Una Pequeña siempre soñó en poder llegar a ser una mujer casada con el amor de su vida, su amigo de la infancia era el afortunado, nadie mas que ella conocía la dulzura de su corazón, pero, había algo que los separo, la distancia y la edad. Ella era...
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La pelea estaba a punto de acabar, todo la adrenalina de mi cuerpo quería actuar, pero el resto no me dejaba ver a mi esposa luchando por su vida, todo lo miraba en cámara lenta, miraba como un lanza de rayos y algún poder de Tomura, era lanzados a AFO, miraba como es se combinaba y chocaba contra él creando una explosión que mando a volar a los dos.
— ¡¡Lisener!! — grite al ver como esta caía al suelo
Uno de los de la liga, me paralizo, no podía moverme del lugar quería correr y tenerla en mis brazos cuando el humo se disperso, pude ver como ambos se levantaron, y se acercaban a donde esta aquel hombre inconsciente... Ambos se abrazaron, lloraban entre ellos, para luego, comenzar a caminar a donde nos encontrábamos todos, no pude evitar correr a ella.
Cuando por fin la tuve en mis manos, ella sonrió su voz estaba desgastada, estaba muy débil.
— Y-ya todo... acabo... — fue lo ultimo que dijo antes de caer inconsciente
— Si ya todo acabo mi amor...
Rápidamente comenzó la captura de varios villanos, este reten estaba a cargo de la armada Alemana, ya que ellos se llevarían a AFO por el secuestro de la heroína no. 2 y el asesinato del héroe no. 1
Nosotros íbamos al hospital no podía pasar mas tiempo sin mi esposa, curaron sus heridas, y el tratamiento comenzó, no me alejaba de su lada por ningún momento. Hasta unos días después que ella despertó, pude verla, sus hermosos ojos.
— Enji...! estas bien... — se miraban lagrimas en sus ojos
— Si mi amor, estoy bien... y mas ahora que regresaste a mi lado...
— A mi me alegra demasiado que... estoy a tu lado... y Lushia... donde están mis niños...?
En eso se ve como la puerta se abre, entrando mis cinco hijos, y aquel peliceleste en una silla de ruedas, quien tenia la cabizbaja.
— Hablando de ellos...
— Mis niños... están aquí!
— Mamá!! — dijeron los tres menores, para lanzarse con ella
— Los entrañe mucho... no saben el infierno que tuve que pasar para poderlos abrazar nuevamente... — dijo llorando
— y el que nosotros vivimos por culpa de ellos...
Al escuchar lo ultimo vi como el chico quería dar la vuelta e irse, pero Touya lo paro, no lo dejo irse, algo que sintió Lisener.
— Tomura... es encuentras mejor que yo al parecer...
— Me alegra que hayas despertado... y-yo... me iré
— Espera quien dijo que dejaría que te fueras? por mucho tiempo convivimos como familia... Ojichan...
— Sabes que suena muy raro que me digas así, sabiendo que soy menor a ti...
