𝚂𝚑𝚞𝚝𝚞𝚙, 𝙹𝚘𝚑𝚗𝚗𝚢| 𝙹𝚘𝚑𝚗𝚗𝚢 𝙻𝚊𝚠𝚛𝚎𝚗𝚌𝚎.

CAPITULO 2.

Daniel me miraba fijamente mientras tomaba agua de su botella, nos encontrábamos sentados debajo de un arbol en el patio de la escuela, yo lo miraba mientras le sonreía con todos mis dientes.

-Enserio que eso de ahí adentro no me lo esperaba para nada- me comento mientras cerraba su botella y la ponía junto a él.

Yo me encogí de hombros y giré mi vista hacia el cielo.

-No le tengo miedo a ese idiota- le respondí-¿fue el quien te hizo eso?-le pregunté mientras me giraba para verlo de nuevo.

El me miró y sonrió de lado, yo con eso entendí todo.

-¿Porque?- pregunté de nuevo mientras jugaba con uno de los pliegues de mi falda.

El solto un largo suspiro y se recargo junto a mi, pegando su espalda al tronco del árbol

-¿Viste a la chica con la que hablaba hace rato?- me pregunto, yo asenti- anoche hubo una fiesta en la playa, fui invitado por uno de mis vecinos, esa chica estaba ahí, hablé con ella un poco y cuando menos lo pensé esos tipos habían llegado, el rubio al que golpeas te es su ex novio, el quería hablar con ella anoche, ella no quiso, las cosas se complicaron me quise hacer el héroe y terminé con el ojo morado- concluyó la historia.

- maravillosa manera de terminar el verano- le respondí con una sonrisa, la cual el me regreso la sonrisa.

-Ni que lo digas- hablo entre dientes.

La campana que anunciaba el final de las clases retumbó por todo el lugar, Daniel y yo nos giramos para vernos, bastantes sorprendidos pues habíamos estado sentados ahí bajo ese árbol las últimas 2 horas de clases. Me levanté de un salto y le tendí una mano para ayudarlo a levantarse.

-¿Hacia donde vives?- me pregunto mientras caminábamos con rumbo hacia donde se encontraba su bicicleta.

-De hecho, a una cuadra de tu casa- el giro para verme- te miré en la mañana, mientras iba camino a la estación de autobus-

-Vaya, tu si que eres observadora- sonrió, mientras toma su bicicleta y emprendiamos nuestro camino de nuevo.

-¿Quieres que te lleve?- pregunto un poco nervioso.

Me detuve y me giré- Me encantaría, pero tengo que ir un lugar antes de llegar a casa-

El me miró un poco desilusionado pero no borró su sonrisa.

-Esta bien, nos vemos mañana- me respondió mientras se subía a su bicicleta.

-Si, hasta mañana- le respondí.

El se despidió con un gesto de mano y emprendió su camino.

Yo comencé a caminar con rumbo contrario a mi casa, debía ir al trabajo de mi hermano ya que necesitaba que me diera un poco de dinero, mismo que le había ganado en una apuesta la semana pasada, lo bueno era que el trabajo de mi hermano no quedaba muy lejos de la escuela, lo sabía porque ayer antes de llegar a casa para desempacar, mi padre nos había mostrado donde estaba mi escuela y el trabajo de Dylan. Quedaban unas pocas cuadras para llegar al trabajo de mi hermano el cual era una cafetería cuando a mis espaldas escuchó el rugir de un motor, me giró un poco para ver de que se trataba y me percató que son los idiotas que estaban en la cafetería esta mañana, corro rápidamente a esconderme detrás de un letrero que estaba sobre la banqueta y observo como se alejan hasta denterse justo a fuera del lugar donde trabajaba mi hermano, estos empiezan a descender de sus motocicletas y yo suelto un largo y tendido suspiro; habían entrado justo al lugar al que necesitaba ir y no es que les tuviera miedo o algo, es solo que no quería más problemas y esos chicos tenían escrito la palabra problema por todas las partes de sus ser, seguí de cuclillas escondida detrás del letrero pensando en que haría, ¿irme a casa? O ¿entrar?, me senté en el suelo y mientras ponía los pro y contras en mi cabeza, lo cual no ayudó porque seguía sin saber que hacer, este era uno de mis defectos, siempre pensaba de más y me era difícil tomar una decisión.

-Vamos Alex, no puedes estar aquí todo el día-susurre para mi misma, levante la mirada y las motocicletas perfectamente estacionadas llamaron la atención del pequeño diablillo que tengo dentro de mi, algo me pedía a gritos que me vengara aún más por lo que ese chico rubio había hecho esta mañana, como si mi cuerpo se mandara solo me levanté de un brinco y comencé a caminar rápidamente hacia donde estaban estacionadas aquellas motocicletas, gire mi cabeza a todos lados para estar completamente segura que nadie me observaba y acerque mi temblorosa mano a los neumáticos de una de las motos, mi plan era sacarle la mayor cantidad de aire pero como soy torpe y la vida me odia, por accidente moví bruscamente el brazo, lo cual ocasiono que dicha motocicleta se cayera y no conforme con eso las demás comenzaron a caer como fichas de dominó, yo no podía creer lo que estaba pasando me levanté de un salto y observé el desastre que había ocasionado, a causa del ruido varias personas salieron de la cafetería para ver que era lo que había sucedido y entre esas personas estaban los dueños de las motos, quienes intercambiaban miradas entre las motocicletas y yo.

-Eh... este...- intentaba buscar un excusa pero nada salía de mi boca- adios- dije rápidamente mientras me echaba a correr sin mirar atrás, podía escuchar pasos detrás de mi pero no baje ni un poco la velocidad, no podía, sentía como si en cualquier momento mis piernas fueran a safarse de mi cuerpo pero continue ya que mi vida dependía de esto, a lo lejos podía divisar la escuela y por alguna extraña razón sentía que ahí estaría  segura, me acercaba a cada paso, mi corazón se sentía como si fuera a salir de mi pecho, estaba a unos metros de llegar cuando siento como me toman del brazo y me frenan de golpe, me giran sobre mis talones y quedando de frente con un cansado y acalorado rubio.

-Te atrape preciosa- me dijo entrecortadamente.

Yo me quedé estupefacta sin saber que decir, la había cagado.

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𝐇𝐨𝐥𝐚𝐚𝐚, 𝐚𝐪𝐮𝐢 𝐞𝐬𝐭𝐚 𝐞𝐥 𝐬𝐞𝐠𝐮𝐧𝐝𝐨 𝐜𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨, 𝐦𝐞 𝐚𝐥𝐞𝐠𝐫𝐚 𝐦𝐮𝐜𝐡𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐥𝐞𝐬 𝐡𝐚𝐲𝐚 𝐠𝐮𝐬𝐭𝐚𝐝𝐨 𝐭𝐚𝐧𝐭𝐨 𝐞𝐥 𝐩𝐫𝐢𝐦𝐞𝐫𝐨, 𝐩𝐫𝐨𝐧𝐭𝐨 𝐬𝐮𝐛𝐢𝐫𝐞 𝐦𝐚́𝐬, 𝐧𝐨𝐬 𝐥𝐞𝐞𝐦𝐨𝐬 𝐩𝐫𝐨𝐧𝐭𝐨!
𝐂-𝐘𝐞𝐡𝐞𝐭♡