La ¿bella? y la bestia +²¹

Especial

|•Promesas y lealtad•|

Narrador omnisciente.

Ariella estrecha su mano con las dos personas que hasta el momento no han roto la promesa nueva que les brindo hace años.

Pero uno de ellos le da la culata de un arma, Ariella muestra confusión.

—Ahora nos matarás —dice una de esas personas —Supongo que ese es el castigo por haberte traicionado hace tiempo.

Ariella sonríe y niega el arma.

—Cuando los encontré les brinde una nueva promesa, y hasta ahora no la han roto así que...no tengo por que matarlos. —eso alivia a las dos personas frente a ella.

Por la puerta de su oficina cruza el leal sicario que a pesar de no conocerla no le ha fallado, y a pesar de joven conoce muy bien el termino “lealtad”

Ariella despide a las dos personas y estas se van dejándola sola con su sicario. Si no estuviera obsesionada sin duda tendría algo con él pero en sus ojos ve un futuro diferente.

Desliza por el escritorio hecho con madera de calidad un sobre. El sicario lo recibe y abre.

—Te he creado una cuenta a tu nombre, es irrastreable no te preocupes por eso. —el sicario le muestra una mirada de total agradecimiento.

Pues nunca pensó que cuando fue contratado por esta mujer este sería su recompensa.

—Te doy un consejo de millonaria añeja a nuevo millonario —Ariella no pregunta, demanda y el sicario asiente. —Funda una empresa, culmina tus estudios y vive lejos de lo que fuiste un día, no te arrepientas jamás.

El sicario no esperaba eso, no pensó tener esto de una mujer como ella.

—Tu empresa tendrá el respaldo de Arkim Enterprise y a tu familia no le faltara nada.

—Gracias —se inclina el sicario ante Ariella y ella chasquea su lengua.

—El beneficio de ser leal amigo mío —lo levanta y hace que la observe —Escucha a esta mujer enferma.

Ambos estrechan sus manos, el sicario le sería leal, mounstro o no, la mujer que tenía enfrente no era para subestimarla.

Ella podía ser tu mejor amiga o tu peor enemiga y la segunda opción no la quería, si ahí tenía más de lo que podía hacer matando a mas gente, sin duda no olvidaría ese termino jamás.

“La lealtad de una persona rota puede más que de una que vive en un arcoiris”

Y eso Ariella lo iba a descubrir.