Lo que nos pasó por tontos (Borrador)

Capítulo 35|...Y ahora secuestradores

E L I Z A.

Estreché mis ojos y me esforcé en agudizar todos mis sentidos y enfocarlos en mi meta, aislándome por completo de la multitud vitoreando a nuestro alrededor. Sorprendentemente, en serio estaba comenzando a lograrlo justo antes de que la voz exagerada y profunda de la Muerte resonara detrás de mí.

— Damas y Caballeros. Caballeras y princesos he aquí con ustedes... la recta final del primer torneo improvisado y familiar llamado "Lío, mira de lo que te perdiste". Comenzaremos por presentarles a los últimos cuatro finalistas. — exclamó Vadrik vestido con su extravagante traje de príncipe encantador, de pie sobre la máquina de baile y hablando con voz de presentador a través de un micrófono de brillitos dorados. ¿De dónde diantres había sacado ese micrófono? Ni siquiera el abu Tridente podía responder eso. — Comenzando por Tadeo Sosa, alias el pequeño cuñado de Kalev y al parecer posible y nuevo amigo de mi brothersito.

A pesar del quejido de protesta de Vidian, el chico castor continuó sin ningún reparo.

— A su lado, el chico más atractivo, después de mi obviamente, y portador de los genitales más sociables de todo el condado, Kalev Lorem Cristian, no se asusten por tantos nombres, Iglesias Grigori. Recuerden gente, si quieren su número lo voy a estar vendiendo detrás del simulador de montaña rusa pero solamente a cambio de mercancía con diseños de castores.

Pasando por alto la queja de Kalev sobre a qué tan bajo costo vendía a su primo, Vadrik continuó. Y ciertamente, llegados a este punto y teniendo tantos espectadores entretenidos, nadie podría pararlo.

— Continuamos con el pequeño rubio de lentes que es tan adorable en su apenas noventa y cinco centímetros, que al verlo seguramente a muchos de ustedes se les está pasando por la cabeza un pensamiento que no es muy anticonceptivo precisamente. Él es, por supuesto, ¡Vidian, mi brothersito!

«Vuelve a decir brothersito una vez más y te aplasto como Hulk a Loki...» gruñó Vidian por lo bajo resaltando su repentino malhumor.

Fruncí el ceño y le dirigí una mirada atenta.

— Y por último, pero no por eso menos importante, tenemos a una chica usando un espléndido traje de castor cuyo dueño, sospecho, ni siquiera le ha dado permiso de usar pero allí la tienen: Usándolo con tal descaro que solo se le permite hacerlo por ser la mejor niñera del mundo. Ella es Eliza, alias MI CUÑADA, futura esposa de MI HERMANO y futura madre de MIS SOBRINOS. Así que ojito con el/la que quiera atreverse a intentar conquistarla por qué tendrá que apañárselas con mi brothersote...—

Oh, Santa vírgen de las vergüenzas.

Iba a matarlo. ¡Y me importaba tres pepinos que sea la Muerte! Abrí la boca dispuesta a regañarlo cuando Vidian, que estaba de un sorprendente malhumor, me cortó.

— Vadrik, ¡¿piensas empezar el juego o esperar hasta que sea adulto?!— gruñó.

Muy bien. Si aún no han deducido lo que estaba pasando, se los resumiré: luego de que todos nos encontraramos y nos diéramos cuenta de que al parecer habíamos tenido la misma idea de ir al mismo centro comercial de otro pueblo para pasar por desapercibidos, siendo Tolev para tener su primer cita que-Toby-dice-que-no-es-una-cita-pero-Kalev-y-los-hermanos-de-Toby-dicen-que-sí, Vadrik para practicar con sus compañeros de teatro mientras usaba un ridículo traje de Romeo y no sentir la presión por miradas juzgonas de conocidos, y finalmente los bebés Demonios y yo que decidimos ir allí por qué necesitaba ropa urgente. Hecho que no tenía en absoluto que ver con qué tengamos la entrada prohibida al otro centro comercial o que yo estaba usando un traje de castor.