Después de aquel trayecto, ambos llegan a la casa de Milagros, _______ se sorprende al ver el tamaño de la casa
Era de 3 pisos, con un gran patio, un gran portón dorado y podías ver por los grandes ventanales, Christopher se estaciona y bajan, caminan hacia la entrada y un guardia de seguridad abre la puerta
Caminan por el patio y hay 3 enormes perros labradores tirados en el césped, Christopher le indica a Agatha que continúen, llegan a la puerta y abre la puertaPor dentro, la casa aún era más hermosa, había un gran candelabro en la sala, varias piezas de arte y cuadros familiares enormes
—Chris ¿En qué trabaja tu abuela? —Dijo Agatha al ver la casa llena de lujos
—Mi abuelo era dueño de una empresa de tabaco muy famosa en el país, al morir, todo se lo dejó a la abuela, ella es accionista de la empresa, ya que no sabe manejarla, en un futuro, tal vez caiga en manos de algún nieto o algo así —Dijo Christopher mientras sonreía, Agatha sigue admirando todo
—Si Christopher hubiera querido, caería en sus manos —Dijo una voz, ellos voltean a su costado y pueden ver a la abuela Milagros, con una gran sonrisa —Buenas noches, Agatha —Dijo la abuela con una sonrisa, Agatha sonríe ampliamente
—Buenas noches, señora —Dijo Agatha con amabilidad
—Hola, abuela —Dijo Christopher antes de acercarse a ella y darle un abrazo
—Oh, mi niño —Dijo dándole un beso en la mejilla
Agatha observa como era que Christopher se comportaba tan amorosamente con su abuelita, como era que aquel hombre tan rudo y gruñón podía ser un niño pequeño en los brazos correctos
—Pero anden, pasemos a la mesa para cenar, cocinaron un platillo delicioso para ustedes —Dijo Milagros mientras los veía, se da la vuelta y camina hacia allá, Christopher le hace una seña a Agatha para ir con él, ambos caminan hacia el gran comedor
—¿Dónde quieres sentarte? —Pregunta Christopher, ella solo se encoge de hombros, Milagros se sienta a la cabeza de la mesa, Christopher guía a Agatha hacia el lado derecho, sentándose a un lado de él
—Pero que alegría que Christopher te haya invitado Agatha, lamento no habernos podido conocer en el club —Dijo Milagros mientras sonríe y la ve, Agatha solo niega
—No se preocupe, pero a mí también me alegra que Chris me haya invitado —Dijo ella con una sonrisa, Milagros asintió
—Si, Chris jamás trae amigos a la cena, nunca me presenta a nadie, pero al parece tú eres la excepción —Dijo Milagros con una sonrisa
—Abuela, por favor —Dijo Christopher apenado
Enseguida, una mujer de servicio trajo los platos a la mesa, colocando frente a ellos un gran plato con pasta a la boloñesa, una chuleta de cerdo en alguna con alguna salsa y un pequeño platito ondo de rissotto de champiñones
La cena se hizo muy amena entre la plática de los 3, comían tranquilamente mientras se preguntaban cosas tan comunes como la escuela, los pasatiempo o recuerdo del pasado
Para Agatha, fue lindo por fin conocer un poco más de Christopher, de como era con su abuela, de algunos recuerdos que tenían juntos, era algo distinto a lo demás que veía día a díaTerminaron la cena y pasaron la plática a la sala, Christopher y Agatha se sentaron frente a frente en los sofás, mientras que en medio, en un sofá individual, Milagros los escuchaba
—Tengo que ir a orinar, vuelvo —Dijo Christopher antes de ponerse de pie
—¡Por Dios, Chris! ¡No seas asqueroso! —Dijo Milagros con asco, Agatha solo ríe levemente —Pero Agatha, fue un gran placer por fin conocerte —Dijo Milagros con una sonrisa
—Oh, muchas gracias señora, el placer también fue mío —Dijo Agatha amablemente
—Ven, mira esto —Dijo Milagros antes de ponerse de pie y acercarse a la repisa que había justo arriba de una chimenea, hay varios marcos de fotografía, en donde habían diferentes personas, niños y bebés —¿Puedes adivinar quién es este? —Dijo Milagros tomando la fotografía que estaba junto en medio, era un pequeño niño como de 1-2 años, sonreía mientras usaba un lindo traje de marinero
—¿Es Chris? Pero que lindo —Dijo ella con una sonrisa y ternura
—Si, era un angelito cuando era bebé, mira —Dijo enseñando otra fotografía, donde era Chris junto a dos adultos, los cuales supuso que eran sus padres —Es Chris también, con sus padres, tenía como 3 años y se miraba muy contento —Dijo mientras sonríe, Agatha analiza la fotografía y se pregunta
¿Qué pasó?
Chris jamás hablaba de sus padres, lo único que sabía era que no se llevaba con su papá, pero no sabía nada de su mamá
—Cuando había felicidad para él —Dijo ella y Agatha no se contuvo el preguntar
—¿Qué pasó con los padres de Chris? —Cuestionó curiosa
—Su madre murió y está peleado con su padre desde hace años por un par de situaciones desagradables —Dijo Milagros con un poco de tristeza, Agatha solo asintió con pesar
—Y...
—Oh no abuela, más vale que no estés enseñando esas fotos horribles —Dijo Christopher con gracia acercándose, Agatha coloca con rapidez la fotografía en su lugar y ambas voltean hacia él
—Es inevitable, eras un bebé precioso —Dijo con gracia
—Bueno, eso no lo discutiré, pero ahora... creo que ya es hora de irnos abuela, debo llevar a Agatha a su hogar si no quiero que el señor Allen me quiera matar —Dijo Christopher y los tres ríen
—Esta bien cariño, supongo que los espero otro día —Dijo Milagros, Christopher mira a Agatha y ella asintió con una sonrisa en el rostro, sin más, los jóvenes se despiden de la abuela y sale de aquella bonita casa, era hora de subir al auto y volver a sus casas
—Eras un bebé bonito —Dice Agatha mientras de coloca el cinturón, Christopher sonríe y asintió
—No soy nadie para discutirlo —Dice él con gracia, sin más, se da la vuelta y la mira —Agatha, sea lo que mi abuela te haya dicho sobre mí...
—¿Qué? Ella no me dijo nada —Dijo Agatha rápidamente —No, solo hablamos de lo lindo que eras y... Que yo no aprendí a ir al baño sola hasta como a los 4 —Dijo ella con gracia y Christopher ríe también
—¿Enserio? ¿Y que hacías? ¿Usabas pañal aún? —Pregunta Christopher con gracia mientras enciende el auto y comienzan a conducir al vecindario...
ESTÁS LEYENDO
Déjame Entrar ||VOL.1||Christopher Vélez||TERMINADA
Fanfic[Déjame #1] «Déjame entrar, déjame sanar tus heridas y pintarte un nuevo comienzo, alegrar tus días y darte esa felicidad que habías perdido. Déjame entrar, hacerte cambiar de parecer, ayudarte a cargar esa nube llena de tristezas y caminar a tu lad...