Dìdì Ài Nǐ (YiZhan)

Happy ending

Maratón 3/3 final

-Felicidades por tu graduación Yibo-.

-Gracias profesor Yubin, ¿Dónde está mi ge? -

-Me sorprende que no lo sepas, si con tan solo ver tu celular puedes saber dónde está-. Espeta Yubin, puesto que ya todos incluido Zhan ya sabían que el anillo de Zhan era un rastreador. Le parecía risible que preguntara donde está. Por supuesto, cuando Zhan se enteró estaba indignado, pero luego de pensarlo detenidamente le pareció normal que el castaño lo hiciera, ya que tenía este terrible temor de no saber dónde Zhan estaba. Además, Yibo también tenía uno y, sintió que era lógico y bueno saber dónde estaba el otro. Por tanto, lo dejó pasar porque esta vez sirvió para que él no muriese.

Ante el ceño fruncido del menor, Yubin decidió hablar. - Ya, ya. Que amargado, Zhan está siendo retenido por varios alumnos dentro del pabellón. Algunos creo que piensan confesársele-. Insinuó Yubin, deleitándose con el disgusto en la cara del menor.

Yibo no esperó a que aquello sucediera, se encaminó de regreso al pabellón de actos ceremoniales. Y efectivamente ahí se encontraba su ge, siendo rodeado por chicos y chicas que lo miraban con ojos brillantes. Yibo hizo sus cejas en una línea, mirando con disgusto y celos el atrevimiento de sus compañeros, para con su prometido.

Sin mucho preámbulo, caminó abriéndose paso entre el pequeño grupo de graduados, llegando por detrás del pelinegro. Zhan no se advirtió de la presencia de su Didi, solo hasta que el menor rodeó su cintura con sus brazos y besó la parte trasera de su cuello. Xiao Zhan se tensó ante el atrevimiento de su prometido, girando su rostro con un pronunciado ceño fruncido. Que helaría la piel de cualquiera, menos de Yibo, que lo único que hacía es elevarle la libido.

-¿Por qué Zhan-ge no me ha felicitado aún? - se quejan pareciendo un niño. Zhan enarca su ceja izquierda.

-Suéltame Yibo-.

-¿Por qué debería? Oficialmente ya no somos profesor estudiante, sino que ahora somos pro/me/ti/dos. - Resalta cada sílaba viendo hacia el cúmulo de graduados que seguían viéndolos compartir su momento. Zhan evita poner los ojos en blanco ante la actitud del menor. Por supuesto, sabe que es lo que hace su travieso prometido, y aunque quiera quejarse. Sabe que no servirá de nada. Yibo ya es así.

-Está bien, felicidades Bo-di estoy muy orgulloso de ti- dibuja una sonrisa en su rostro. Yibo está feliz, pero no satisfecho. Por lo que, frente a todos, se inclina hacia delante y se apodera de los labios ajenos. Disfrutando del dulce néctar de los labios de su ge. Un coro de "oh" se escucha a su alrededor haciendo que el castaño sonría durante el beso.

Una vez satisfecho se separa de los suaves labios de su gege. Mira los brillantes ojos oscuros de su prometido y sabe que esta un tanto molesto, sin embargo, la felicidad predomina en su mirada.

Uno de los requisitos para ser pareja, es que Yibo debía de ser 100% sincero y natural, ya no debía de esconder ni reprimir ningún sentimiento, que sintiese por el mayor. Por lo que luego de que Zhan fuera dado de alta, Yibo comenzó a ser un sinvergüenza por completo. Siendo posesivo, celoso y muy pero muy cariñoso con su gege.

Afortunadamente, para la pareja todo estaba comenzando a tomar su curso. Wen Chao misteriosamente no había puesto una denuncia en contra de Yibo, siendo sentenciado a 25 años de cárcel bajo los cargos de secuestro, intento de asesinato y estupro. Este último fue un lindo regalo de parte de Yibo. Hubiese tenido más pero Zhan sospecha que, el no haber denunciado a Yibo por agresión, fue uno de los factores por los que recibió una sentencia más o menos decente.

Cuando el momento de testificar llegó, Zhan se sentía muy nervioso. Más por el hecho de que iba a ocultar cosas de lo que pasó, que por tener a su agresor enfrente. Y eso que Wen Chao, tan lastimado como estaba, todavía se atrevía a mirarlo con resentimiento y un odio completo, algo a lo que Zhan no podía renegar, era totalmente justificado.