Me monto en la furgoneta de Dan, y veo como sus ojos no se apartan de mi silueta. Le sonrío y vuelve a apoderarse de mis labios. Vera a nuestro lado sonríe mientras varias lágrimas caen por sus mejillas.
-Qué bonito joder...- susurra con una risita. Me giro y la estrecho entre mis brazos.
-Algún día conseguirás a alguien... Y aunque sea imposible, lucha por él.- digo mirándole a los ojos. Ella asiente y vuelve a mirar por la ventanilla.
La dejamos en mi casa, y nosotros nos dirigimos a la de Dan. Entramos entre besuqueos y miradas que lo dicen todo. Él me coge en brazos, y entre risas subimos las escaleras hacia su habitación. Cuando me deja en el suelo, empieza a quitarme el vestido de novia mientras yo me arrebato el velo y el tocado. Nos lanzamos a la cama, y empezamos a deshacernos de todo lo que nos molestaba, hasta que nuestras pieles emanantes de calor, friccionan entre ellas. Y follamos. Follamos hasta que nos quedamos exhaustos, y el verbo 'amar' se quedó corto. Me tumbé en su pecho mientras él en bajito me cantaba 'Little Girl', y caí rendida.
Abro los ojos perezosamente y veo que el lado donde Dan estaba, está vacío. Miro una nota y sonrío.
'Ponte la ropa que te he dejado en la cómoda y baja al salón. Ti amo.'
Me levanto de la cama y abro la cómoda. Mi respiración se corta cuando saco el mismo vestido de Año Nuevo que utilicé hace 3 años. Me lo intento poner y me queda justamente como la última vez. Por si no lo recordáis, es un body negro de terciopelo, con mangas de tul, y la falda que llega hasta al suelo, del mismo tejido, adornado con pequeños diamantitos desperdigados y el escote es en forma de pico. Me pongo unos tacones negros que me ha dejado a los pies de la cama y me miro en el espejo. Me atuso el pelo un poco, me maquillo y bajo al salón. Joshua me ve llegar y sin mediar más palabras me hace una señal de que lo siga. Nos montamos en el en la furgo, y paramos tras unos minutos en carretera. Joshua me sonríe y me invita a salir. Cuando salgo, me quedo parada y esbozo una pequeña sonrisa. Nuestra playa... Las aguas se mecen tranquilas bajo la luz de la Luna, quien esta menguada. A medida que avanzo, veo a Dan vestido exactamente igual que aquel día en la playa de Año Nuevo.
-Hola.- digo cuando estoy junto a él.
-Oh, ya estas aquí.- dice sonriente.
-¿Por qué...?- digo, pero hace un gesto para que me pase.
-Hace unos años atrás, casi que atropellé a una chica que por poco me mata cuando intenté ayudarla.- me río y él mira al mar.- Me la volví a encontrar en el garito donde trabajaba varias veces, en mi restaurante... Decidí que debía hacer lo que me pedía mi corazón y el destino, que era que la eligiese. Y así fue como me enamoré. Pero la cagué y la perdí. Ella me ayudó a iniciar mi carrera, pero me sentí vacío sin ella. Fueron los 3 años de distancia más duros de mi vida. Pero el destino como sabía que su nombre estaba escrito en él, me hizo volver a topar con ella. Aun haber estado separados, la llama que teníamos en los principios de nuestro amor, aún seguía encendida. Pero tuvimos piedras en el camino. No fue fácil poder tenerla.- hace una pausa y me coge da las manos.- Pero ahora por fin la tengo delante, y le he dicho todo. Marlena, te quiero desde el primer cruce de miradas. Te prometo que solo tus manos serán las dueñas de cada rastro de mí. Y yo espero ser al igual para ti... Eres mi pequeña, Marlena. Mi todo...
-Yo también te quiero Dan...- digo sollozando casi. Él me acaricia la cara y sonríe de lado.
-Cuando te vi vestida de novia supe lo que quería contigo. Marlena, quiero que seas la que encuentre todos los días en mis despertares. Quiero que seas la que en cada concierto me espere con los abrazos abiertos para darme el cariño necesario. Quiero que seas la única mujer que amar...- se arrodilla y saca un anillo de su bolsillo.- Pequeña, ¿firmarías tu futuro junto a mí?
-Dan... Claro que sí...- digo ya con un sollozo. Él me coloca el anillo y se levanta para estrecharme entre sus brazos. Nos besamos y miramos al mar.
El mar. Nuestro hogar. Nuestro comienzo de historia. Nuestro final. El amor que se llevó, pero a los años devolvió...
-Te amaré siempre pequeña...- dice él arrimándome a él mientras tenemos la vista fija en el mar.
-Yo también mi estrella...- le respondo juntando mi cabeza a él.
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Lo que nos devolvió el mar. (2)
Teen FictionSegunda parte de 'Lo que se llevó el mar'. Ellos dijeron que su historia de amor se la llevó el mar aquella noche. Pero lo que ellos no saben es que toda ola regresa a su orilla, y con ellas las palabras que creían estar sumergidas. Con sus nuevas...