¡Atención! Este capítulo tiene menciones varias sobre temas que pueden resultar incomodos para algunas personas. Nada realmente explícito, pero menciones de violencia extrema, abusos y maltrato. Si no estáis cómodxs con ello, saltároslo y os hago un resumen en comentarios.
Para cuando el consejo quiso enviar un mensajero al receso de las nubes para avisar del inicio del juicio, los Lan ya estaban allí. WanYin se había negado a ser llevado por XiChen, y andaba lentamente a su lado, tratando de aparentar estar perfectamente. WuXian, sin embargo, seguía anidado en la cabeza de Lan WangJi, demasiado calmado. La tensión era palpable, cuando aparecieron para sentarse en su sección del salón. WanYin se sentó al lado de XiChen, completamente enderezado y con porte orgulloso. Sólo por la insistencia de los niños, se había dejado colocar una cinta Lan que formaba un lazo alrededor de su cuello y aquello atrajo las miradas. ¿Desde cuándo el líder Lan tenía un familiar bajo su ala? ¿Cuándo había hecho un pacto? ¿Con quién? ¿Y por qué sin la ceremonia pública usual?
Casi todos los clanes de magos habían acudido, o al menos, habían mandado a un representante. Los clanes de familiares estaban casi desaparecidos, pero no por indiferencia hacia el juicio. Prácticamente nadie pareció notarlo, aunque cierto felino se puso nervioso por ello. El asunto de la sesión del día era demasiado serio como para ignorarlo. Los Wen acumulaban demasiados agravios menores contra varios clanes. Y hasta ahora, habían quedado impunes de ellos. Ahora que uno, mucho mayor, se había revelado, nadie iba a quedarse al margen.
Tan pronto como Wen Rouhan y su séquito llegaron, el juicio dio comienzo. Por supuesto, este negó todo conocimiento del ataque y alegó simplemente, tener noticias de que su hijo estaba persiguiendo a un familiar que había escapado de su dueño. Nada de ilegal en ello. Por supuesto, negó por completo la existencia de bestias entre sus filas, y salvo por aquel incidente aislado con el rebelde prófugo, no habían tenido problemas con los familiares. Cada acusación fue negada sin un pestañeo. El mago permanecía serio, casi retando al consejo a que presentase pruebas irrefutables contra él.
Entonces fue el turno de los Lan para hablar. El ataque fue narrado desde la mala educación de Wen Chao y sus subordinados, a sus incongruencias, y absurdas exigencias. Los Wen no les habían presentado pruebas suficientes para iniciar una investigación, y nadie había notificado al líder del clan la aparición de ningún familiar fugado de su pactista, por lo que no había verdaderos indicios de que el familiar estuviese allí, a pesar de la insistencia de los Wen. Estos ni si quiera aceptaron su ofrecimiento de buscarlo en los alrededores, exigieron entrar desde el primer momento. Obviamente estaban en su derecho a negarse. Su máxima seguía siendo la justicia, a pesar de los años.
Claro y conciso, sin evitar los detalles, Lan XiChen relató el infierno vivido en el receso de las nubes, para la consternación de casi toda la sala. Las bengalas de auxilio lanzadas a los Nie y los funcionarios del consejo desde el primer momento, eran la prueba de que la declaración de guerra formal jamás había sido notificada y el ataque realizado sin previo aviso. Los Lan se defendieron como pudieron del primer ataque y de la destrucción que produjo. Que se lanzasen de inmediato a atacar las zonas civiles, donde más víctimas provocaron, era prueba que desde el primer momento su intención fue maximizar el daño.
Cuando por fin se reorganizaron y consiguieron presentar batalla, los Wen fueron automáticamente desprovistos de sus armas y poderes, capturados y apresados para ser presentados directamente al consejo. Los Lan no eran un clan bélico. No solían tener problemas con otros clanes, y si se daba el raro caso, nunca lo solucionaban por su cuenta, siempre lo trataban de resolver diplomáticamente y en el peor de los casos, lo presentaban ante el consejo. Así que semejante trato, era inexcusable.
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Al otro lado del vínculo.
Fiksi PenggemarLan XiChen no podía imaginar, pese a toda la magia del mundo, que algún día acabaría viviendo algo así. A veces, la vida da vueltas inesperadas, requiebros y en ocasiones encuentros que la cambian por completo. Y todo empezó con un día tranquilo y a...