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Pov Sam
Así fue cómo llegué a la escuela de monjas. Decir que mi estadía fue buena era mentirles. Desde el primer momento en que puse un pie en aquel lugar supe que no terminaría bien.
Cuando llegamos, el chofer me obligó a bajar y me recibió una monja
- ¿Qué es este lugar? - pregunté con temor y muy asustada -
la monja me observó detenidamente y se movió para recoger un sobre que le extendió la persona que me trajo hasta aquí.
- Acompáñame adentro - dijo, con gentileza -

La miré dubitativa, pero comencé a caminar en dirección a la inmensa casona...

- No tienes de que preocuparte - comenzó a hablar - te vamos a ayudar - agregó y no pude evitar sentir un cosquilleo raro al escuchar eso -
Entramos al lugar y no había cambiado en absoluto. El lugar tenía más de un piso, pero lo que realmente me llamaba la atención eran los tonos grisáceos que predominaban en la estructura. Eché una mirada rápida y pude notar muchas puertas y pasillos extensos.

 Eché una mirada rápida y pude notar muchas puertas y pasillos extensos

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Sam: -decidí intervenir - Señora Monja... - la llamé y detuve mis pasos - Sabe, yo no quiero ser monja... - dije con muchos nervios -
- Oh, querida... - dijo, intentando no reírse en mi cara - No estás aquí para ser monja... no por ahora - divagó en lo último - este es tu nuevo hogar...
- ¿Cómo dice que dijo? - exclamé y comencé a alterarme -
- Tranquila hija, ya habrá tiempo para las explicaciones. Por favor, sigamos que tengo que llevarte a tu cuarto...
La monja siguió hablando, pero no la escuché en absoluto. Mi mente no lograba procesar esto. ¿¡Mi madre era capaz de desistir de mí?
Continue pensando sobre todo esto y necesitaba respuestas. Detuve mis pasos y la monja lo notó
Monja. ¿Por qué te detienes? Vamos...
Sam: No - negué - no iré a ningún lado. Tengo que salir de aquí... - exclamé comenzando a alterarme - ¿Dónde estamos? Necesito hablar con ...
Monja: No te puedes ir. Ahora eres parte de la comunidad... - habló -
Sam: No me interesa ser parte de su estúpida comunidad - chillé - no pienso quedarme un minuto más aquí... - me giré intentando volver por el camino, pero me tomó del brazo y me hizo girar.
Monja: deberías intentar calmarte. No puedes irte y no puedes hablar así en la casa de Dios - me remarcó -
Si esta era la casa de Dios la verdad es que se había quedado corto en iluminación pensé para mí misma.
Sam: ¿¡Puede por las sagradas escrituras soltarme ?! - dije con claro sarcasmo -
Monja: Vaya, muchachita veo que tendremos que trabajar mucho en ti...
Intenté volver a alejarme cuando sentí una presencia detrás de mí. Me giré y me encontré con otra monjita que se había acercado.
¿Qué sucede aquí? - exclamó molesta intercambiando miradas entre ambas -
- Hay un error, yo no debería estar aquí.... Yo no - intenté hacerles razonar
- Escucha bien porque seré muy directa. Aquí no hay errores. Si llegaste hasta aquí es porque debías estarlo así que deja de hacer berrinche y colabora un poco - expresó con autoridad -
- Quiero hablar con mi madre, exijo hablar con ella ¡Ahora! - demandé -
- ¡Calmate! Primero te ubicaremos en tu habitación y te enseñaremos el lugar además hay un reglamento que todos debemos cumplir sin objeción - habló la monja -
Esto era muy surrealista jamás pensé en mi vida terminar en un lugar así.
Me llevaron hasta mi habitación, me explicaron brevemente como se manejaban y hablaron sobre que tendría la visita de una madre superiora... una de sus reglas era que no podíamos usar celular, aunque de igual manera yo no lo tenía. Ellas eran las encargadas de pasarnos mensajes o llamadas. Además, había un cronograma diario que si o si se debía cumplir con tareas, actividades y cursos.
Lo odioso era tener que usar un uniforme tan chato e insípido de color gris. Si hasta parecía una reclusa si me ponía eso.
Esto era igual a la escuela con la diferencia de que había unas monjas rezando y haciendo ofrendas por donde vieras. Además de que tenía que dormir en este lugar desagradable.
La primera noche que pasé allí aún no caía en donde estaba. Esperaba que apareciera mi madre diciendo ''Era una broma, volvemos a casa'' pero eso nunca sucedió.

''prologue'' (Finalizada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora