Confrontación

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-¿Qué?

Marinette

¿Realmente había escuchado bien? ¿Adrien sabía de todo? ¿Se estaba burlando de mi? No Adrien no era así ¿Cierto?

-Adrien por favor, no te quedes callado y contestame.

No quería mirarlo, una extraña sensación se instaló en mi los dos peores días de mi vida hasta el momento, ayer dejé ir a un chico que quería siempre a mi lado, una persona fundamental en mi vida y hoy me sentía ¿Tracionada? Por mi amigo.

Abracé mis piernas ya que en cierta manera eso me tranquilizaba.

-Cuando fuimos a buscarte y estabas con Nathaniel me había dicho todo, sobre la propuesta a donde se iría y sobre ti, sobre ustedes.

-Entiendo.....

Simplemente me puse de pie, caminando hasta mi mocicleta y tomar mi casco.

-¿Marinette?  Disculpa que te lo haya ocultado pero podemos hablar, no quiero que est-

-Adrien, te entiendo - lo mire de reojo - Yo hubiera echo lo mismo, se que el y tú son como hermanos por eso no traicionaste la confianza que depositó en ti lo entiendo, aún así no puedo evitar sentirme molesta hablamos luego ¿Te parece?

Se levantó caminando hacia mí, me dio un abrazo que no sabía que necesitaba pero realmente me sentia segura en los brazos de mi amigo.

-Perdón Marinette, soy un idiota yo-

-No es tu culpa, ya te dije lo que opino, necesito estar sola un momento.

Me aleje de él subiendo a mi motocicleta dedicándole una debil sonrisa antes de colocarme el casco después de eso encendí mi hermosa nena, me coloque el casco y me fui.

¿A donde? No lo sabía, necesitaba aire fresco, despejar mi mente y olvidar todo de los últimos días que habían sido como un torbenillo de emociones, sentimientos sobre todo al parecer no estaba bien y necesitaba tiempo solo para mí.

Con ese pensamiento en mente, con la luz de la luna de guía, seguí mi camino.

Adrien

Me sentía una mierda un completo idiota por haber hablado en el momento equivocado.

Tenía que ir tras ella, pero respetaba aquella decisión de alejarse sinceramente yo no habría actuado así, me habría molestado pero era momento de dejarla ir.

Por el momento.....

Me quedé unos cuantos minutos más viendo hacía el horizonte ¿Y ahora que? No tenía ningún plan, estrategia o algo que hacer en ese momento, el plan de ayudar a Marinette se fue al carajo.

-Creo que llegó el momento.

Me levanté pasando una mano por mi cabello estaba listo y seguro de lo que iba a hacer, al carajo la sociedad al carajo mi idiota yo era el momento de dejar de fingir, el momento de dejar de atarme al pasado y todo lo que estaba en el, me iba a importar una mierda ahora iba a hacer como siempre quise, cuando elegí el nombre de Cat Noir.

Tomé mi casco decidido a mi destino, nadie ni nada me iba a hacer cambiar de opinión era hoy o nunca, si no podía dejar de ser digno de ser libre, feliz.

Conduje hasta un bloque de edificios bastantes lujos, me estacione rápidamente para dirigirme al edificio más costoso del lugar, entre decidido con la idea clara en mi cabeza.

Toque a la puerta del departamento número 124, se escucharon risas del otro lado, contestando casi de inmediato.

Al abrir la puerta y ver la cara de sorpresa de Kagami sabía que algo andaba mal, ya que antes de ver su rostro dijo que en seguida me iba a pagar, según por la pizza ¿En serio? ¿Tenía la puta cara de un maldito repartidor? Aunque eso no era una mala idea.

Difícil de conquistar (MLB) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora