Déjame Entrar ||VOL.1||Christopher Vélez||TERMINADA

Capítulo 60. Débil e indefenso

Agatha acaricia el cabello de Christopher una y otra vez, él parece tranquilo, su respiración suave, sus pestañas húmedas y aquella boca entreabierta

Si fuera otra situación, Agatha le robaría un beso

Agatha mira la hora en el reloj de la pared, debería irse, dejarlo descansar tranquilamente
Ella trata de alzar la cabeza de Christopher para quitarse, pero cuando ella lo intenta, Christopher se remueve un poco para acomodarse mejor

—Oh, lamento incomodarte —Dijo ella con una risita, ella vuelve a acariciar el cabello de Christopher —Descansa, angel —Dijo ella al verlo con una sonrisa, Christopher se remueve un poco hasta abrir sus ojos

—Creo que no tengo nada de ángel, Agatha —Dijo él, abriendo los ojos completamente e incorporándose

—Lo siento, creí que seguías dormido —Le responde Agatha con un poco de pena —¿Cómo te sientes? ¿Ya mejor? —Preguntó ella y Christopher asintió

—Gracias por venir —Dijo él y Agatha negó —Pero creo que deberías irte —Menciona él, Agatha solo agacha la mirada

—Si... Esta bien —Dijo ella antes de ponerse de pie, Christopher la observa caminar hacia la puerta, pero antes de que ella salga, se da la vuelta y lo observa —Se lo que mis amigos te dijeron, se que tú no sientes lo mismo que yo y está bien, es aceptable que no sientas eso... Perdón si mis sentimientos te molestan, pero esto no afectará nuestra amistad, lo menos que quiero es incomodarte... Comprendo tu alejamiento y lo acepto, adiós —Dijo ella antes de salir por la puerta, Chris solo la observa irse y siente ganas de ir tras ella

—¡No, Agatha! —Grita Christopher antes de ponerse de pie y correr hacia afuera, Agatha cruzaba la calle y voltea a verlo —¡Vuelve! —Gritó Chris al verla, ella se acerca lentamente hacia la casa y Christopher la ve desde la puerta —Ven, quédate por favor —Pidió él y ella se acerca aún más vacilante

—Pero, yo...

—Dijiste que eso no afectaría nuestra amistad —Aclaró él, ella sonríe y asintió antes de acercarse aún más a él, Christopher le da una pequeña sonrisa

—¿Me dejas pasar? —Le preguntó ella y Christopher asintió, ambos entraron a la casa, caminaron hacia el sofá y se sentaron ahí

—¿Quieres ver una película? O podemos escuchar musica —Sugirió Chris, Agatha asintió

—Pues lo que te haga sentir mejor —Le respondió ella, Chris asintió y se puso de pie para encender la pequeña bocina, enlazó su celular a la bocina y comenzó a reproducir una playlist que escucho esa mañana

Ambos se encontraban sentados en el sofá, escuchando la música mientras ambos están inmersos en sus pensamientos

Agatha pensaba en él, ¿Qué le había pasado? ¿Por qué había tenido esa crisis? ¿Por qué Christopher se sentía así?
Ella es una chica muy transparente, no le importa ser esa que todos ven llorar, esa que no oculta ni trata de ocultar lo que siente
Pero Christopher, él era todo lo contrario, no quería dejar que nadie viera más allá que lo que los ojos humanos alcanzan a ver
Para ambos era un problema, pero eso hacia que su relación fuera diferente...

—Chris —Lo llamó ella, Christopher la voltea a ver con curiosidad

—¿Si, Águeda? —Dijo él, ella sonríe un poco, tenía unos cuantos días sin escucharlo llamarla así

—Ah... ¿Estamos bien? ¿Volveremos a ser amigos? —Preguntó ella y Christopher piensa unos segundos antes de asentir —Gracias... Prometo que no habrá queja de mi y mis sentimientos no afectarán —Responde ella y Christopher asintió

¡Por supuesto que era mentira!

Oh bueno, una verdad que no duraría

—Eso espero, Agatha —Dijo Christopher con una sonrisa, ella lo mira vacilante de nuevo —Es demasiado interesante cómo es que resolvemos nuestras diferencias en un par de minutos, digo, no duramos más de un día molestos el uno con el otro —Dijo Christopher y ella asintió

—Y eso está bien, no? Solucionamos problemas a la brevedad —Dijo ella y Christopher asintió

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—Deja eso, yo lo recogeré —Dijo Christopher mientras se agacha con Agatha para levantar los vidrios grandes de la botella de vidrio que había tirada en el suelo

—Mejor trae un contenedor para tirarlos —Dijo ella y Christopher asintió

Durante esos largos minutos, Agatha quiso hacerle decir el porque de su ataque, Christopher parecía muy débil e indefenso en esa situación, era como un bebé y necesitaba a alguien que lo ayudara
Agatha trata de pensar en el porque, pero la visita al club campestre venía a su mente

En aquella visita, ella lo había visto muy enojado, incluso un poco violento, pero ahora... Él parecía débil e indefenso, no como en aquel momento

—¿Chris? —Ella lo llamó, Christopher se acerca con el contenedor

—Aquí está —Responde poniendo el bote junto a Agatha

—¿Quién estuvo aquí antes?