Esta historia es protagonizada por Izuku Midoriya, un chico Quirkless con el sueño de ser el héroe número 1 al igual que su ídolo, All Might. Con el tiempo se convierte en un niño genio y tras un trágico accidente se convierte en el prospecto a héro...
En una isla artificial, en un edificio en medio de la isla, en un laboratorio había un cansado peliverde trabajando en un nuevo reactor sustentable con un nuevo componente. Ahora, su única preocupación sería llegar a tiempo al festival que sería en pocas horas, podría decirse que estaba contra reloj.
Jarvis: La energía se mantiene estable, señor...
Izuku: Así parece...
El peliverde se acercó a la mesa donde estaba su nuevo reactor y lo tomó viéndolo detenidamente.
Izuku: Observa Jarvis... El futuro...
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Jarvis: Felicidades, señor...
Izuku: Gracias, Jarvis... Sigamos con esto, hay que terminar...
El chico sacó su antiguo reactor de su pecho, estuvo unos segundo viendo los dos reactores en sus manos. Le traía algo de nostalgia pensar en todo el recorrido que lo llevó hasta ese lugar. Colocó su nuevo reactor y continúo con su trabajo, en la mesa habían varios planos de una armadura nueva que serviría a la par con la nueva energía. El plan del peliverde era agregar más control de vuelo, nuevas armas y principalmente, solucionar el tema de la energía. Esperaba que todo esto saliera a la perfección y sin duda era conveniente que así fuera.
El festival deportivo era un gran evento, muy competitivo, no solo iba a participar con sus compañeros, sino con toda la escuela, no podía permitirse tener fallas en su diseño para ese día, bueno, para mañana en este caso.
Nuestro protagonista se sentía como un niño que le decía a su en la noche mamá que tenía que hacer un proyecto para el día siguiente, en pocas palabras, nervioso y con algo de miedo.
Las horas pasaban como minutos, actualmente eran cerca de las 9:30 PM, el peliverde tenía gran parte del nuevo traje casi listo.
Izuku: Estoy agotado... Jarvis, terminé con el sistema eléctrico, carga la armadura al tope, muy temprano por la mañana terminaré el resto y nos iremos a toda prisa...
Jarvis: Si señor, pondré un alarma que sonará unas horas antes de lo habitual por si acaso...
Izuku: Perfecto, buenas noches Jarvis...
Luego de una ducha bien merecida y una merienda, el peliverde procedió a dormir, a diferencia de muchas veces, está vez se quedó dormido casi al instante de acostarse, el cansancio lo había vencido.
En otro lugar...
Se podía ver una rubia con anteojos muy concentrada en su trabajo, aunque era raro para su amiga pelirosa ver a la chica con algo parecido a un botón en la mano mientras le hacía pequeñas soldaduras.
