 8

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El beso había sido tan especial para ambos, Hyunjin sentía que tocaba el cielo mientras que Felix tocaba el universo, los labios de su menor eran tan suaves como los había imaginado, eran gruesos comparados a los suyos, los mordía con cuidado de no lastimarlo, sus labios hacían chasquidos cada vez que se separaban antes de volverse a unir, Felix tanteo el terreno y sacó su lengua para meterla entre los acolchados labios de Hyunjin, pero antes de hacer otro movimiento, Hyunjin se separó lleno de sorpresa.

—Lo siento, ¿eso fue mucho?—analizó su rostro para buscar algún signo de desagrado.

—No, me sorprendí porque nadie me ha besado con lengua. Sería la primera vez—murmuró, Felix sintió como su pecho se llenaba de orgullo tras haber escuchado aquello.

—Entonces, ¿puedo besarte con lengua?

—Sí puedes.

No perdió tiempo y unió sus labios, con la diferencia de que metió su lengua en cavidad bucal de Hyunjin escuchándolo jadear al sentir esa extraña invasión en su boca, Hwang podía sentirla moverse sobre su propia lengua acariciándola y así sucesivamente hasta que decidió mover la suya propia fue cuando ambas se enredaban haciendo un lío desastroso.
Sus pulmones ardieron pidiéndoles oxígeno, los chicos se separaron respirando con dificultad viéndose a los ojos con intensidad, después se echaron a reír y Felix picoteo sus labios una y otra vez.

—Me gustas tanto Hyunjinnie—le acarició las mejillas.

—También me gustas, Felix hyung. Siempre me has gustado—confesó con cierta timidez en su voz haciendo reír bajito al mayor quien sólo ladeó su cabeza con ternura.

—Vamos a la cama, quiero tener una conversación nocturna mientras te abrazo—al pelinegro le gustó esa idea, así que de nuevo entró al baño para ponerse la pijama que Felix le prestó para que pudiera dormir más cómodo esa noche, las luces fueron apagadas, y cuando Hyunjin ya estaba dentro de las mantas, Feliz no tardó en abrazarlo por la cintura comenzando a acariciar su barriga. Estuvieron así por varios minutos, la respiración de Hyunjin iba bajando de intensidad puesto que se estaba quedando dormido, Felix se levantó sobre su codo izquierdo para ver a Hyunjin con los ojos cerrados.

—¿Estás dormido? Dijimos que tendríamos una conversación nocturna—le susurró, Hyunjin rió quedito y abrió un ojo solo para ver a Felix quien estaba haciendo un puchero viéndose adorable.

—Bien, entonces hablemos.

—Quiero saber más sobre ti, ¿puedo?—de nuevo murmuro a lo que Hyunjin asintió sin problema—¿por qué tienes claustrofobia? ¿tuviste una mala experiencia?

—Sí, cuando tenía cinco años, mi hermana y yo estábamos jugando a las escondidas, ella estaba contando y yo tenía que ir a esconderme, el tiempo se estaba agotando así que decidí meterme en una caja, escuchaba a mi hermana reír mientras me buscaba pero mediante iba pasando el tiempo; ella no me encontraba. Pasaron tal vez minutos así que decidí salir ya que había ganado el juego, pero algo había quedado atorado en la tapa de la caja que no me dejaba salir, intente con todas mis fuerzas empujar ese algo pero no salía, me quedé sin fuerzas y lo único que pude hacer fue llorar, gritar y golpear con mis manos aquella caja, sentía que me quedaba sin voz hasta que mi padre me encontró, tuvieron que llevarme al hospital porque mis uñas estaban demasiado lastimadas—Felix escuchaba su historia con atención, era tan solo un bebé que había quedado atrapado en una caja con poco espacio, no podía ni imaginar lo horrible que pudo haber sido para Hyunjin estar encerrado en ese lugar—quiero hacer una pregunta.

—Adelante.

—¿Tus padres aceptan que uses faldas?

—Bueno, al principio no lo hacían, ellos creían que yo quería ser una mujer. Mis padres muy duras apenas aceptaron que soy gay, que cuando les confesé que me gustaba usar faldas, casi se les escapa el alma—soltó una risita—tardaron en aceptar esa nueva etapa en mi, creyeron que solo era eso, una etapa y que con el tiempo se me quitaría esa idea. Pero mírame, tengo 24 años y sigo usando faldas, ellos lo toleran, sin embargo tengo que usar pantalones cuando estoy con ellos, y no me molesta, disfruto usar jeans.

—Te ves un poco raro con pantalones de pijama ahora mismo—Felix soltó una carcajada luego de que Hyunjin dijera eso.

—Bebé, me haces reír tan bien. Ah, algún día te daré el gusto de verme con pantalones formales, ya lo verás.

—Uh, ¿nunca has sufrido acoso?

—Muchas veces, más que nada por chicos y hombres mayores, todos quieren ver, todos quieren tocar, son unos jodidos asquerosos, me han llegado a decir cosas realmente horribles que no quieres escuchar. He pasado por eso muchas veces, pero sé defenderme muy bien, he pateado algunas pelotas en los últimos cinco años, lo que tengo de usar faldas—su pequeña mano nunca dejó de acariciar su barriga, su pierna se enganchó contra las de Hyunjin y este ni siquiera se dio cuenta de cuando la subió a su cuerpo pero no se quejaba, se sentía cómodo—quiero saber una cosa, espero no ser tan atrevido o incluso que este invadiendo tu privacidad.

—Está bien, creo que con lo que pasó hoy nuestra confianza ha aumentado—ambos rieron, Hyunjin tenía razón.

—¿Eres virgen?

—Sabía que lo preguntarias. No lo soy, mi primera vez la tuve con mi ex novio, si se le puede llamar así al desgraciado—eso último lo dijo entre dientes, pero Felix lo había escuchado claramente.

—¿Te hizo algo?

—Era o es heterosexual, la verdad no sé, se acercó a mí de la nada un día diciéndome que le había parecido interesante y bonito, intercambiamos números y empezamos a hablar—tomó aire antes de hablar otra vez—me había gustado muchísimo, me enamore de él y pensé que estaba teniendo mi cuento de hadas, pero después de que tuvimos relaciones sexuales él simplemente me dijo que no estaba enamorado de mi, que me había enamorado para poder tener sexo conmigo y quitarse las ganas de acostarse con un hombre y saber si era gay o no.

—Ese hijo de puta, ¡solo te utilizó!

—...Por eso actúe así cuando me dijiste que me querías follar. Pensé que solo me querías para eso.

—A ver, hablemos de frente—Hyunjin se giró quedando frente a frente, sus rostro muy juntos, los ojos de Felix brillaban en la oscuridad y Hyunjin pudo deducir que le estaba dando una mirada severa—me gustas, quiero conocer todo de ti, tu historia, todos tus traumas, tus miedos, tus sueños, tus planes a futuro, absolutamente todo y yo quiero que tú sepas absolutamente todo sobre mi. Eres hermoso, angelical, eres precioso y perfecto, quiero cuidarte, llenarte de besos, mimarte y decirte siempre cuanto te quiero y cuánto me gustas, pero también quiero hacerte el amor.

—Hyung...

—Déjame terminar, quiero follarte, hacerte muchas cosas, sí, pero también quiero amarte en todos los sentidos de la palabra, sería hipócrita de mi parte hacerte daño cuando a mí también me lo hicieron. Lamentó mucho que te hayan utilizado solo para curiosidad, pero agradezco mucho que no te haya forzado a nada.

—¿Que quieres decir con eso, hyung?—Felix se quedó algunos segundos en silencio pensando en si decirle a Hyunjin lo que le había ocurrido cuando era apenas un adolescente casi siendo un joven adulto, y decidió que era lo correcto.

—Estuve a punto de ser violado por mí ex novio y fue por la misma razón que tú. Pero esta fue diferente, él creyó que era el pasivo en la relación solo por utilizar faldas y actuar de manera infantil, tierna e inocente, yo me negué a hacer algo con lo cual no me sentía cómodo, porque, ¿por qué siempre asumen que el pasivo tiene que actuar todo lindo y adorable y el activo todo fornido, fuerte y macho? Son sólo estereotipos, a mi me gusta ser tierno, ser lindo y usar cosas femeninas, pero no significa que sea el pasivo en la relación, me gusta ser el dominante, amo someter a mis parejas y eso no me impide a ser quién soy o lo que me gusta hacer y ser, mi ex novio no entendió eso y quiso obligarme a ser pasivo.

—Dios mío, pero que desgraciado, un hijo de puta malnacido que no debió nacer, quisiera arrancarle el pene y dárselo de comer a su perro—frunció el ceño sintiendo impotencia por no estar allí con Felix en ese tiempo y tratar de protegerlo a como de lugar.

—Está bien bebé, yo le quiero hacer cosas peores a tu ex novio. Son cosas que ya no valen la pena recordar, ahora estamos nosotros dos tratando de querernos—se inclinó para besar sus labios—tenemos que dormir, ya es tarde.

—Una última pregunta.

—¿Sí?

—¿Qué cosas quieres hacerme?—Felix resopló abrazándolo contra su pecho para que dejará de hacer preguntas, no quería contestar, porque estaba seguro de que se iba a calentar y no quería asustar a Hyunjin.

—Luego te las diré, duerme.

Chico con faldasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora