~One Shots Tokyo Revengers~

♡Rindou Haitani♡

Una chica se preparaba para ir a una cita con su novio Rin.

Decidió ponerse un vestido negro y dejar su largo cabello suelto, hizo un maquillaje sencillo y espero pacientemente a su pareja.

No fue mucha su espera ya que le llegó un mensaje de Rin avisando que ya estaba afuera de su casa.

Salió rápidamente encontrándose con el joven recargado sobre su auto viéndola de arriba abajo para luego sonreír.

-Te ves preciosa- el chico la halagó haciendo que ella tornará sus mejillas de un color rojizo.

Rindou abrió la puerta para que ella pudiera entrar al auto, luego camino al asiento de piloto y se adentro al vehículo.

-¿A dónde iremos?- pregunta con curiosidad la chica.

-No te preocupes no te voy a secuestrar así que no hagas preguntas-le dijo el con una sonrisa.

Mientras aceleraba e iba en la dirección hacia su cita puso una de sus manos en el muslo de la fémina, dando pequeñas caricias y haciendo círculos en el.

Su mano cálida se movía de arriba abajo en las piernas de la chica haciendo que esta se ponga nerviosa.

-Me gusta ponerte así-con una sonrisa arrogante el hablo.

-Cierra la boca- fue lo único que dijo para mirar por la ventana intentando olvidar que la mano de Rin estaba en su muslo.

Las calles eran silenciosas, a pesar de que no era muy tarde ya estaba obscuro y la luna podía visualizarse perfectamente.

-Aveces creo que la luna me sigue- comento la chica mientras veía como se movía.

-Oye ¿Cuántos años dices que tienes?- el chico hablo burlón ante la declaración de su novia.

Ella solo lo miro indignada viendo que se detenían cerca de un bosque.

-¿Seguro que no me vas a secuestrar?- dijo ella con un poco de duda.

-Si quisiera- salió del auto para ir a abrir la puerta del lado de _____.

Ella salió mientras acomodaba su vestido, la tomo de la mano y se dirigieron hacia un camino que había ahí.

El menor de los Haitani balanceaba su mano sintiendo como la chica le daba un pequeño apretón.

Caminaron por unos minutos y llegaron a un lago que estaba oculto por ahí.

-No puede ser Rin esto es hermoso- los ojos de _____ brillaron al ver el agua azul mientras que en la orilla había un mantel con una canasta encima.

-Sopresa- el chico ironizó pero se sentía feliz de que ella lo estuviera.

_____ se acercó a la orilla y pudo ver en la canasta vino y un par de copas junto a sus dulces favoritos.

-¿Hiciste todo esto solo?- se refería a preparar un pequeño picnic.

-Si, mi chica se mereces esto y más ¿No?

La mujer volteo a verlo con una enorme sonrisa en su rostro y lo llamo para beber un poco de vino.

Ambos se acomodaron en el mantel que estaba ahí y Rin sirvió la bebida mientras ella fascinada por la vista del lago y la luna sonreía.

-Toma- el chico le tendió la copa y ella la agarro gustosa.

-Por nosotros- el chico hizo un brindis y ella le siguió.

Bebieron el vino mientras hablaban de temas triviales y de cosas vergonzosas que le habían pasado a Ran.