Shingou / SIGNAL

Complete mess

Su primer año de universidad pasó rápido, no había compartido tantas clases con Iida como hubiera querido, pero por lo menos tenía nuevos compañeros. 

En la universidad definitivamente son más maduras las personas, pero claro que está, que era más difícil hablando académicamente. Muchos se fueron a mitad de año, ya sea a estudiar en un lugar diferente, o a conseguir trabajo.

Así que Izuku sabe, que seguro este nuevo año, otras personas llegarían; sin embargo, no le pasa por la mente ni por un segundo que podrán o no, hacer un cambio en él.

Midoriya Izuku se encontraba en el salón diez esperando a que su profesor llegara, estaba sentado en los lugares de enfrente por costumbre, tratando de evitar malos recuerdos si tomaba lugar atrás.

—Buenas tardes, ¿Cómo están hoy? -preguntó alegremente el profesor Yamada, era su primera vez con aquella clase y al escuchar un aburrido “bien” como respuesta, se sintió insatisfecho. —... ¡Ya sé! ¡Hagamos una pequeña dinámica! No los conozco a todos y me gustaría hacerlo, también sería bueno que se conocieran más el uno al otro. Así que, por favor, cuando mencione sus nombres, den una pequeña presentación de ustedes. -dijo sonriendo, mientas buscaba la lista de los nombres entre sus papeles. —Obviamente, me gustaría que también me dijeran como quieren que les llamemos y de paso algo que les gusta. -aclaró. 

Tal como dijo, nombraba a los alumnos, estos se levantaban y decían lo que se les había pedido, para después tomar asiento una vez más.

Izuku se presentó, y no le importaba las presentaciones de sus compañeros, por lo que no les estaba prestando atención, hasta que le ganó la curiosidad por un chico que era aparentemente nuevo.

—Mi nombre es Todoroki Shoto, pueden decirme Shoto si gustan, aunque no busco hacer amigos; únicamente vine aquí para comprobar que tan buena es la aclamada yuuei. 

Todos, incluyendo a Izuku, voltearon a verlo con claro interés.

—Ah, por cierto, me gusta la soba fría. -dijo y volvió a tomar asiento 

El chico de pecas quedó sorprendido, aquel bicolor lo llenaba de curiosidad. Era alto y su rostro atractivo, pero intimidante a la vez; su cabello bicolor parecía no encajar con su cara, ya que esta no mostraba ninguna expresión que no fuera seriedad.
Y lo que más resaltaba en él, era esa quemadura en su ojo izquierdo.

Los murmullos no tardaron en llegar.

Muchos comentaban sobre su cicatriz, otros de su apellido, e incluso a varios les molestó tanto su comentario de no querer amigos, que ya estaban hablando mal de él.

—Bueno, bueno, tranquilos todos. -habló el profesor callando la charla. —No creo que esté bien tener ese tipo de pensamientos, yo opino que el compañerismo es importante, pero si eso piensas ahora, no hay mucho que hacer. -se dirigió a Todoroki quien asintió levemente. —Bien. La siguiente es Togeike, adelante por favor.

Cuando la clase terminó, Izuku estaba decidido a hablarle a Shoto. De verdad le daba mucha curiosidad saber más sobre él, pero podría verse raro si solo iba a hablarle por nada en específico, así que lo pensó un poco más.
Se encontraba guardando sus cosas, mientras pensaba que excusa inventar cuando el chico bicolor se acercó a él.

—Disculpa, ¿Sabes dónde queda el salón dos? -preguntó a Midoriya, quien se puso un poco nervioso.

—¡... Sí! ¿Gustas que te acompañe? Quizá también pueda decirte dónde están otros salones después, no me es inconveniente alguno. Por cierto, soy Izuku, aunque probablemente ya lo sabías... -habló el pecoso apresuradamente, tratando de actuar normal.

—Oh, me vendría bien un recorrido más tarde. Pero por el momento dime donde está el salón dos, tengo algo de prisa. -contestó Shoto con la misma expresión de siempre, pero parecía haberse relajado.

Izuku notó que aquello, a pesar de sonar grosero, no lo había dicho con tal intención. Tal vez Todoroki no sabía cómo comunicarse con la gente, casi al igual que él.

—Entiendo, perdón por hablar tanto. -se disculpó. —Vayamos entonces. -dijo comenzando a caminar fuera del aula.

—No te disculpes. De cualquier forma, ¿Estás seguro? ¿No tienes clase? -preguntó siguiendo a Izuku. 

—Al parecer la profesora asignada se enfermó o algo así, por lo que estaré libre unos días.

—Ya veo.

“No entiendo en qué piensa este chico. Dice que no quiere hacer amigos, pero no parece que hablar conmigo le moleste.” Pensaba Izuku mientras caminaba enfrente del otro.

—¿Y cuánto falta para que comience tu clase? -le preguntó para matar el silencio.

—Eh... -revisó su teléfono checando así la hora. —Como en cinco minutos.

—Tenemos tiempo, qué bueno. Pensé que íbamos tarde. -sonrió Izuku, comenzando a subir las escaleras. —¿Y cómo harás para llegar a tu siguiente clase después de esta? - le preguntó al haber quedado una vez más en silencio, uno cómodo, pero que él quería llenar con sus voces.

—Cierto. No lo había pensado. -admitió Todoroki. —Hum... -puso su mano en su barbilla, haciendo una pose como si estuviera pensando seriamente en ello. —Supongo que solo preguntaré de nuevo. 

Izuku rio ante la inesperada pose. El bicolor se veía como un niño pequeño, ya no le parecía ni un poco intimidante. 

—¿Qué pasa? ¿Dije algo gracioso? -preguntó Shoto confundido.

—No, perdón. -se disculpó una vez más. —Es solo que no esperaba eso. -cubrió su boca con su mano en un intento de ya no reírse.

—¿“Eso”? Pero si no he hecho nada. -de nuevo tomó la misma pose anterior, haciendo reír más a Izuku.

Si bien Shoto pensaba que no quería hacer amigos, el estar con Midoriya lo estaba haciendo cambiar de opinión.

Además, aquella risa y expresión que el de pecas escondía, quería verla.

—Perdón, perdón. Es que te ves gracioso haciendo eso. -se detuvo justo enfrente de un salón terminando su pequeña sesión de risa. —Aquí es. -señaló el número que estaba escrito por encima de la puerta.

—Gra-

Una chica con cabello rosa, salió de la nada gritando “Voy tarde, voy tarde” empujando sin querer a Shoto por la espalda, haciendo que este chocara con el más bajo, quien se encontraba enfrente de él. “Lo siento” gritó la chica aún sin dejar de correr.

Los dos intentaron equilibrarse para no caer al piso, Shoto tomó de la cintura a Izuku, inclinándose hacia atrás para por fin estabilizarse.

—¿Estás bien? -le preguntó preocupado al peli verde, a quien no se había percatado, aún no soltaba. —Oh, perdón. -se disculpó todavía más preocupado, soltándolo y escondiendo sus manos en sus bolsillos.

—No... está bien. -contestó Izuku bajando la mirada totalmente sonrojado, agitaba sus manos enfrente de su rostro para disimular lo obvio. —Bueno, de cualquier forma, ya deberías de entrar a clases antes de que se te haga más tarde. -levantó la vista mirando ahora hacia el pasillo.

—¿Seguro que estás bien? -cuestionó Shoto, pero el otro ya no podía oírlo.

Su atención estaba enfocada en la persona que venía por los pasillos a lado de su compañero Denki.

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Editado el 17 de agosto del 2022. 

Nota: Para este punto los títulos ya no tienen ningún significado. Antes sí, pero ahora no, así que no lo piensen mucho, gracias.

A nada de darme por vencida con esta historia 😆, pero hago lo mejor que puedo en continuarla.