𝚂𝚑𝚞𝚝𝚞𝚙, 𝙹𝚘𝚑𝚗𝚗𝚢| 𝙹𝚘𝚑𝚗𝚗𝚢 𝙻𝚊𝚠𝚛𝚎𝚗𝚌𝚎.

CAPITULO 36

Abrí los ojos lentamente, me encontraba bajo los cálidos brazos de Johnny, podía escuchar aun la música en la parte baja de la casa, me erguí un poco en la cama y gire mi vista hacia el mueble donde descansaba el reloj, el cual marcaban las tres de la mañana, me deje caer de nuevo en la cama y me gire hacia Johnny, su rostro mientras dormía era como estar viendo una pintura, sus facciones eran tan marcadas, sus tupidas pestañas acariciaban su rostro, algunos mechones de su cabello caían por su frente, era como estar viendo a un ángel, como si el supiera en qué momento despertar abrió sus ojos y pude ver sus lindos ojos azules mirándome un poco adormilados.

- Hey – su ronca voz me saludo, eso hizo que me estremeciera hasta la punta de mi cabello.

- Despertaste – lo salude.

El me atrajo aun mas a el y deposito un suave beso en la frente, cerré mis ojos e inhalé el aroma de Johnny, olía a una combinación de menta y algo dulce, como a miel.

- Creo que deberíamos de vestirnos y bajar – me susurro el contra mi frente.

- Creo lo mismo – le conteste mientras sonreía.

Sin esperar otra respuesta de el me aleje para sentarme en la orilla de la cama y comenzar a buscar mi ropa interior que había quedado regada por la habitación, mientras me abrochaba el sujetador escuche la voz de Johnny a mi espalda.

- Eres el ser mas bello que he visto en un millón de años – su comentario me hizo sonrojar un poco y al mismo tiempo me hizo estremecerme.

- Si claro, mi belleza es fuera de este mundo – le respondí mientras tomaba mi blusa del piso.

- Tenías que decir gracias por el cumplido – me dio un suave golpe en mi hombro mientras se sentaba junto a mi en la cama, el aún estaba sin camisa.

- Es que no es un cumplido, es un hecho, cariño – me puse la blusa en un solo movimiento mientras buscaba con la mirada mis medias y falda.

Johnny no respondió a mi chiste en cambio acaricio mi cabello mientras yo me colocaba las medias con delicadeza para después ponerme la falda. Me gire hacia Johnny y el me miraba en silencio, estando ahí en silencio viéndonos a los ojos sentía como si todo lo que paso no hubiera sido nada, podría perderme en su mirada.

- En tres días es el torneo – me saco de mis pensamientos la voz de Johnny – ese en el que peleare con Daniel, ¿Qué sientes al respecto? – me pregunto él.

Yo me quede en silencio, tenía días que no sabia nada de Daniel, solía mirarlo a lo lejos, se miraba tranquilo e incluso se podría decir que había cambiado un poco físicamente, pero no me había tomado el tiempo para acercarme y charlar con él, lo cual me hacia sentir un poco mal ya que Daniel para mi era como ese lugar seguro en el que puedes descansar cuando ya no tienes ganas ni de seguir y tal vez yo lo era para él, o al menos eso es lo que quiero pensar. Levante mi mirada y los clave en los ojos azules de Johnny.

- Quisiera que no lo hicieras, que no pelees – mi voz salió casi como un susurro, pero sabía que Johnny lo había escuchado a la perfección ya que tenso un poco su mandíbula.

- Sabes que no puedo hacer eso, es mi deber pelear, espero lo entiendas – soltó un pesado suspiro mientras acariciaba mi cabello con delicadeza.

- No estas obligado a nada Johnny, sabes que...- el no me dejo terminar la oración ya que realizo un ademan de mano para evitar que continuara.

- Por favor, Alex, no insistas con este tema – el me sonrió sin mostrar los dientes, se agacho a tomar su camisa del piso y se la puso en un solo movimiento, yo me levante después de calzarme mis botas y solté un largo suspiro, Johnny camino hasta la puerta de la habitación, se giro hacia mi y alzo su mano en mi dirección, esperando que tomara su mano, yo sonreí y camine hasta el, tome su mano y junto salimos de la habitación.