Déjame Entrar ||VOL.1||Christopher Vélez||TERMINADA

Capítulo 11. Bestia

Christopher ríe a carcajadas, mientras que Agatha solo lo mira con molestia

—Ay, deberías ayudarme a buscar la gracia, porque no la encontré —Dice ella entre dientes, pero Christopher no controla su risa —Que tonto —Dijo molesta, mientras rápidamente tomaba el formato del trabajo y comenzaba a leer los problemas, él se pone de pie y camina hacia una esquina de su casa, dónde había una pequeña torre de lo que parecían discos de vinilo muy viejos y polvosos, pero era una gran torre, justo arriba de esta, hay un cuaderno color rojo, con un diseño de rosas en la portada, la lanza a la mesita de centro y sonrió

—Me diste lastima, por eso no la tiré... Bueno, no tanto —Dice él, ella lo toma con rapidez, el cuaderno tiene un poco de tierra, ella lo sacude un poco para quitarle aquella suciedad —Lo lance por la ventana, pero no viniste por él... Entonces cuando salir a regar el patio, estaba ahí —Dijo con una sonrisita burlona

—Bueno... Pues supongo que gracias —Dice ella, Christopher asintió

—De nada, molestia —Dijo Christopher —Ahora a hacer los ejercicios.

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Habían pasado un par de horas, ambos habían empezado a trabajar en su evaluación, Agatha estaba sentada en el suelo, cerca de la mesa de cetro, apoyándose a escribir ahí, mientras que Christopher estaba en un sofá individual, acostado sobre este, recargaba su cuaderno en sus piernas y parecía muy concentrado

—Oye Vélez, no entiendo esto —Dice ella señalando un problema del formato, pero Christopher no la voltea a ver

—¿Y yo qué? —Dice él sin despegar la mirada de su cuaderno, mientras parecía resolver algo

—¿Podrías ayudarme? —Dice ella suplicante

—Ya te explique cómo hacerlo, piensa tú sola —Dice Christopher seriamente

—Por favor, no le estoy entendiendo a esto, supongo que tú si, porque ya estás en otro ejercicio más avanzado —Dice ella, pero Christopher niega —Por favor, Chris —Dijo mientras se acerca con su cuaderno a él

—Déjame estudiar —Dice y yo lo miro suplicante —No me molestes —Dice él, pero Agatha solo suelta un bufido

—Te estoy pidiendo ayuda, por favor —Dice ella, Christopher niega con la cabeza —¡Por favor! —Dice ella, pero Christopher niega con la cabeza, se levanta del sofá y la mira mal

—¡Hazlo tú! ¡No seas tonta! —Dice él molesto, ella se queda callada mirándolo con miedo —¡No es mi culpa! —Dice él mientras lo mira molesto

—No tienes porque gritarme —Dice ella en un tono neutro, pero Christopher niega y sin más, vuelve a su posición, sin siquiera voltearla a ver, ella sin más, toma sus cosas y las guarda en su mochila, rápidamente se levanta y camina hacia la puerta de la casa

—¡¿A dónde vas?! ¡Estamos haciendo esto! —Dice Christopher, pero ella sin mas, sale de la casa y camina con rapidez hacia la suya

Christopher aprieta los dientes con molestia, si hay algo que le molesta, es el hecho de que lo dejen con la palabra en la boca...

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—¿Y como te fue con aquella bestia? —Dice Vivian mientras ve a Agatha con una mueca al salir de su casa, con su mochila y unos libros en las manos

—Ay, ni me menciones a ese —Dice ella con una mueca, caminan hacia el final de la calle, dónde el autobús escolar las recogería
Ambas esperan pacientemente a que el autobús llegué

—¿Tan malo fue? ¿Te obligó a drogarte? —Dice Vivian con gracia, pero Agatha ríe levemente

Hablando del rey de Roma...

El auto de Christopher pasa justo al frente de ella, se detiene ahí, justo a su lado para darle el paso a una mujer con unos niños, Christopher tiene una mano en la palanca de cambios, mientras que la otra está recargada sobre el galante, tiene unos lentes de sol negro y una chaqueta de cuero café

“Fuck, es tan guapo” piensa Agatha al verlo, después de un segundo, Christopher arranca el auto, dejándolas atrás

—¿Qué tanto veías? —Dice Vivian en burla, ella solo sale de su trance y niega

—¿Qué? No, nada —Dice ella un poco nerviosa

—¿Enserio? Porque...

—Mira, deja de hablar de tonterías y fíjate, que ahí viene el autobús —Dice ella, Vivian la mira con una sonrisa pícara

—¡Oh por Dios, te gusta la bestia esa! —Dice Vivian gritándole a los 4 vientos, ella rápidamente le pone la mano en la boca

—Por Dios Vivian, cállate, eso no es verdad —Dice ella y Vivían abre lo ojos a tope, el autobús abrió las puertas frente a ella, Agatha la soltó y subieron al transporte —Tampoco le digas bestia, su nombre es Christopher...

Y bueno, hasta aquí los capítulos que fueron adaptados y que ya se habían subido
Los siguientes serán nuevos capítulos para la historia, espero les gusten
Gracias por leer, criaturas✨