La cafetería.
________.
Ok, esto es muy raro. ¿Por qué cinco, quiere que lo acompañe por un café? Vale, solo le seguiré la corriente.
Él se da la vuelta y comienza a caminar rápidamente, casi corriendo. Salgo de mi pequeño trance y lo sigo hasta afuera, que es donde se encuentra el auto.
Él se sube del lado del conductor y yo en el copiloto, casi que lo hacemos de manera sincronizada.
El camino a la cafetería es silencioso, un silencio nada agradable. Llegamos a la cafetería y aparca el coche en la acera, él se baja del coche inmediatamente y segundos después hago lo mismo.
Veo que se mete a la cafetería sin ni siquiera esperarme, segundos después de que él entre a la cafetería lo hago yo.
Me siento del lado derecho de cinco y esperamos a que llegue la persona que atiende. Mientras esperamos a la persona que atiende, un señor entra a la cafetería y se sienta del lado izquierdo de cinco.
-Perdón se tapó el lavabo... Bueno, ¿qué les sirvo? -dice la señora sacando una libreta pequeña de su bolsillo. Nos mira a los tres, con la pluma en la mano y esperando nuestros pedidos.
-Amm, un bollo de chocolate -pide el señor que está a lado de cinco y la señora lo comienza a anotar en su libreta.
-Bien -dice la señora cuando termina de escribir-. ¿Y el chico? -pregunta la señora, alternando la mirada entre cinco y el señor.
Hay unos minutos en los que nadie dice nada.
-¿Le traigo un vaso de leche? -pregunta la señora y veo que apunta algo en su libreta.
Al ver que nadie responde nada alza la vista y mira al señor.
-El chico quiere café... Negro -dice cinco y la señora lo mira no muy convencida.
-Que lindo -dice la señora, sonriendo, incómoda.
Volteo a ver a cinco y por poco me echo a reír al ver que sonríe de oreja a oreja, se ve tierno.
Giro la cabeza para ver la expresión de la señora, pero entonces me pongo nerviosa al ver que me está mirando a mí, como esperando mi pedido. Hay diferentes donas, no sé cual elegir, bueno si sé cual pedir, pero me da pena hablar.
-Amm...
Apenas y puedo decir eso, pues siento la mirada de cinco en mí y eso me pone aún más nerviosa. Sé que está impaciente porque diga mi pedido, pero hace tiempo que no hablo con nadie, solo con mi madre y mi hermana.
-Un café negro para ella también -le oigo pedir a cinco por mí.
-Ok -dice la señora, se ve bastante incómoda. Se da la vuelta y murmura algo que no logro entender.
Volteo a ver a cinco y veo que está hablando con el señor, vuelvo mi vista al frente y finjo no escuchar nada.
-No recordaba que este lugar fuera tan horrendo -dice cinco y hace una pausa-. Solía venir aquí cuando era niño, me escabullia con mis hermanos y comíamos donas hasta vomitar. Tiempos mas simples, ¿No? -dice cinco. Me quiero echar a reír, porque de seguro que el señor no entiende ni un coño.
-Ah, sí, supongo -le responde el señor.
La señora llega con nuestros pedidos y no los entrega a cada uno.
-Yo lo invito -giro mi cabeza para ver al señor y veo que le está pagando a la señora. ¿Qué habrá hecho cinco para que el señor nos pagará la cuenta?
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Lo siento si alguna vez dije que te odiaba.
Fiksi Penggemarlo siento si alguna vez dije que te odiaba. Cinco odia a _______, o al menos eso cree. ________, odia a cinco, o como ella lo conoce five. Será que solo finge. Descúbrelo en... Lo siento si alguna vez dije que te odiaba. No contiene +18. Esta histor...