†•Capítulo 18•†

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Enojo Espiritual

Siempre habrá razones por las que tengamos que enojarnos, cuando sentimos que algo no anda bien o algo lo provoca nunca sabremos con exactitud que cual será la razón de la verdadera causa hasta algún dia averiguarlo.

Nunca sabrás con quién te entrometes y menos sino me conoces del todo.

Algo nos hace saber que hay que poner límites entre nosotras, pues cada una tiene un poder, dominio y carácter que es diferente ala otra en donde cualquier pobre ser humano no conoce de lo que nosotras somos capaces de hacer, ya que si eso incluye en usar fuerzas desconocidas que algún día tendremos el control sobre ellas y eso depende de como nos sintamos.

Por aquel camino del bosque una figura encapuchada dirigía sus pasos hacia aquel pueblo donde se celebraba un casamiento donde esta misma dio una sonrisa dejando ver solo sus labios rojos, cuánto tiempo había pasado desde que ese pueblo tuviera un exitoso casamiento sin que ninguna arpía pudiera arruinar un momento tan especial cómo para echar a perder algo de verdadero significado, además de ya no ver a sus otras hermanas vagar por estos lados, ya que el único rastro que podía sentir era el de su hermana, la que tenía la habilidad de quitar la vida a quién sea con tal de tener un poco de sufrimiento, esta se había dejado guiar por su oscuro don, pues era muy conocida en historias y leyendas donde su otra hermana también lo era, de hecho esta era la que no se encontraba, ni siquiera un rastro o alguna conexión que le haga saber donde podría estar, la unica cercana es la que aún vive en ese pueblo que una vez ella había habitado después de que decidieran irse.

Una presencia aún costado hizo que ella borrará su sonrisa antes de dejar que aquella ente hablará.

—Mi Señora!.

Inclino su cabeza evitando ver a aquella mujer encapuchada.

— que noticias me tienes ahora?

—eh....si he descubierto que han llegado nuevos visitantes al pueblo desde.....la última vez que vino,tambien ha habido acercamiento de algunos fantasmas cercas a algunos chicos.

—alguno se ha atrevido a realizar su fechoría?- pregunto dejando que la poca luz de la luna evitará iluminar su presencia-

—no por suerte todos usan el brazalete, me he encargado de que sea así, con la ayuda de Amaris todos están a salvo, incluso hemos ayudado a regresar alos pequeños a sus hogares en caso de que se pierdan.

—es bueno escuchar eso, las has encontrado?

—no todavía no, mi Señora los espectros y entes no lo saben, creemos que puede encontrarse en aquella capilla donde.....

—no hace falta, mi hermana siempre se ha mantenido en las sombras y no dudo de que pueda estar ahí.

Aquella muchacha vestida de blanco con aquel ramo marchito de rosas entre sus pálidos y medio esqueléticos dedos había acatado su petición esperando a que dijera algo más antes de irse.

— dos cosas más y podrás irte a descansar, de aquí me haré cargo.

—e-esta segura?-pregunto asustada-

—por que no lo estaría, acaso cuestionas mis decisiones?-pregunto algo molesta sin mirar al chica quién negó rápidamente- la primera dile a Amaris y alos demás espectros que se mantengan al margen de respetar el límite entre los vivos no quiero enterarme que alguno se atreva a desobedecerme- un brillo peligroso hizo brillar sus oscuros ojos-

†Spectral Lover's† J.JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora