Cápitulo 6.

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Matthew.

Cuando supe que mi padre y el de Michell, estaban pláticando sobre un caso o negocio me ofrecí para ir a llevarle unos documentos cuando llegué me encontré con Michell en un top que dejaba mucho a mi imaginación y ver a ese capullo en su casa me puso de mal húmor, y cachondo por verla arreglada... así que apenas llegué a ese despacho me encontré a mi mismo cerrando los ojos y con la malo al rededor de mi miembro pénsando en ella, cuando sentí la puerta abrirse supe que era ella su padre llegaría dentro de media hora y ver cómo reaccionó me causó risa en su momento pero ver que términara aceptando que acabase en su boca me hizo quedar aquí sin palabras, estaba bromeando.

No podía sacarla de mi cabeza, y en el tiempo que hablé con su padre no había estado muy atento así que fuí lo más breve posible para poder salir de esa casa, no estaba tranquilo sabiendo que ella estaba en ese mismo techo cerca de mí y a la vez lejos su padre me comentó que el chico que nos había traído la cena al despacho era Ian, su yerno quien tenía años de relación con su hija sentí envidia y me marche a casa luego de unas horas.

Al llegar me extrañó encontrarme a mis padres en la puerta de mi casa, cómo si fuesen a salir.

-¿A donde van?.-pregunté confundido

-Hijo, Kaia no llegó de la secundaria.-dijo mamá y observé sus ojos hinchados

-¿No sabes si saldría luego?.-preguntó papá obviamente preocupado

-No, y esto se les esta saliendo de las manos así que yo me voy a encargar de Kaia a partir del día de hoy, ¿sabían que la he pillado tómandose fotos de sus tetas en la cocina?.

-¡Oh dios mío Matt!.-exclamó mamá

-¿Qué dices?.

-Así cómo lo oyen, papá, mamá no quería ser cotilla y dejarla en mal pero claramente se esta descontrolando y es por la libertad que le han dado apenas llegué me va a escuchar y el castigo yo mismo se lo pondré así que suban a su habitación que haré unas llamadas.

-¿Llamadas?.-preguntó mi padre sin saber de que estaba hablando.

-Tengo varios amigos que asisten a fiestas de esa secundaria, así que si hubo una o habrá lo sabré y no será díficil encontrarla nada malo le paso, tranquilos.

Abracé a mamá, y le dí un apretón en el hombro a mi padre Kaia no ha sido fácil de criar debido a que por ser la menor la han cuidado y cómplacido en todo pero estaba en una edad díficil y no dejaría que nada malo le pasara por desobedernos fué cuestión de unas llamadas para que un amigo la trajiera hasta la puerta de mi casa, borracha.

Les notifique a mis padres el estado en qué venia y bájamos a esperarla en la sala, los tres el timbre sonó y allí estaba mi hermana menor con todo, menos sus cosas de la secundaria traía puesto un vestido azul corto y muy pegado a su cuerpo, el cabello en un moño despeinado y sudada por estar bailando espero, se reía cómo loca y Lucas no sabía por donde sostenerla para que no se cayera.

-Vén.-la cargué y la llevé al otro extremo de la casa donde estaba un jacuzzi.

-¿Qué haces?.-Preguntó mi padre y Lucas que me había seguido.

-No pienso esperar a mañana para reprenderla.-espeté molesto.

-Matt, no la lástimes.-dijo mamá preocupada.

Los ignoré a todos, y la senté en una silla del jardín ignorando aquellos ojos iguales a los míos pero joder, qué cabreado me ponía al verla borracha sólo tenía diesiseis era una niña tóme un valde y puse el jazucci con agua casi cóngelada cúando este se lleno se lo lancé, una, dos, cuatro veces hasta que dejo de reírse.

-¿Qué diablos te pasa Matt?.-gritó alarmada tosiendo por el agua y temblando a la vez.

-Tu sabes muy bien que me pasa.-le grité aún más fuerte.

-Me voy a cóngelar.-dijo frótandose los brazos.

-Eso debiste pensarlo antes de salir así, no avisaste que saldrías, estaban preocupados y llegas borracha ¿que coño te pasa?.-estaba muy cabreado tanto, qué ni mi padre ni mi madre se metían.

-¡ESTOY GRANDECITA MATTHEW.!-gritó.

-¿Lo estás?, Lucas.-llamé a mi amigo, quien fué mi compañero en algúnas asignaturas.

-¿Qué Matthew?.

-Dame sus cosas.-solté sin más.

-Sólo traía su célular.-me lo tendió.

Lo tomé , y inmediatamente tomé su mano se resistió sabía que tomaría su mano para desbloquearlo pero yo era más fuerte y aún había mucho alcóhol en su organísmo este cedió y lo desbloquee borré todas sus redes y las desactive gritaba y trataba de levantarse pero Lucas la sostenía con fuerza.

-Mañana mismo.-hable fuerte para qué le quedará claro-el mismo chófer que te lleva, te traerá.

-¡No!.-gritó nuevamente.

-¡NO ME GRITES, SOY MUCHO MÁS MAYOR QUE TÚ!, No te equivoques Kaia yo no soy mamá o incluso papá a mi me vas a respetar por que no caigo a tus malcriadeces, Simón te buscará una hora antes para asegurarse que no te vayas con nadie más, yo recibiré tus notas, estarás sin célular hasta que tu misma te compres uno, se cancelan las salidas me vale mierda si es para ir a hacer un trabajo, a partir de hoy los haces sóla.

-¿Estas jodidamente loco o qué?.

-Loca estas tú, qué con 16 piensas que te mandas sóla dúchate, y te quiero dúrmiendo no me obligues a encerrarte en tu habitación también.-y con eso salí hacía mi habitación.

Sabía que Lucas me seguía pero no dije nada al respectó.

-Cuidala Matt, donde estaba era muy peligroso,habían muchas personas drógandose y háciendo muchas cosas aún es una niña me parece bien tu castigo pero cuidala.

-Eso haré, gracias por traerla hermano.

-Sabes que lo hago sin importar cuidense cualquier cosa no dudes en márcarme.-dijo mientras se marchaba.

Eran casí las doce de la madrugada y no había dormido, así que me duché y me lancé a la cama muerto de cansancio apenas había dormido por que él célular me hizo sobre saltarme de la cama y el número desconocido aún más, cuando contesté supe que era ella, era su voz, era Michell.

Azúl Cielo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora