Tan pronto como Jev terminó la llamada salimos en busca de Nora.
Scott decidió que no creía seguro el que Nora tuviera razón de su existencia, así que estaría un poco apartado de mi de ahora en adelante. No dijo eso sin antes hacerme un pacto de sangre, literalmente. Usando su navaja de bolsillo hizo un pequeño corte en ambas palmas, la de él y la mia. Haciéndome jurar que cuándo necesitara su ayuda, para lo que sea , no dudara en llamarlo, aún si Nora estaba presente. Es claro que lo llamaría, Scott es necesario en mi vida.
Dave decidió que iría con nosotros, ya que, según sus palabras: "Estará conmigo cada segundo de ahora en adelante. Debido a todo el tiempo que no nos vimos".
Dejamos a Charly en casa de Scott, con la esperanza de que entablaran una pequeña conversación para que no se aburrieran en éste tiempo.
Le dejé mi auto a Scott por si llegaba a necesitarlo y nos fuimos en el de Dave: un charger del 78' color marrón.
Dave tomó el volante y Jev ocupó el lugar del copiloto, Noah y yo nos acomodamos en la parte trasera.
Llevaba aún un inmenso dolor debido al golpe, una venda rodeaba mi cabeza cubriendo la herida. Noah se acomodó a un lado de la ventana, entré seguido de él y me senté a su lado.
-¡Cielos! - recargué los codos en mis rodillas y sostuve mi cabeza con mis dos manos.
-¿Aún te duele mucho? - preguntó Noah, asentí levemente - Anda, ven aquí - palmeó sus piernas. Lo obedecí. Coloqué mi cabeza en su pierna, con su mano acariciaba suavemente mi nuca como lo había hecho Jev.
-Así que... - habló Dave dirigiéndose a Jev - ¿Quien eres? - Jev se giró lentamente hacia Dave. Tenía su perfecta cara de sarcarmo, no sonreía, pero se alcanzaba a distinguir una expresión como si estuviera viendo algo divertido.
-¿Quien eres tú? - giró solo un poco más a la izquierda para poder verme, le sonreí levemente.
-Buena pregunta. Mi nombre es Dave, soy un ángel guardián.
-Guardián, ¿Eh? - Jev sonrió burlón - Impresionante.
-Jev, te recuerdo que tú también llegaste a ser ángel guardián - le dije a Jev con una sonrisa -, no tienes derecho a burlarte.
-No me burlaba, sólo que tiene un aspecto muy... No para ser ángel guardián. Pero bueno, otra pregunta. Tú y Janne... - su mandíbula se tensó - ¿Que son?
-Bueno... - comenzó hablar Dave, me levanté rápido ignorando el dolor de mi herida.
-¡Nora está ahí! - interrumpí a Dave apuntando hacia dónde se encontraba Nora en compañía de una chica blanca como la nieve de cabello negro que le llegaba arriba de los hombros, completamente lasio, sus labios eran de color rojo natural. La chica, que, por lo que había escuchado de Jev su nombre es Sky, charlaba con Nora, hacía ademanes exagerados y reía mucho.
Dave detuvo el auto frente a ellas y Jev bajó rápidamente. Depositó un rápido beso en los labios de Nora y le sonrió a Sky. Las guió hacía el auto, abrió la puerta trasera para ellas, Nora se acercó para entrar primero, cuándo notó mi presencia se detuvo y salió del auto rápidamente.
-¿Patch? - Jev se acercó a ella y la tomó de los hombros.
-No hay problema, está bien, ángel. Entra, hay mucho de que hablar.
Nora entró y se sentó a mi lado, con todo el cuidado de no tocarme, como si me tuviera miedo o asco. Su amiga, Sky entro seguido de ella, al estar bien sentada se acomodó su falda y desechó sus tacones.
-¡Hooola Noah! - pasó por encima de Nora y mio para tomar la mano de Noah, éste la rozó muy a penas, se notaba el miedo en su rostro
-Hola Nora - sonreí, sería divertido.
-Hola - dijo sin quitar la mirada del frente.
-Jev, cariño, ¿Podrías encender la radio? - Nora se tensó al escuchar que había dicho "Jev" y "Cariño" en la misma oración. La verdad, admitiendo, esto de hermana celosa es divertido. Jev encendió la radio y sonó una canción de rock pesado, muy pegajosa.
-Patch - dijo seria Nora dirigiéndose a mi.
-¿Disculpa? - le sonreí sarcásticamente.
-Patch, llamalo Patch, no Jev - Por el perfil de Jev distingui una sonrisa que se formo en su rostro -. Ni siquiera yo, su novia, le digo Jev.
-Yo soy más que su novia, Nora. Tengo todo el derecho de llamarlo como quiera - si con la mirada mataran, adivinen ¿Quien ya estaría muerta? Yo.
-¿Que edad tienes? ¿12? - preguntó aún molesta.
-Nora - le dijo serio Jev. Nora se acomodó en su lugar y llevaba su mirada hacia el frente, con la cara en alto.
Decidimos ir a la casa de Dave, un lugar cómodo para hablar. Su casa se encontraba en el barrio mejor pagado de Coldwater, estaba en lo más alto de la ciudad, tan pronto subías y te encontrabas con unas casas enormes y muy lujosas. Cada una tenía un hermoso jardín con flores de todo tipo y colores. No faltaban los autos de último modelo en la entrada de cada una. Hombres vestidos con uniforme cortanto los arbustos, mujeres vestidas con un vestido negro con blanco sacando las bolsas de basura o regalando limonada a los trabajadores.
Dave vivía en una de las casas del fondo, claro, era enorme. Color blanca con los marcos de las ventanas verdes, un gran árbol se encontraba al frente, medía unos cuatro metros de alto, las ramas tupidas de hojas verdes y amarillas caían como lluvia, tenía la forma de un para-aguas.
-¡Somos vecinos! - gritó emocionada Sky al momento de bajar del auto - ¿Quien iría a imaginar que eres tú del que está enamorada mi hermana? - Dave le regaló una sonrisa arrogante y nos guió al interior de la casa. Por dentro era mucho más bonita que por fuera.
La sala de estar tenía tres sofás negros con cojines azules.
-Sientense, por favor.
Hicimos lo que nos pidió. La primera en ocupar un lugar fue Sky, a su lado se sentó Nora. Yo me senté en el de dos espacios y Dave en el individual. Es claro que Jev se sentaría con Nora, pero no fue así, se sentó junto a mi.
Nora ya me había asesinado con la mirada en el coche, ahora, me mandó directo al infierno.
-Bien, ¿Que hacemos aquí? - preguntó Nora molesta.
-Nora, tengo que decirte algo importante... - Jev habló, y guardó silencio con una pequeña sonrisa en su rostro - Ella, se llama Jeanne y estoy saliendo con ella, Nora.
No pude evitar sonreír ante el comentario de Jev. Teníamos la misma personalidad, sólo que Jev la tiene algo oculta. Dave se me quedó viendo preguntándose si era cierto, algo molesto. Ni hablar de Nora, su mandíbula tensa, ojos cristalizados, y una mirada entre tristeza y enojo.
Jev se levantó y se puso de cuclillas frente a Nora, tomó su cara con sus manos, la acercó a él y le depositó un delicado beso en su nariz.
-Es una broma, ángel. Una pequeña broma.
-¡Diablos! Ya me había emocionado - le dije riendo.
-¿Quien es ella entonces? - preguntó Nora.
-Mi nombre es Jeanne Cipriano y soy la hermana de Jev. Somos parientes, Nora. - le sonreí esperando su respuesta. Cuándo estuvo a punto de hablar algo la detuvo; Un fuerte golpe se escuchó en el segundo piso, vidrios rotos. Una puerta abrirse, después cerrarse.
Dave se levantó de su lugar y se acercó a las escaleras.
-¿Quien está aquí? - le pregunté.
-Sólo nosotros. Iré a revisar.
-Te acompaño - le dijo Jev.
-No. Quedate aquí - Dave me apuntó -. Y cuidala.
Subió las escaleras de dos en dos y después lo perdí de vista. Jev se acercó a mi, puso su brazo sobre mis hombros y me acercó a él, hizo lo mismo con Nora con su otro brazo, la chica, Sky, tomaba el brazo de Nora con demasiada fuerza.
Se escucharon unas pasos bajando las escaleras. No cómo los de Dave, si no de otra persona.
-Hermanos, ¿Eh? - dijo la persona bajando las escaleras.
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