"Tenias Que Ser Tu"|MEARIRI

12°

POV Mary Saotome

Tenía miedo a lo desconocido tenía miedo a lo que podía llegar a sentir mi corazón tenía miedo de defraudar a las personas.

Quería empezar a tener confianza con Ririka quería empezar a desenvolverme con ella a expresar mis sentimientos a perder ese miedo.

Quería que ella fuera la primera para mí en todo que ella fuera el principio y el final.

-Somos amigas... conocidas... somos ¿Qué somos? – Ella volteo a verme mientras que yo me sentía nerviosa por la presencia de su hermana.

No había visto muchas veces a su hermana, pero sin duda su presencia intimidada y hacía que uno mostrará respeto a si que tenerla solo mirándonos hacia que me pusiera bastante nerviosa.

-Pues yo yo-Tomé el valor y me puse de pie frente a su hermana Ririka me había dicho que ella era lo mas importante para ella que la amaba mucho.

-Yo quiero salir con su hermana... quiero una relación formal con ella- Me incline un poco para mostrarle mi respeto y más que nada mi seriedad.

-Vaya... nadie había sido tan formal y directa... me agradas- Al decir eso mire hacia arriba y ella me sonrió eso hizo que algo de ese miedo se fuera.

Físicamente eran iguales, pero había una gran diferencia Ririka tenía su mirada más transparente más pura en cambio su hermana tenía una mirada más obscura como si cargará algo que no le correspondía esa era la gran diferencia de ambas.

-¿Hablas en serio? – Volteé a ver a Ririka cuando fui consciente de lo que había dicho.

Sus mejillas estaban algo rojas su mirada brillaba y ella solo se mordía el labio inferior.

Al verla a si el corazón lo podía sentir en la garganta.

Solo le susurre un "Si" y desvíe la mirada no quería ponerme más nerviosa de lo que yo estaba.

-Dime Riri ¿Qué dices? – Si hermana le preguntó mientras yo seguía sin mirarla.

-Pues yo sería feliz... saliendo con Mary-Al decir eso la mire sorprendida ya que ella estaba confesándose.

-Si eres feliz yo igual- Mi mirada ya no se despegó de Ririka.

-Las dejaremos solas-La voz de la señorita Igarashi se escuchó mientras que yo solo estaba perdida en la chica que tenía enfrente.

-Eh pero yo quiero ver el beso- Solo escuchamos como la puerta se cerró dejándonos de nuevo solas.

-¿ Te acabas de confesarte? – Le pregunté a lo que ella asintió algo apenada.

-¿ Tu también no? – Asentí mientras que observaba cómo sus mejillas se ponían rosas.

-Ven salgamos o Kirari sólo interrumpirá- Ella se levantó y me tomó de la mano.

Ambas salimos de su habitación y bajamos las escaleras con mucho cuidado ya que se escucha ruido de la parte de abajo.

Sin ser vistas salimos de la casa sin soltarnos de las manos caminamos un poco hasta llegar a un pequeño parque que tenía una fuente en medio.

-Valla que precioso- Caminamos por el parque admirando alrededor.

Todavía había algunas personas jugando con sus niños o paseando a sus mascotas otras comiendo o otras sólo disfrutando lo que restaba de la tarde.

Decidimos sentarnos bajo un árbol admirando lo que había en completo silencio sólo escuchando el ruido que en ese momento había.

-¿Por qué me trajiste aquí? – Le pregunté mientras giré a verla.

-De niña solía venir solo con mi hermana a jugar por las tardes tengo buenos recuerdos aquí es un lugar que me hace feliz- Su mirada brillaba y sonreía inconscientemente posiblemente se acordaba de esos momentos.

-Quiero crear otro recuerdo aquí contigo-Volteo a verme mientras me sonreía y acercaba su rostro poco a poco al mío.

-Posiblemente me rompas el corazón, posiblemente seas mi destino posiblemente seas el amor de mi vida posiblemente seas mi mayor error, pero sin duda serás mi gran felicidad-Sus ojos viajaban de mis labios a mis ojos y viceversa.

Sabía lo que quería hacer sabía que era honesta sabía que me estaba hablando con él corazón sabía que de verdad se estaba abriendo a mí.

Y no sabía lo que me podía esperar adelante no sabía lo que me esperaría el futuro no sabía cuantas veces lloraría en la noche ni cuantas veces sería feliz.

Dejé de pensar tanto cuando sus labios rozaron mi mejilla para luego terminar en mis labios.

Era la inocencia de un primer beso sus labios eran tan suaves la forma en que me tomó del rostro la forma en que sus labios delineaban los míos hicieron que el corazón amenazara con salirse de mi pecho.

Dejó presionado sus labios unos segundos más con los míos hasta que se separó.

Parpadee un par de ocasiones quería confirmar su había sido verdad si era una realidad de lo que había pasado.

La miré y pude ver que ella estaba igual que yo a un que ella fue la que tomo la iniciativa.

Ahora era mi turno la tomé de sus mejillas y volví a juntar nuestros labios al principio ella estaba sorprendida lo sentía, pero después me siguió el beso.

Seguía siendo un beso inocente y dulce podía transmitirle lo que empezaba a sentir por ella quería hacérselo saber.

El aire empezó a hacer falta a si que solo deje un pequeño beso para después juntar su frente con la mía.

-¿Qué nos convierte esto? – Le pregunté mientras que ella solo se reía.

-Pues su pongo que en una pareja o ¿No? – Ahora fue mi turno reír ya que yo tampoco sabía.

-Me encantas-Su dedo índice tocó mis labios para luego dejar un rápido y corto beso en ellos.

Estaba atónita ella podía ser una mujer segura otras veces muy tímida y en otras muy atrevida tenía sus faces y eso me gustaba.

-Vamos-Me tomo de la mano y nos levantamos de donde estábamos.

Ella me llevó caminando de nuevo todo el parque hasta que decidió tomar un taxi algo que me sorprendió.

-¿A dónde vamos? – Le pregunté cuando estábamos abordó del taxi ella solo se acercó al conductor y le susurro algo que no escuche.

-Tranquila-Apretó más mi mano y de manera rápida dejó un beso en mi mejilla.

Veinte minutos después llegamos al centro de Tokio ella solo sonreía.

-¿Qué hacemos aquí? – Ella no me contestó sólo camino mientras me jalaba.

-En algún momento siempre soñé que alguien me besara aquí- Se paro justo en medio de todo.

-¿Hablas en serio? – Ella asintió feliz mientras tomaba mi otra mano.

No pude negarme no era de mostrar afecto en público, pero por ella haría lo que jamás me atrevería.

Con algo de fuerza la jalé hacia mí juntando nuestros labios pude sentir su sonrisa en medio del beso.

No importaba si nos miraran no importaba si nos criticaban no importaba nada en ese momento solo importaba ella.

-¿¡Mary!? – Nos despegamos mientras sabía de quién era la voz.

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Hola! Supe que tembló en México en el centro del país espero que estén bien los de ahí les envió un fuerte abrazo 🇲🇽💓

Nos leemos mañana 👀